Me desperté algo agitada luego de soñar con la vez que intenté matarme con esa navaja... L seguía a mi lado, aun durmiendo, cosa muy poco común en él. Me volteé para quedar dándole la espalda... ¿Qué pasó anoche? ¿De verdad, después de todo lo que pasó, se puso a llorar? ¿Me pidió que me quede con él después de llevar años tratando de empujarme lo más lejos posible? Yo... ya no sé qué pensar. Volví a girarme pero quedé mirándolo... su cara estaba tan... tranquila pero a la vez se notaban sus ojeras. También tenía una pequeña sonrisa en sus labios. Me pregunto qué estará soñando...
Me senté en la cama. Después de todo, ¿qué hago durmiendo con él? Quiero decir... en la misma cama. Dejé escapar un suspiro. No sé si estoy decepcionada conmigo misma por haberlo hecho o si de verdad... quiero creerle... otra vez. Al fin y al cabo, anoche estaba llorando... Hacía muchísimo tiempo que no lo veía así. Y menos aún tan desesperado, parecía que se iba a ahogar.
Me siento al borde de la cama y dejo caer el peso de mi cuerpo sobre mis brazos, que están apoyados sobre mis rodillas. Vuelvo a dejar escapar otro suspiro mientras me paso una mano por el cabello. Miro por sobre mi hombro hacía L. Hacía mucho que tampoco lo veía dormir así. Entonces, me di cuenta que no lo veía hace años... que, a pesar de que mis recuerdos parezcan más cercanos, yo no tengo recuerdos de esos años que pasé dormida. No sé qué hacer. Una parte de mí dice que me vaya lo más lejos posible, que ya sufrimos lo suficiente, que no lo necesito pero la otra... pero la otra solo le dice que cierre la boca, que deje de pensar y que vaya con él. ¿Por qué eres así?
Vuelvo a dejarme caer sobre mis manos como derrotada mientras dejo salir otro suspiro. Si sigo pensando, voy a ponerme a llorar... Entonces, comienzo a escuchar ruido detrás de mí. Vuelvo a mirar a L por sobre mi hombro. Tiene los ojos abiertos, pero no se mueve. Nuestras miradas se cruzan hasta que yo la aparto para esconder mi cara entre mis manos y una cortina de cabello. Sigo escuchando ruidos detrás de mí mientras intento no llorar.
-¿Estás bien? -Me pregunta L mientras apoya una mano en mi hombro.- ¿Te sientes bien?
-Sí. -Dejo salir intentando que suene lo más normal posible.- Es solo... -Siento que se me corta la voz.- Nada, voy a estar bien.
-¿Segura? -Dice mientras lo escucho moverse.- Te sientes bien, ¿no?
-Sí, de verdad. -Levanto un poco la mirada y cruzo mis ojos con él quién estaba agachado, en cuclillas, buscando mis ojos. Tiene una mano cerca de su boca; sigo la otra con la mirada y la encuentro sobre mi pierna, cerca de la rodilla.- Solo... -No puedo dejar de mirar su mano.- Necesito un segundo.
-Bueno... -L sigue mi mirada, se da cuenta que es lo que estoy mirando y, rápidamente, la saca de ahí.- Lo... lamento. Yo... no pensé en lo que hacía.
-Está bien. -Contesto algo ácididamente mientras una ola de tristeza se choca contra mí.- Igualmente, ni siquiera lo puedo sentir. Da igual.
-¿D... -L se traga sus palabras antes de dejarlas salir. Agacha la mirada y mira hacia mis piernas. Luego vuelve a levantarla y mira directo a mis ojos. Quiero cortar el contacto visual pero lo siento como un desafío, así que lo miro aún más intensamente. L vuelve a romper el silencio.- ¿Ya no puedes sentir?
-Desearía no poder sentir nada de nada...
-Digo, con tus piernas.
-Prácticamente no. -L volvió a acercar su mano a mis piernas, como curioso pero a la vez cauteloso, como si se acercara a una bomba.- Está bien, no muerdo y tampoco me vas a romper si es lo que te preocupa. -¿Por qué le di permiso? Sí, quiero volver a sentirlo pero sé que no lo haré. Quiero que me toque pero... no sé... yo soy una idiota. Tomo su mano que aún duda por la muñeca y se la acerco violentamente a mi rodilla.- ¿Ves? No me voy a morir. -L me miró a la cara y luego volvió sus ojos a mis piernas. Después de unos segundos, comenzó a bajar su mano hasta mis tobillos y volvió a subirla sin dejar de mirarme. Hubiera jurado que sentí el calor de su mano a través de la ropa, probablemente sea mi imaginación o mis recuerdos. De cualquier manera, estaba incómoda pero por no lo que estaba haciendo, quería más, así que decido asustarlo. Hago una falsa mueca de dolor- ¡Ahh!
L rápidamente aparta su mano y me mira preocupado. Al verlo así de vulnerable, no puedo aguantar la sonrisa que estuve aguantando desde que empecé la broma permite. Finalmente, me echo a reír mientras tiro la cabeza hacía atrás. L aún no se movió ni dijo nada. Creo que está procesándolo todo, me gustaría saber con certeza en qué piensa. Me quedo apoyada sobre mis brazos con la cabeza tirada hacía atrás y me siento triste, voy a extrañar esto... dejo escapar un suspiro que viene acompañado de lágrimas que no puedo controlar. Escucho a L moverse pero no puedo enfrentarme a él ahora.
Me apuro para levantarme y salir del lugar sin mediar palabra. A pesar de que él estaba parado a un costado, lo hago perder el equilibrio. Aproveché el momento para escaparme. Cerré la puerta detrás de mí y me encontré con Milo y Gun. Milo levantó la cabeza al escuchar el ruido de la puerta y Gun luego, siguió su movimiento. Yo estaba congelada en el lugar, podía sentir el frío en mis piernas pero lo ignoré. Milo dijo algo pero las lágrimas me nublaban la visión y no quería darle respuestas a nadie, ni siquiera podía responderme a mí misma. Me apuré para irme de allí hasta donde era mi cuarto que ahora estaba prácticamente vacío. Escuché la puerta del cuarto de L abrirse pero no quería responderle nada a nadie, ni siquiera a mí. Cerré la puerta y la aseguré detrás de mí. Me dejé caer hasta ocultar mi cabeza entre mis piernas y brazos. Estoy tan confundida... no quería ver a nadie en ese momento, ni siquiera a mí.
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Ilógico (Ilegal e Insípido: Tercera parte) [Death Note]
Fanfiction*Tercera temporada de Ilegal, en base al primer final de la historia. Continuación de Insípido. Luego de una "despedida" amarga, L e Isa se rencuentran de la manera menos pensada.