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Esperando.



-¡Retirada!

Gritó James. Corrimos cubriendo a los niños.

-¡A los camiones!.-grité.

Todos fuimos hasta los camiones y con la mirada buscaba a Rick pero no lo veía.

-¡Aaaaarghhhhh!

Gritos desgarradores se empezaron a escuchar. Cuando los camiones se llenaron salieron de la comunidad.

-¡Rick!, ¡Luke!

Gritaba una y otra y otra vez. Sólo peleaba y gritaba desesperada.

-¡Tenemos que irnos!

Me dijo James, él tenía a Joe en sus brazos.

-¡Llevalos a Alexandria!

Ordené.

-¡Rick!

Seguía gritando.

La comunidad estaba infestada de caminantes, unos comiéndose a alguien, los caballos habían huido y sólo quedaban un par.

Corrí a los establos. Tomé a uno y salí de ahí, seguí buscando con la mirada a Rick y desde arriba del caballo disparaba a los caminantes.

De mi casa salió Rick con Luke, llevaba una manta blanca con sangre de caminantes, así se clamuflajeó entre todos. Sabía que estaban bien, que saldrían con vida.

(...)

Cabalgué hasta Alexandria esperando que todos hubieran llegado con bien.

Las puertas se abrieron, habían pasado varias horas y era de noche.

-Dime que está bien.-me topé con Mich pues fue quien me abrió la puerta.

-Llegaron todos bien.

-¿Rick?,¿Él está aquí?

Señaló hacía un lugar y corrí hasta allá.

-¡Gracias a dios estan bien!.

Le dije a Rick al verlo en el patio de una casa, Luke estaba jugando con otros bebés en el pasto.

Tomé a Luke en brazos y lo besé en la frente.

-Gracias por traerlo a salvo.- miré a Rick.

-Es mi hijo, no lo podía dejar.- habló con honestidad.

La gente de la comunidad me recibió con abrazos y lamento.

-Lo perdimos todo.-me dijo James.

-Podemos salvarlo. Una buena estrategia nos ayudará.-respondí.

-Perdimos a mucha gente.

-No podemos rendirnos.-susurré. -Podemos empezar aquí, hablaré con Rick para que nos deje vivir aquí un tiempo.

-Hoy no es un buen día. Todos estamos cansados y tristes. Mañana será un mejor día.

Me dio un beso en la frente y me abrazó. Estábamos todos amontonados en casas pero estábamos bien.

La gente de la comunidad venía a nosotros a platicar y a llorar, estaban preocupados.

-Bien, necesito su atención.- empecé a hablar. -Hablaré con Rick para que podamos quedarnos aquí el tiempo que necesitamos para recuperar el Océano. Hasta entonces trabajaremos en lo que nos pidan hacer. Mañana iré al campamento y avisaré a todos lo que pasó. Descansen hasta mañana que será un día pesado.

El Mar En Tus Ojos. |Rick Grimes & Tú|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora