Capítulo 2

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-Me despidieron... - dijo hwanwoong con pesadumbre, tomando asiento al lado de su amigo

-¿Qué? - soltó Leedo con el sueño fruncido

-Le arroje una copa de vino a un imbecil que se quiso pasar de listo conmigo- suspiro, Leedo rio.

-Genial, me hubia encantado ver eso - dijo el mayor divertido

-Pues a mi me hubiera gustado que ese tipejo nunca hubiera ido al restaurante, aún tendría mi empleo- se quejo el menor.

- Siempre puedes conseguir otro hwanwoong, además, no es como si en verdad te hiciera falta.

-Pues si, si lo hace, me mantiene ocupado...

-Aún no termino de entenderte- comento Leedo- ¿No te basta con los deberes de la universidad?

- Sabes a donde va a parar esta conversación y no tengo ganas de volver a explicarte lo de siempre... ¿Porque no mejor me ayudas a buscar un nuevo trabajo esta tarde?

-De hecho... Ahora que lo mencionas, tengo el empleo perfecto para ti- comento- y de paso también para mi - sonrió

-No me gusta la forma en la que estas sonriendo- dijo hwanwoong algo desconfiado

-No te preocupes... se que te gustará.

- No creo qu...

-!Bien, todos en la segunda lectura de página 55, ahora!

La conversación de ambos chicos se vio interrumpida por el maestro que ingresó al salón, con un aparente mal humor.

- Genial.. - susurro Leedo- tendremos que aguantar a este anciano toda la mañana.. - hwanwoong solo suspiro y rodó los ojos

Mientras transcurría la clase, al castaño le era imposible prestar atención a las palabras que salían de la boca del maestro con fastidio, no podía dejar de pensar en lo ocurrido una noche atrás.

Le molestaba que aquel hombre siguiera rondando por su mente, y no sólo era el hecho de que aquel tipo era atractivo, no, había algo más, que hwanwoong no podía descifrar.

Se repitió a sí mismo varias veces que ya era hora de olvidar lo sucedido, porque ¿Cuántas probabilidades hay de volver a encontrarse con él? Ninguna, nulas, nada.

Lo mejor sería no darle tantas vueltas al asunto, lo despidieron por culpa de un adonis super sexy que quizás jamás vuelva a ver en su vida y que lo puso tan nervioso como nadie lo había hecho antes, sin olvidar el hecho de que es un baboso arrogante. Solo eso, nada importante. Así que.... Lo mejor es olvidar el asunto. Para la próxima semana ya tendría un nuevo trabajo y todo el asunto sería olvidado.

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- ¿Estas seguro de que esta todo? - pregunto el joven de cabellos negro.

- Sí, señor esto lo que pude conseguir con el poco tiempo que me dio - respondió el otro presente en la oficina.

-Bien, puedes irte.

Cuando se encontró solo se puso a analizar cada página de la carpeta que su empleado le había entregado. Reviso todo con detalle

- Yeo Hwanwoong.... - susurro para el mismo - eres una persona muy interesante.. creo que he encontrado un nuevo entretenimiento.. - sonrió

Kim Youngjo, también conocido como Ravn, era una persona muy volátil. Hijo de uno de los magnates más importantes de toda Asia, aunque era sumamente responsable y ser un As es los negocios no le quitaba lo caprichoso y manipulador. Cuando algo se le metía en la cabeza no había vuelta atrás, siempre el consigue lo que quiere, no hay excepciones para él.

Con 26 años había obtenido su propia reputación como empresario estrella, el sucesor de su padre, el único heredero del imperio de la familia Kim, actualmente director de la compañía.

Ese hombre lo tenia todo, en todo el sentido de la palabra. Aunque tenía alguno de sus defectos arrogante y engreído a más no poder y hasta se podría decir en el fondo es malvado y nunca aprendo lo que es empatía.
Típico ¿no?

El mencionado sonrió cuando logró identificar un nombre en específico entre todos los demás.

Yeo Taekwoon

¿Cómo poder olvidar ese nombre? Él mismo se encargo de comprar la empresa de aquel sujeto, la cual había quedado en banca rota. El hombre aún le debe mucho dinero a su familia.

Según lo que leía, hwanwoong llevaba  una vida acomodada y había cortado la comunicación con su padre.

¿Lo odia? ¿Lo abandono por su situación en la empresa? Fueron las preguntas que estaban en la mente de pelinegro.

En pocos segundos ya se estaba armando un plan en su cabeza, el padre del chico sería la carnada perfecta. Un hijo haría cualquier cosa con su padre ¿No?

Youngjo lo averiguaría.

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- !Ni lo pienses!- grito Hwanwoong.

- !Ay por favor! ¿Que tiene de malo?- Pregunto Leedo 

- No voy a trabajar en club nocturno, Leedo, sabes mi nivel de tolerancia con los clientes pesados, no durare más de dos horas.

- No tienes de que preocuparte, el propietario es un amigo de la infancia..... !Hasta creo que los presente en una ocasión!

- ¿Si? ¿Cual es su nombre?- pregunto Hwanwoong 

- Kim Jinyoung, su familia es muy rica pero el no esta involucrado en el negocio familiar 

- Ya veo....No lo sé Leedo...

- Vamos, sólo.....solo has un pequeño periodo de prueba, por algunos días, y si no te gusta pues lo dejas y buscamos otra cosa.....¿Que dices? Será divertido.

-Bueno- suspiró- Lo voy a intentar a ver que tal.....

- !Si!- grito Leedo. Hwanwoong puso los ojos en blanco. 

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El sonido de la puerta resonó por toda la casa, alguien la golpeaba con bastante fuerza.

Pasó sus arrugadas manos por su oscuro cabello con algunas hebras blancas. Su cabeza aún dolía por la resaca y aquel estruendo solo empeoraba las cosas.

-!Ya voy!

Abrió la puerta y en seguida tragó en seco al observar a los dos hombres vestidos de negro que se encontraban al otro lado.

- El señor kim se esta cansando de ser paciente, señor Yeo, debe saldar su deuda cuanto antes o habrá consecuencias- dijo uno de ellos con una voz intimidante 

-Por supuesto...claro que pagaré, solo necesito más tiempo...

- Ya ha pasado demasiado, el señor Yeo quiere su dinero ahora 

-Saldare mi deuda lo más pronto posible...dígale al señor Yeo que no tiene nada de que preocuparse- respondió kim no muy seguro de lo que decía.

- La próxima vez serás más que una simple advertencia, téngalo presente, señor kim.

Dicho estos ambos hombres se marcharon del lugar. Yeo Taekwoon cerró la puerta detrás de si y a pasos lentos se dirigió a la cocina, donde saco una botella de licor y le dio un trago. Debía embriagarse lo más rápido posible .

Solo estando ebrio podría olvidar todo. 

 𝕋𝕠𝕩𝕚𝕔 - 𝕐𝕠𝕦𝕟𝕘𝕨𝕠𝕠𝕟𝕘 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora