𝐇𝐄𝐒𝐓𝐈𝐀 ៹ 𝗍𝗐𝖾𝗇𝗍𝗒 𝗌𝗈𝗇𝗀𝗌.

❛ 𝗋𝗎𝖽𝖾 ; 𝘀𝗵𝗮𝘂𝗻 𝗺𝘂𝗿𝗽𝗵𝘆.

꒰꒰  ❛ ❏ the good doctor. ༉

◜💉⋆彡ᵎ ִֶָ  it was a good
day. we saved a life...

━━━━━━ ❨✩❩ ariel ༉

          SÁBADO EN LA MAÑANA, salto de la cama con los nervios a flor de pie, procurando hacer el mínimo de equivocaciones en la preparación del día que esperaba fuera especial tanto como para mí como para mi novio. Lo primero que hago es ducharme, para después vestirme. Y me puse mi mejor traje, el que constaba de un vestido rojo carmín con los hombros del vestido color negro.

Aquel día mi horario era nocturno, por lo que no tenía que excusarme con Shaun sobre mi falta en el hospital, él se había marchado desde temprana hora, ansioso por una cirugía. Suelto un suspiro mientras entro al auto y conduzco como un jet. Todo el camino hacia ti, pienso.

Al arribar al hospital me dirijo a la oficina de mi padre, haciendo los tacones resonar a través de los pasillos. Primero necesitaba su bendición a la idea que venía planteándome desde semanas atrás.

Me saludó como de costumbre, interrogándome de mi presencia en el hospital fuera de mi horario establecido, por lo que con una sonrisa hablé.

—Toqué a tu puerta con el corazón en mi mano, para hacerte una pregunta. Porque sé que eres un hombre de la vieja escuela —ante la confusión recibida por el doctor Aaron Glassman decidí aclarar mis palabras—. ¿Puedo tener a tu hijo por el resto de mi vida? ¿Puedo casarme con Shaun? Papá, ves en Shaun un hijo del que cuidar, y aunque él no lo admita ve en ti el padre que nunca tuvo. Así que, di que sí, porque necesito saberlo.

Mi padre suspiró. —No creo que debas pedir mi permiso, Ariel, Shaun y tú se aman, llevan seis años luchando por su relación y no soy nadie para impedirte amarlo.

Ella, insatisfecha, arrugó la nariz y se cruzó de brazos. —¿Por qué tienes que ser tan grosero? Podrías seguir mis juegos al menos una vez en la vida. ¿No sabes que soy humana también? Necesito las bromas infantiles de vez en cuando.

—Siempre las has necesitado, Ariel. Perdón, pero sigues siendo una niña en el cuerpo de una mujer.

—Me tomaré eso como un insulto —soltó una exclamación a la par en que se levantaba de la silla frente al escritorio—. Bueno, pues voy a casarme con él de todos modos.

—¿De verdad? —se burló el mayor ante la actitud infantil de su hija.

—Sí, no importa lo que digas. Y seremos una familia oficial.

—Suerte, cariño —el hombre se levanto y envolvió a la pelirroja entre sus brazos, depositando un suave beso en su frente.

—No es como que me fuera a rechazar, ¿No? Shaun aún en sus mejores días le cuesta expresarse. ¿Y si dice no? ¿Y si me termina? Papá, no puedo vivir sin él.

—No lo dudes ahora, sirenita —la empujó suavemente al pasillo—. Deseas casarte, te lo mereces, pero ocurrirán tres cosas. Aceptará, lo discutirán y llegarán a un punto sobre esto en el futuro, o terminarán. Y, por mucho que aprecie a Shaun, deberías buscar a alguien con tus mismos intereses.

—Tú sabes que él me ama, entonces espero sea la segunda —suspiró, sin contener sus nervios—. Él irá a cualquier lugar que yo vaya —murmuró para ella, intentando elevar sus ánimos.

Y con el corazón en su garganta, caminó a la cafetería durante el descanso de Shaun, observándolo platicar con el resto de sus compañeros. Ella sin importar el día, si se encontraba trabajando o en un descanso, ocupaba un espacio para comer con Shaun en aquel lugar, para crear costumbre.

—Chicos, ¿Qué tal? —recibió sonrisas y saludos alegres—. ¿Me permiten un momento a solas?