capitulo 21

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Si algo podía destacar Steve de como se sentía no podría hacerlo,le hacía feliz saber que Tony pronto vendría a su mismo colegio y incluso María le había ofrecido ir con ellos a comprar los uniformes del castaño.

Sonrió aceptando pero admitía que después de caminar por toda la tienda estaba algo cansado aún que si de algo nunca se iba a cansar eso era de ver le rostro y facciones distintas de Tony al mirar los uniformes, le gustaba mirar como parecía tener un gesto enojado o cuando se sonrojaba por qué notaba su mirada.

Fue entonces que supo que observaba de más a Tony haciendo que tomara un tono rojizo en las mejillas y orejas, admitía que el uniforme del cual le agrado ver más a Tony era el que traía una falda le parecía bastante adorable ver la mueca de la cara del castaño indignado hacía María quien solo se reía aún que una parte de el agradeció que no fuera el elegido por Tony.

Cuando esa señora a sus palabras vulgar trato de darle un golpe a Tony no lo pensó ni dos veces cuando lo atrajó a el tirándole de la camisa para abrazarlo, era algo que nunca podía controlar y no quería hacerlo si un día Tony se sentía en peligro quería estar para el por qué sabía que era un sentimiento mutuo.

Cuando por fin llegaron a casa su madre los saludo pero se preocupo un poco al ver la mueca en el rostro de la omega mayor quien estaba mayormente tranquila, y no ayudo que no se quisiera apartar de Tony haciendo que pasaran directo a la casa Stark.

Cuando Natasha les iba a preguntar cómo les fue le gruño para después soltar un "Lo siento" agarrando de la mano a Tony y correr a el cuarto del castaño, tenía miedo de su propio instinto y no lo negaba, sabía que no sería capaz de hacerle daño a Tony pero eso no exoneraba a todas las personas.

Se dejó caer en la cama del castaño ante su atenta mirada, sabía que tenía un olor lo suficientemente fuerte como para doblegar a todos en la mansión y eso era lo que menos quería hacer enredándose entre las sábanas que tenían el olor propio y del castaño, una parte de el tenía miedo que si un día su alfa lo controlaba Tony se alejara de el al ver lo que podía causar.

- Steve ¿Te sientes bien? - dijo Tony mientras trepaba a la cama y se acostaba a un lado de el quedándose quieto por unos minutos.

- Steve ¿Quieres que llame a Natasha para que te revisé?. - volvió a mencionar con paciencia mientras trataba de retirar la almohada que tenía el rubio tapándole el rostro.

- no era cierto lo del repartidor, Steve... - ante la negativa del rubio recurrió a su última carta.

- he Steve te estoy hablando, respóndeme.

Unos minutos pasaron y el rubio retiró la almohada para abrazarlo cosa que le hizo sonreír inconscientemente, el rubio tenía los ojos como si estuviera apuntó de llorar pero toda la tristeza, miedo o incluso confusión se fue cuando enterró su cabeza en el pequeño y frágil cuello del castaño.

Tony sonrió si bien sabía que su rubio aún no se sentía bien al menos ya estaba un poco más tranquilo algo que hizo que su lazo se dejará de tensar con sus emociones negativas.

- Tony aún si hiciera algo malo ¿Me seguirías queriendo? - pregunto sin verlo a la cara.

- oye el que hace cosas como romper jarrones y no decirlo soy yo - dijo para bromear pero al notar tensión en el rubio continúo - pero yo siempre te voy a querer y por lo mismo no voy a dejar que hagas algo malo.

Ambos se acostaron, se sentían cansados cuando pasaban un día así o al tener emisiones muy fuertes si bien su lazo podía ayudarlos a recuperarse también se veía afectado cuando una de las partes estaba mal, los doctores diagnosticaban que cuando entrarán a la adolescencia esto se bajaría permitiéndoles más libertad aún que no se comprobaba a ciencia cierta, eran la primera pareja totalmente de sangre pura a la par que destinados teniendo muy pocos registros.

- Tony te quiero.

- yo quiero a las donas - dijo sin prestar atención a las palabras del contrario por tratar de identificar lo que pasaba por su lazo pero ante el aroma de tristeza de Steve volvió en si. - y también te quiero a ti.

Tony sabía de la preocupación que sentía  Steve pero no encontraba el por qué, Steve todavía no era tan grande como para hacerle daño a alguien más, seguía siendo bastante delgado aún que había mejorado en altura aún era más pequeño que Bucky el cual tenía su misma edad, tomaba en cuenta las fermonas del rubio aún que el no lo podía sentir como una total amenaza ya habían tenido encuentros tensos por estás aún así el siempre estaba para hacer sentir mejor a Steve y que este no se sintiera a la defensiva.

- hey Steve eres mi mejor amigo y no me gusta verte así ¿Me quieres contar que te pasa a mi o a un adulto? - pregunto mientras acomodaba los cabellos del rubio.

Steve solo asintió para acomodarse mejor en la cama, por lo general evitaba hablar de lo que sentía por vergüenza, en la casa los únicos alfas que habían eran Howard y Natasha quienes aún que tenían su confianza se sentía algo incómodo de hablar de ello.

- Stiff no estés triste, yo también tengo un impulso o bueno es como un presentimiento. - dijo Tony bastante casual tomando toda su atención.

- ¿Y que te dice? - preguntó mordiendo su labio con algo de miedo a la respuesta.

- que nunca me vaya de tu lado. - soltó para bostezar como si fuera dicho un simple buenos días, no por qué lo tomara como algo poco importante si no por qué pensaba que Steve ya lo sabía.

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He estado pensando en hacer otra portada ¿Que creen ustedes?

Sin más me despido mis amores bye bye ❤️🥰

Mi alma destinada (En Corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora