Mi Secreto

Si no te hubiera conocido.

Pov Gray.

No pude alcanzar a Natsu, él corre muy rápido y no logré ver por dónde se fue. Pero tengo una idea de dónde se metió.

“Claro... Fue a descargar su ira con el saco de boxeo...”

Saqué mi celular mientras iba de camino a mi casa, y le marqué a la persona que me ayudará con Natsu.

Gray: ¿Zeref? ¿Te desperté?...-pregunto al escuchar su voz adormilada- Disculpa la hora pero necesito tu ayuda con Natsu...-guardo silencio mientras me pregunta que pasa- Bueno, te puedo decir que no tomó muy bien el secreto de Lucy...-le informo a lo que él me da la respuesta que esperaba escuchar- Te lo agradecería mucho...-le digo sincero- Buenas noches, y mejórate de esa gripe. Adiós.

Sí, el está enfermo y por eso no fue al concierto, y Mavis se había quedado a cuidarlo... De seguro ella ya debe de estar en su casa.

Pov Zeref.

Una llamada entrante de mi celular me despertó, obvio que me molesté un poco pero luego reconsidere que podía ser una emergencia.

Así que atendí la llamada.

“¿Pero quién molestará a esta hora?”

Zeref: Hola...-dije medio dormido

Gray: ¿Zeref? ¿Te desperté?...-pregunta al que reconozco como Gray.

Zeref: Noooo... ¿Qué te hace pensar eso?-le digo irónico.

Gray: Disculpa la hora pero necesito tu ayuda con Natsu...-me dice algo preocupado, lo que hace que me siente en la cama de golpe.

Zeref: ¿Con Natsu? ¿Sucedió algo?-cuestiono.

Gray: Bueno, te puedo decir que no tomó muy bien el secreto de Lucy...-me informa.

Zeref: Ya lo sabe-susurro para mí- veré qué puedo hacer... Conociéndolo debe de estar enojado.-le digo.

Gray: Te lo agradecería mucho... Buenas noches, y mejórate de esa gripe. Adiós.

Zeref: Igual, y gracias.

Colgué la llamada y me acosté otra vez pero no a dormir, sino a esperar que Natsu y las chicas lleguen.

“Si Natsu tomó mal lo de Lucy, va a ser muy difícil poder hablar con él...”

Eso es lo que me preocupa... No va a querer hablar conmigo ni escucharme.

Y mucho menos a Lucy...

Pov Natsu.

Llegué a mi casa hecho un Dragón escupe fuego, no quería hablar con nadie. Solo quería golpear algo para descargar mi irá. Por eso fui al garage dónde estaba el saco de boxeo.

Me importó un demonio la hora que era y si despertaba a alguien. Empecé a golpear el saco cada vez más fuerte.

Zeref: ¡Hey Natsu! ¿Qué pasa?-aparece Zeref- No sigas que papá está dormido.-me dice calmado.

Natsu: ¡Déjame solo!-le exijo.

Zeref: Lo haré cuando dejes de golpear el saco.-me dice ahora serio.

“Hazle caso...”

Natsu: No lo haré.-sigo golpeando más y más.

Zeref: ¡Natsu para!-me ordena.

“Deberías hacerle caso...”

¡Tú también déjame... Te lo había dicho antes!

Natsu: ¡Que me dejes!-le grito aumentando mi ira.