𝑵𝑬𝑽𝑬𝑹 𝑺𝑻𝑶𝑷 𝑫𝑹𝑬𝑨𝑴𝑰𝑵𝑮┊𝙉𝘼𝙈𝙑ᬊᬁ

22° Piensa en mi

[JIMIN]

Caminaba cabizbajo por los pasillos de la Universidad, no me había ido tan bien en los exámenes, todo fue un desastre. Entré al aula para ver a una amiga, quedé de ir a comer con ella, pero me canceló por motivos familiares, así que salí del salón para ir directo a mi casa y descansar. Una linda chica se acercó a mí y me dio un volante, era de un pequeño club de jardinería, casi no me llama mucho la atención, pero me dio por ir a ver las jardineras.

No había tanta gente, me acerqué y vi unas hermosas rosas, era muy bonito. Seguí viendo las demás hasta que mis ojos pararon en un chico muy guapo, estaba escribiendo en una libreta, se veía tan concentrado y lindo. No pude evitar sonrojarme.

-¡Hola, soy Jisoo, ¿Te interesa unirte al club?-me dice una chica de la nada.

-¿Eh?, disculpa tengo que irme.-me alejé de ahí los más rápido que pude, me sentía muy nervioso.

Llegué a casa todo rojo de mi rostro, mis hermanas me preguntaron que si tenía fiebre, pero no les hice caso y me encerré en mi cuarto, ¿Quién era ese chico? Pasé varios días observándolo, hasta que me armé de un poco de valor y me confesé. Le mandé una caja de chocolates y con la ayuda de mi amiga le mandé una carta para citarlo, nunca pensé que íbamos a llegar a ser una linda pareja.

[NAMJOON]

Pasó alrededor de tres semanas desde aquel viaje, ya no volví a hablar con Taehyung, tuvimos dos semanas de vacaciones para el nuevo ciclo escolar. Pero cada vez que cruzamos miradas siempre me regala una hermosa sonrisa, me sentía muy feliz cada vez que nos veíamos, lo pensé bien y tengo que hablar con Jimin, no puedo seguir con esto, tarde o temprano se tendrá que enterar.

Salgo del salón viendo mi nuevo horario, ahora soy estudiante de tercer grado, no puedo creer lo rápido está pasando el tiempo. Mi amiga no pudo asistir a su primer día por quedarse dormida, se desvela mucho hablando con su novio.

Camino hacia la salida y veo a Jimin esperándome, lo saludo y caminamos juntos, pienso en decirle todo lo que está ocurriendo y terminarlo de la manera menos dolorosa que pueda.

-Tengo algo que decirte.-decimos los dos al mismo tiempo.

Jimin ríe.-Dime tu primero.

-No, tu primero, tú debes ser siempre primero.-le digo.

-Bueno, lo que pasa es que... en unos días es mi cumpleaños y quiero festejar antes, ya que ese día no voy a estar en la ciudad, saldré con mi familia para celebrar.-me dice con sus ojitos brillosos y una sonrisa tan tierna. Mi corazón se estruje.

-Claro, entonces nos vemos el Viernes en la noche para festejar.-le digo tomando su rostro.

-Te quiero demasiado Nam.-me dice robándome un beso.-Alegras tanto mis días.-me da un gran abrazo.

Quiero llorar.

-Ahora dime lo que me ibas a decir.-no sé que decir, todo esto me está matando por dentro.

-Oh, que mi horario quedó muy feo ¿Y el tuyo?-le digo sintiéndome la peor persona del mundo.

.

-Así que no pudiste decirle nada.-dice Sunmi acostada en mi cama.

-No, y menos que me dijo sobre su cumpleaños, no puedo hacerlo.

-Será mejor que lo pienses rápido, la verdad siempre saldrá a la luz.-dice levantándose.

No creo que algo malo pase, ¿Quién podría decirle? Sólo voy a esperar a que pasen unos días, no quiero sonar muy cruel.

Llegó la noche de nuestra cena, me vestí muy bien, todo iba a salir bien. Me senté para esperar a Jimin, casi siempre es el que llega temprano, miro la hora y faltan cinco minutos para las ocho. Bebí un poco de agua en lo que llegaba, miro mi teléfono viendo estados de WhatsApp. Veo el de Sunmi, tan linda ella.

Veo que alguien se acerca y guardo mi teléfono, me quedo sorprendido al ver a Jimin, lucía más hermoso de lo normal. Era todo un ángel.

-Hola, perdón por la tardanza, mis hermanas tardaron mucho arreglándome, ¿Crees que exageraron?

-No para nada, luces excelente, muy hermoso.-le digo tomando su mano con fuerza.

Pasamos una hermosa velada, Jimin estaba emocionado por cumplir sus diecinueve años, me preguntó por el mío, pero me faltaban meses para cumplir y no me sentía tan emocionado por cumplir veinte, me siento más viejo. Sus padres le harán una fiesta en la casa de sus abuelos, dice que es un lugar muy hermoso donde ellos viven.

Terminamos de cenar y nos fuimos a dar una vuelta por el centro, era una linda y fresca noche. Su manita es tan pequeña, siento que si la aprieto de más la romperé.

-Nam, quiero que tengas esto.-me dice de la nada.

-¿Qué?-pregunto curioso.

Se quita una de sus pulseras.-Ten, es para ti, para que siempre te acuerdes de mí.-dice tomando mi mano.

-Ay Jimin, no hagas esto, son tus pulseras.-Es muy tierno.

-Lo hago porque quiero que siempre pienses en mí.-termina de ponerme la pulsera.

La acomodo y la observo.-Es hermosa.-digo.

-¡Qué bueno que te gustó!-dice feliz.

Llegamos a la parada de autobuses donde pasaría su hermano por él, me besó en lo que lo esperábamos, como siempre tan lindos, dulces y adictivos sus besos. No quería despegarme, de pronto el ruido de un claxon nos hizo separarnos. Era el hermano de Jimin.

-¡Jae! Nos espantaste.-le dice a su hermano molesto.

-Bien, nos vemos el lunes.-le digo dándole un piquito.

-Adios Nam, te quiero.-dice subiendo al carro.

Se fue regañando a su hermano, me contó que tanto el como sus hermanas saben de nuestra relación, excepto sus padres. Espero y nunca tener problemas con ellos.

Me fui a dar unas vueltas por el centro antes de regresar a casa, quería ver que podría regalarle a Jimin por su cumpleaños, me vi la pulsera y pensé en regalarle también una, así que me fui a una joyería y encontré una muy hermosa, el lunes en la escuela se la entregaría.

Me sentía cansado, di en un pequeño parque y me senté en un columpio pensando en que dárselo, si en caja o bolsa. Estaba muy concentrado en mis pensamientos que no me di cuenta de que tiré mi refresco, trato de levantarlo, pero una mano me gana y lo toma. Me enderezo y es Taehyung, ¿De dónde vendrá?

-Hola Namjoon.-dice

-Hola Taehyung, ¿Qué haces aquí?-pregunto.

-Sólo vine a distraerme un poco, pero te vi y te seguí hasta aquí.-se sienta en el otro columpio.-¿Y tú?-me pregunta curioso.

-¿Yo?, Ah nada, sólo vine a comprarle algo a alguien.-le digo nervioso.

-Oh, ¿Podemos mañana practicar?-me pregunta apenado.

-Si, claro, ¿En tu casa?- le pregunto.

-No, quiero ir a la tuya.-dice mirándome fijamente.

¿Taehyung en mi casa?, nunca lo imaginé.