OUTRO: TEAR [Neji Y Tú] 1

Capítulo 2

Caminaba de regresó a su oficina, la junta había sido algo agotadora, pero al fin había conseguido lo que quería. Su plan para descubrir la debilidad de la pequeña niña había sido aceptado, ahora el problema era convencerla a ella, si no accedía, tendrían que hacerlo a la fuerza, eso sería otro gran problema. La pequeña tenía un poder inigualable, además de que su propio cuerpo lo expulsaba si se encontraba en peligro. Esto lo descubrieron en la primera junta, justo después de que se quitara la máscara.

•°•

Todos los presentes se encontraban sorprendidos ante las actitudes que habían tomado los líderes del Clan Uchiha y Hyuga.

—Fugaku, Hiashi ¿qué les sucede?—preguntó el líder de la aldea.

—Deje de estar bromeando y aléjese de esa cosa—habló con desdén el Uchiha.

—Lord Hokage, deje que nos encarguemos de esta criatura—el Hyuga apoyaba.

—No puedo permitir esta barbaridad, es una niña, una como Neji y como Sasuke—dijo colocándose al frente de está y evitando que los demás la vieran.
—

Si no piensa quitarse, entonces atacaremos junto con ella—tanto el Hyuga como el Uchiha se abalanzaron hacia el Hokage y la niña.

Kakashi al ver esto no perdió el tiempo y sacó al líder de la aldea de  en medio de las tres personas. El Hokage al ver esto trato de sujetar a la niña pero no pudo.

¡Bam! Fue el sonido seco que se produjo al chocar el cuerpo de los dos líderes del clan contra la pared. Todos estaban impresionados, ninguno de los presentes se esperaban esa reacción.

—Aún no termino contigo—se puso de pie el Uchiha—¡Voy a matarte!

Al instante volvió a lanzarse contra la niña, pero como la primera vez, una corriente de luces de  colores girando alrededor de ella lo aventó evitando su ataque. Al tiempo que esta se desvanecía, el Hyuga atacó por la espalda sin tener efecto alguno, pues lo mismo que con el Uchiha aquella ráfaga había repelido su ataque.

—Suficiente—proclamó Danzo, golpeando su bastón en el suelo.

Ambos líderes habían sido detenidos por los demás líderes de los clanes restantes.

—¡Sorprendente!—Exclamó el Damiyo del país de Fuego— Nunca vi un ataque tan hermoso como ese-—aplaudió—¿Cómo se llama?

—No tiene nombre— contestó la niña.

—Nebula—dijo el Nara mientras sostenía al Hyuga del brazo, al parecer ya no tenía chakra— puedes llamarle así, sus colores se parecen a los de una Nebula Galáctica. Puedes llamarle así si te gusta.

—Nebula—repitió, miro al Feudal—Se llama Nebula, señor, ya tiene nombre.

El hombre sonrío cálidamente.