La semana se pasa volando y sin complicaciones, me siento con Val todos los días aunque para el jueves las cosas con Naty ya están bien y Julia poco a poco lo va dejando atrás, el viernes antes de irme a casa de Amanda les aviso de la fiesta y que si gustan ir vengan a la casa de Amanda a las 8 para ir juntas, a decir verdad no estoy muy segura de la dirección de la casa de la tal Laila, o de quién sea ella. Al llegar a mi casa provisoria encuentro a Amanda dormida en el sillón así que me encamino a descansar un rato yo también.
Cuando despierto son las 6 así que corro a la ducha, al salir me seco y plancho el pelo tan rapido como me es posible, es decir, una hora. Faltan 45 minutos para las 8 cuando es momento de decidir qué haré con mi ropa, maquillaje y peinado, recuerdo que Amanda dijo algo de un tema o algo así. - ¡Amanda! - Mi voz suena desesperada, como si me estuvieran matando.
- ¿Qué pasó? -
- No sé qué ponerme. - Digo algo apenada, hice que se preocupara.
- ¿Ropa? A ver, dejame ver. - Al cabo de 5 minutos me arroja un vestido dorado ceñido al cuerpo que se ata atrás del cuello, con un escote que termina centímetros antes del ombligo y espalda abierta, el mismo tiene un tajo en la larga falda que dejaría toda mi pierna al aire. - Es elegante al final. -
- Bien, ¿qué te vas a poner vos? -
- ¿Alguna vez viste la película "¿Quién engañó a Roger Rabbit?" ? - Asentí, tengo un vago recuerdo de esa película. - ¿Te acordas de la peliroja? - ¿Cómo no recordarla? Es Amanda en pinta. - Bueno un vestido como el de ella que me regaló Laila. -
- ¿Quién es Laila? - No puedo evitar preguntar.
- Mi madrastra, me voy a bañar. - Así que la fiesta sería en casa de sus padres, bueno su padre y su madrastra, genial.
Cuando son 8 menos 5 suena el timbre y yo abro, ya me puse el vestido que me presto mi amiga, recogí mi pelo en un moño dejando algunos mechones sueltos, me puse un maquillaje de noche con los ojos muy definidos y los labios mas rojos que la sangre y por último me subí en 15 centímetros de pura belleza negra que estiliza mis piernas. Al abrir me encuentro a mis tres amigas en vestidos casi tan elegantes como el mío y mucho menos sexys, ellas quedan con las mandibulas por el suelo al verme y luego pasan. Amanda sale del cuarto y es literalmente Jessica Rabbit y se ve hermosa. Partimos hacia su auto y al subir Amanda nos coloca un sello en las manos. - Ese sello es porque tienen entrada gratis y canilla libre, esta fiesta va a ser paga. - Al parecer vamos a ir a la fiesta del año y completamente gratis. Al llegar quedo fascinada con la mansión que hay frente a mis ojos, estamos en la mejor zona de la ciudad y vemos una gran casa frente a nuestros ojos. Luego de pasar junto a los dos patovicas que hay en la puerta entramos a la, aún vacía, casa, tiene dos pisos y hay otro guardia vigilando las escaleras, seguramente para que nadie suba, la cocina es inmensa y esta llena de papitas, sandwiches y demás, la sala de estar es del doble o triple de tamaño que la de Amanda y le han instalado un sistema de luces que es controlado por un dj en una esquina. Al salir al patio vemos otra pista de baile armada y junto a ella una barra en la cual se encuentran 5 chicos. - Ahí piden lo que quieran, muestran la manito y listo. - Nos explica Amanda, a lo lejos puedo ver un invernadero y una pequeña piscina. Amanda y yo nos quedamos atrás mientras mis amigas van por algo de beber y ella saca otro sellito de la cartera. - Este es para el de la escalera, se lo mostras y te deja subir a las habitaciones con máximo dos acompañantes, la tercer habitación a la izquierda era mi cuarto, si esa está ocupada anda en frente que es el cuarto de Román, o de última al final del pasillo hay un cuarto para huespedes. En total solo cuatro vamos a poder subir. - Dicho esto corre apenas mi vestido y me hace el sello a mitad del pecho, quedando justo abajo de la poca tela que me cubre.
Las horas transcurren y yo me encuentro bailando entre un montón de desconocidos junto con mis amigas en la pista del patio, nos reiamos y disfrutabamos y, si bien me estaba costando horrores, me abstenía de darle importancia a las hermosuras que me querían sacar a bailar. Al cabo de un rato y algunos cuantos tragos era el turno de Naty y Julia ir a buscarlos. - Nicki, mira esos rubios. - Dijo Val y cuando voltee hacia ellos no podía creer lo que veían mis ojos, tan hermosamente perfectos como los recordaba, los hermanos Lacroix bailaban a un par de metros nuestro.
- Francisco y Jean Pierre son. - Logré decirle a mi amiga por encima de la música.
- ¿Los conoces? -
- Los hermanos Lacroix. -
- Presentame al más alto. - Le gustaba Francisco. Le indiqué que me siguiera y nos acercamos a ellos.
- Pero si son mis hermanos favoritos. - Jean Pierre fue quien logró, a duras penas, reconocerme.
- La chica de verde más bonita que he visto. -
- El chico de rojo confundido. - Bien, podría ser un poquito menos reacia, pero no. - Ella es Val. - Dije a Francisco.
- Hola, hermosa. - Le dijo coqueto él a ella, antes de ponerse a bailar.
- ¿Me seguís odiando porque tenía novia? - De una y sin anestesia.
- Yo no te odio, me parece que sos un imbécil importante, nada más. -
- Te alegrará saber que la dejé. -
- ¿Te dejo de servir? - Bien, estaba siendo muy mala con él, pero se lo merecía, todo.
- Le confesé que había una chica de verde que sabía beber y besar como la mejor que me volvía loco. - En milésimas de segundos redujo el espacio que nos separaba a poco más de veinte centímetros.
- ¿Y te pensas que me voy a creer esa labia barata? - Respondí desviando la mirada, para encontrarme con una gran sorpresa. Fiorella estaba en la fiesta, y no solo eso si no que estaba restregandosele a Román mientras me miraba desafiante. Si lo que quería era molestarme, así no lo iba a conseguir, aunque debo admitir que la idea de Fiorella y él no me encanta.
- Me pienso que extrañas mis labios sobre tu cuerpo. - Me susurró Jean Pierre al odio, estaba pegado a mí y tomandome de la cintura y yo ni me había enterado. En ese instante mis ojos hicieron contacto con los de Román y estaba que echaba fuego por los ojos, ¿qué? ¿Te molesta verme con otro? Así que sin pensarlo más tome al hermoso rubio frente a mi del cuello de su camisa y lo bese con locura. Tan pronto como mis labios tocaron los suyos sentí como su mano se deslizaba de mi cintura a mis muslos y me acercaba más a él. Entre abrí los ojos un momento y vi que la pareja formada por mi ex compañera y el hermano de mi amiga necesitaban con urgencia un cuarto, no soportaba verlo así, a él y con ella.
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Dime como quieras!
Novela JuvenilSólo pregunto que pasaría si fuese hombre, todo lo que hago estaría bien, incluso me tratarían de ganadora. Pero por ser mujer es un PECADO en mayúsculas. Yo digo ya no más!