ᦒ ¡mantén distancia! ૪ hyunin ˊᯅˋ

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La pálida mujer entró con calma a la "sala" donde se encontraba la doctora de su hijo esperándole para hablar de cosas rutinarias.

— Buenos días, gracias por venir. Siéntese ahí, por favor. — Apuntó una silla que se ubicaba en frente del escritorio. La menor entre ambas acató, pues no era la primera vez.

— Buenas, muchas gracias por citarme. ¿Qué tal Jeongin? ¿Todo bien? — Le dedicó una cálida sonrisa que hizo a la doctora contagiarse de ese buen ánimo. Linda. Eso era Sooyoung, siempre le pareció linda.

— Vale, uhm, le dije que viniese para lo de siempre, ya sabe. — Le acercó una hoja con datos de diagnóstico — Él realmente ha tenido avances gratificantes durante estos meses de terapia, por lo menos ya no tiene recaídas al escuchar la voz o al menos saber de la presencia masculina. Debe entender que la visión que muestra es distorsionada, pareciese tener problemas para captar la realidad, pero se encuentra muy bien y lo veo más tranquilo.

— Eso es genial — Mencionó con emoción y sinceridad — ¿hay algo más o...? — La contraria asintió.

— Sí, como ya le he mencionado en ocasiones anteriores, con JeongIn trabajamos la terapia de exposición, así que debido a los avances presentados, me gustaría saber si está la posibilidad de que algún familiar cercano o amigo inicie un acercamiento con él, claramente instruido por mí. Algo casual, conversaciones diarias una o dos veces a la semana, no implica costo adicional. En caso de que no se pueda, pondré a alguien de mi confianza con clara autorización suya, podrá parar el proceso cuando lo desee.

— Me parece que eso no será posible, mi hijo mayor está en otra ciudad y JeongIn no tiene amigos hombres por todo esto. ¿Puede conseguir a alguien?

La psicoterapeuta se quedó pensante, necesitaba a alguien de confianza para ella que se acercase a JeongIn primero.

Bingo.

— Entonces me parece que ya sé que podemos hacer. El consentimiento de JeongIn es importante así que espero que hable de esto con él y me diga una respuesta lo más rápido posible.

La pelinegra empezó a explicar cómo funcionaría el panorama y por sobre todo quién sería ese alguien que ayudaría al Yang a dar uno de los pasos más grandes hacia su recuperación.

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— ¡Hasta que llegas! Trabajar con locos ha de ser exhaustante. Tengo hambre, haz de comer en lo que veo la televisión — Demandó el robusto hombre una vez la mujer cruzó la puerta principal de su casa.

— En seguida, debo hacer algo primero... ¿Dónde está HyunJin?

— En su cuarto, volvió hace unas horas de la escuela. — La fémina asintió y se movió rápido hasta la habitación de su hijo; quien notó su presencia al instante.

— Hola mamá, ¿qué tal te fue hoy? ¿Todo bien?

— Bien, pero debo decirte algo. — HyunJin hizo un ademán para que continuase — Como sabrás tengo de paciente a JeongIn que tiene androfobia y no tiene ningún familiar cercano para continuar con la terapia, me gustaría que tú convivieses con él, aunque no es nada confirmado aún... — El joven rió irónico y algo atónito.

— Por dios, mamá, ¿Por qué debo yo cargar con el enfermito ese del que tanto hablas? Es un idiota. Además de tanto que se la pasa con mujeres seguro es un maricón, imagina si se me tira encima o algo, ni hablar.

— No se te tirará encima porque eres hombre, HyunJin, bajale a tu ego. Esta podía ser una buena oportunidad para expander tu curriculum, ¿No que quieres estudiar psiquiatría? Y por último, no hay ninguna relación entre ser gay y juntarse con mujeres, de hecho... No tiene sentido, deja tu faceta de indiferencia ridícula y siquiera piénsalo. Voy a hacer la cena, en una hora te quiero abajo. — Salió inmediatamente a realizar lo dicho,

HyunJin sentía su ego dañado, su mamá tenía razón y le dolía, pero sabía que le dolería más ser tratado como si fuese una bestia por ese niño, no quería.

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— ¿Por qué ella querría eso? ¡La última vez dejaste mi camisa llena de moco porque el que atendía en McDonald's era hombre!

— Es la única opción... Quiero llorar de pensarlo, pero quiero ser normal, es todo lo qu pido. — JeongIn se encontraba inquieto; movía su pierna rápidamente y apretaba como podía su ropa.

— No logro comprenderlo bien, innie. No veo por qué alterar algo de genética, ¿tiene cura? Es ciertamente extraño. Perdón si peco de ignorante.

— Que sí, HeeJin. Pero bien, tengo tarea que hacer, nos vemos mañana. — Cortó la llamada antes de que su amiga pudiese despedirse. En realidad no tenía obligaciones por hacer, pero su ansiedad incrementaba cuando tocaban la razón de su fobia, porque JeongIn no soportaba la incertidumbre.
Su puerta se abrió haciendo que el chico chillase de sorpresa, y enojo por la interrupción de sus pensamientos, oh ¡Cómo odiaba que lo interrumpiesen!

— Mamá ¿Qué dijimos de tocar? — Miró a su progenitora con exagerada indignación, ésta rió y negó con la cabeza.

— Baja, tonto, la cena está lista.

— Ya veo cuánto me quieres. — Rió él también y la siguió hasta el comedor.

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terapia de exposición: terapia de exposición es uno de los procedimientos más efectivos para el tratamiento de diversos trastornos de ansiedad. Es un componente central en el tratamiento del trastorno obsesivo compulsivo, el trauma psicológico, el trastorno de pánico y también para fobias específicas.
consiste en que a través del uso de diversas técnicas, una persona se irá exponiendo gradualmente a esa situación que le provoca malestar.