Sunshine (Twilight and pj)

15

Habían regresado a Forks, literalmente habían estado fuera tres días y Charlie estaba a punto de tener canas verdes, en verdad se sentía culpable por todo lo que estaba pasando.

Incluso su madre le había llamado preocupada. Fue muy claro que estarían castigadas hasta que se casaran según Charlie, y ella solo había pensado divertida si es que llegaba ese momento.

También se sentía culpable por Paul, el en verdad se había preocupado demasiado por ella.

Estaban en la casa de los Cullen, antes de ir con Charlie, Bella quería hablar de algo importante, y ella también debía de hablar sobre su identidad revelada ante esa familia de vampiros.

—Hola...—Saludó la rubia a los vampiros. —Supongo que esta no es la mejor situación para conocernos.

Algunos de los vampiros le sonrieron por la aparente incomodidad de la joven, aunque estaban agradecidos del gran valor qué ambos chicas habían tenido para salvar a Edward.

—Es mi hermana menor Abigail, solo hablé de ella un poco con ustedes...—Dijo Bella en un intento de no sonar tan incómoda.

—¡Tu eres como Hércules! —Exclamó un chico alto y robusto con una gran sonrisa.

—En realidad yo soy griega, Hércules es romano...—Abigail ya había perdido la cuenta de cuantas veces había tenido qué aclarar ese hecho. —Todo es culpa de Disney, también viví la mitad de mi vida engañada.

—Ya me gusta. —Dijo Emmet y eso aligeró algo el ambiente cuando Rosalie lo golpeó en las costillas.

Las presentaciones ya se habían hecho, más o menos, ya que solo conocía a Edward, Carlisle y a Esme del incidente de hace meses.

Los cuatro habían tenido ue explicar a los otros vampiros lo que había sucedido en Italia.

—Todos saben que es lo que quiero. —Expresó Bella ante la familia de vampiros haciendo referencia a su vampirez...

Abigail apenas ubicaba a Edward y al doctor Carlisle, quienes habían estado dando explicaciones cuando su hermana tuvo aquel "accidente" qué había resultado en el ataque de un vampiro.

—Y se que estoy pidiendo mucho, lo único que se me ocurre para que sea justo es votar. —Dijo su hermana y Abigail frunció el ceño por lo que podría venirse.

—No sabes lo que dices. —Le interrumpió Eduardo.

—Callate. —Abigail se abría reído de no ser por lo que Bella iba a pedir a continuación. —¿Alice?

Abigail abrió la boca impresionada qué la hermana mayor estuviera dispuesta a la inmortalidad.

—Ya te considero una hermana. —Alice la chica que veía el futuro abrazo a la humana.

—Yo voto si. —Dijo un rubio qué tomaba por la cintura a Alice. —Sería agradable el no querer matarte todo el tiempo.

Abigail hizo una mueca al escuchar aquel chiste.

—Lamento muchísimo como me comporte con ustedes. —Se disculpó otra chica rubia muy Bella, que le hace mucha competencia a los hijos de Afrodita, por lo que había entendido Rosalie había sido una de las personas que había informado a Edward de la supuesta muerte de Bella.—Estoy agradecida contigo porque salvaste a mi hermano, pero esta no es la vida qué hubiera escogido... para mí es un no.