La importancia del lema

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Con el tiempo transcurrido, a la edad de 17 años, el equipo 9 relucía lentamente con sus nuevas técnicas que eran supervisadas por Gay - Sensei y la determinación de cada uno de ellos.

El compañerismo y la amistad predominaba luego de madurar y vivir nuevas experiencias juntos.

Tanto Rock Lee como Neji, se llevaban mucho mejor que en sus comienzos.

El pelinegro había avanzado impresionantemente en el arte del Taijutsu convirtiéndose en un total experto. Neji Hyūga hacía el mayor esfuerzo de mejorar su técnica Hakke Kūshō (Ocho Trigramas Palma de Aire) que era la habilidad que compensaba proteger su punto débil.

La mayoría de su tiempo como equipo, estaba repleto de un horario de puro combate y práctica. No obstante, el maestro sabía que eso no era solo lo importante, siempre existía un momento para el descanso y la diversión.

Un pequeño lugar compuesto por superficies rocosas bien notorias, junto con el vestir de un completo uniforme Shinobi, eran los protagonistas para dar pie a una acción completamente diferente a lo que estaban acostumbrados.

Había pequeñas armas delgadas compuestas por un tubo, dónde en su interior contenía pequeñas bolas de pintura que al ser expulsadas por un chasquido, explotaban al instante por el impacto de cualquier superficie.

Este era el típico juego de banderas, en dónde dos equipos vencedores se enfrentaban para llegar a ser victoriosos al obtener la bandera del oponente. En este caso, si uno de los dos miembros era impactado por las bolas de pintura, automáticamente quedaba descalificado.

-- Mantente atenta en proteger la bandera Tenten, pueden estar muy cerca --

Ella volteó los ojos para luego suspirar -- Neji, es sólo un juego, no importa si nos descalifican ¿Sabes? --

-- No perderé ante ellos -- Agregó con determinación -- No está vez. Desde hoy sabrán qué no ando con rodeos --

Al parecer el Hyūga estaba enfático en demostrar su potencial ante sus adversarios sin ninguna interferencia.

La castaña suspiró, sabía que la última vez que jugaron esta actividad, ambos perdieron idiotamente por no defender la bandera producto de una mala comunicación. Se mantuvo en su posición con la convicción de protegerla ante cualquier ataque sorpresa.

-- Tenten, me alejaré de ti para poder encontrarlos y darles su merecido mientras te quedas aquí vigilando ¿De acuerdo? --

La chica no hizo más que asentir al percatarse de su fe en ella. Estaba decidida en hacer lo estrictamente necesario para ganar esta vez.

Neji se dispuso a escabullirse entre las sombras de varias rocas, tratando de no ser visto por el enemigo, pero para su mala suerte, no encontraba la presencia de ninguno de ellos.

Permaneció quieto, debatiendo si utilizar su poder visual ya que una de las reglas era esa, no hacer trampa.

-- ¿Dónde pueden estar? -- Pensó con detenimiento para luego escuchar una peculiar voz que llamó su atención de golpe y así darse cuenta como el enemigo se dirigía hacia su propiedad.

-- ¡Vamos Lee! ¡Tú puedes! -- El maestro alentó a su aliado para que corriera hacia la victoria a toda velocidad y tomará la bandera enemiga de una vez por todas mientras apuntaba con su arma.

-- ¡Oh no! --

El chico de larga cabellera aceleró el paso aproximándose a la misma distancia de su oponente, para que luego este último, se detuviera en seco y disparará en la misma dirección en la que se encontraba la chica.

Antes del impacto, ella fue rodeada por unos fuertes brazos que la protegieron, sintiendo como el cuerpo ajeno sufría el impacto de las bolas de pintura en su espalda.

-- ¡Lo hicimos! ¡Lo hicimos! -- Gritó Lee con euforia al dar varios saltos de emoción mientras veía a su Sensei aproximarse.

-- ¡Así se hace mi especial alumno! ¡Así es como se gana 6 veces consecutivas! -- El maestro alzó su palma para chocar los 5.

-- ¿Estás bien? -- Neji observó aquellos ojos castaños con preocupación, mientras que estos se distanciaban de su cuerpo para asimilar lo que acababa de ocurrir.

Era irónico que su equipo siempre perdía por la misma razón de que Neji Hyūga, nunca podía dejar que la lastimarán con esas balas.

-- ¡Yujuuuu! ¡Ahora es momento de celebrar nuestro nuevo récord! -- Lee estaba tan feliz, que Gay- Sensei no podía parar de sonreír al ver a su alumno favorito muy emocionado.

-- ¡Vámonos a celebrar Lee! ¡Yo pago! --

-- ¡Sí! -- Ambos salieron del recinto muy reluciente de positividad, dejando a una Tenten confundida mientras que el joven Hyūga los veía con un ligero desprecio en su semblante.

-- Idiotas... -- Susurró entre dientes, captando la mirada de su compañera posada en su persona -- ¿Tenten? ¿Estás bien? --

Ella suspiró negando con confusión. Se notaba decepcionada.

-- No puedo creer que volvimos a perder solo porque siempre te interpones y me proteges antes de ser impactada con la pintura ¿Por qué lo haces? --

Neji no sabía qué decir, simplemente realizó un ligero alzamiento de hombros.

-- Parece que no confías en mí. Por esa razón, siempre perdemos... --

-- Solo creí que era importante protegerte. Ya sabes... Tú me cubres y yo te cubro ¿Recuerdas el lema? --

-- Bueno sí pero... -- Giró su mirada hacia los demás miembros de su equipo que los llamaron para terminar de salir del recinto -- Amortiguaste los golpes tú solo y... Sabes que puedo cuidarme sola ¿Verdad? --

Ella al notar como Neji desvió la mirada después de su comentario, sabía que lo había atacado de cierta manera. Simplemente sacudió la cabeza para no caer en detalles y empeorar más la situación.

-- Ya no importa, es sólo un juego ¿No? No hay que discutir por eso --

Le dio un golpecito en el hombro para avanzar el paso hacia la salida, provocando que Neji la siguiera a paso lento un poco pensativo por sus palabras.

No quería sentirse traicionado por no haber agradecido que la salvó de sufrir un dolor innecesario porque esas balas llegaban a crear moretones por el fuerte impacto, pero, dejando su ingrates de lado, se preguntaba el por qué optaba por protegerla siempre por la misma causa.

Tal vez se debía porque la primera vez que casi ganan, él mismo impactó sin querer una bala en su brazo y ella sintió el golpe muy pulsante, pues ese día no sabía que la había herido, y por más que no quisiera, lo hacía sentirse culpable simplemente por verla quejarse del dolor.

Ese día debió protegerla y no lo hizo por enfocarse exclusive en el combate. No quería que volviera a sufrir algo así, y mucho menos si él tenía la responsabilidad de cuidarla a como diera lugar.

Tenía tallado en su mente el lema de su verdadera amistad.

¿Destino o amor?  [Nejiten]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora