"𝙵𝙴𝙻𝙸𝙲𝙸𝙳𝙰𝙳"
Cuando las puertas se abrieron, la empresa comenzó a tener movimiento, una sonrisa se formaba en sus labios, y es que era un día muy lindo, su felicidad era extremadamente inmensa.
Sus pasos eran largos y seguros, sonrió al ver a la señorita Lee dándole una cálida sonrisa, al entrar a su oficina se acomodo en su escritorio, mirando todo con mucha atención.
Jungkook sabía que la estaba cargando, el había creído que Yoongi solo sería una aventura, pero se volvió más que eso, se volvió su felicidad, pero es que amaba a Taehyung, amaba tenerlo entre sus brazos, amaba su comida, amaba los besos de miel que le regalaba, lo amaba a él.
Hablemos de una persona importante en esta historia, a simple vista no lo es, quizá podemos pensar que puede ser algún extra, pero es que no todo es lo que aparenta, Lee Soon, una joven de 23 años, cabello rubio y rizado, con una sonrisa muy linda y dos lunares bajo su ojo derecho,¿Porqué hablamos de la secretaria de Jeon?.
Cuando Soon entró a trabajar para el señor Jeon, ella iba prácticamente de rodillas, necesitaba el trabajo recién entraba a la universidad y había quedado en cinta por un idiota irresponsable el cual terminó siendo su jefe, Jungkook al verla de esa manera decidió darle la oportunidad, ahora llevaba una amistad muy grande y un vínculo fuerte, pero había cosas que Soon prefería callar, y era que Jungkook le había presentado a su esposo, un bonito castaño llamado Taehyung, y años más tarde le presentó a Yoongi como su novio.
Las últimas semanas, se habían vuelto muy trágicas para ella, y es que había días en que no podía dormir debido a que su mente le decía "Eres parte de una mentira", se ponía en el lado de Taehyung, ella también había sido engañada, y no debía dejar que el chico que conocia sintiera un amor dolido.
Fue entonces donde supo que, el amor y la felicidad valía más que los lujos, había ahorrado demasiado para mantener a su hijo y entonces podía buscar algún empleo mejor, ella haría lo correcto.
Fue así que ahora tenía papeles en sus manos, y su cabeza en alto, tocó la puerta y escucho a su jefe hablar, camino sin miedo y se sentó frente a él.
–Buenos días Lee, ¿Paso algo? –Jungkook comenzó a hablar y antes de que ella hablara suspiro. –Antes que nada, quiero comentarte algo, ¿Eres feliz?
–Yo soy feliz señor. – respondió algo nerviosa, pero sin jugar con su mirada.
–¿En qué se basa tu felicidad?
-Mi felicidad consiste en que sé apreciar lo que tengo y no deseo con exceso lo que no tengo.– Soo se acomodo en la silla mirando a su jefe, conocía a Jungkook y sabía que le pasaba, él estaba asustado. –¿Pasa algo señor?
–Es sólo que, a veces no entiendo, yo amo a Taehyung sabes que lo amo con todo, pero Yoongi es de mi agrado, estoy molesto porque Namjoon es feliz sin problema, y es que la compañía de a lado me está jodiendo la cabeza.
–Yo... - Lee se sorprendió pero lo miró. –Usted no puede juzgar a la gente sólo porque pecan de una forma diferente a la suya.
–Necesito que me ayudes Soo, necesito que me ayudes a aclarar mis ideas, necesito saber que estoy haciendo lo correcto. – Jungkook la miraba en busca de ayuda, con suplica y un poco de paz.
–Jungkook, no puedo decirte que estas haciendo lo correcto, porque ambos nos estaríamos engañando, ambos sabemos que no es lo correcto, estas lastimando a la persona que solías amar, estas lastimando a la persona que le prometiste amor eterno. – Soo estaba asustada, sabía que ver a su amigo roto sería algo que le dolería, pero a veces es mejor tener prioridades y su prioridad era salvar a Taehyung. – ¿Porque dudas de tu amor?
–Creí que Yoongi sería un paso, solo quería una noche divertida, y es que aunque ame a Taehyung la química ya no existía, el quería familia, el quería más de lo que yo quería, y entonces cuando busque una noche divertida me metí en una relación demasiado linda.
–Lo más importante en la vida es tú familia,hay días en los que los amas y otros en los que no, pero al final, son las personas con las que siempre regresas a casa.– Lee soltó un suspiro cansado. –A veces es la familia en la que naces y a algunas otras es la que haces para ti mismo.
– Yo los amo demasiado, ambos tienen cosas diferentes, uno es más dulce y amable, el otro es más cariñoso y sumiso.
–No los amas Jungkook. –Lee alzó su mirada firme. –Si los amaras no los comprarías y sobre todo, no los engañarias.
—¿Como sabes de amar y querer? El idiota de tu ex novio te dejo en cinta. –Jungkook la miró con depresión, y al ver el rostro de Soo con una sonrisa le dio algo de miedo, y es que había cosas que Soo realmente no decía, cosas que sólo ella sabía, y, ¿Qué pensaría Jungkook cuando le dijeran que tiene un hijo?
—No sabes lo que es querer mucho a alguien aún que sepas en el fondo que la relación no va a funcionar pero harías lo que fuera por esa persona.– respondió notándose segura. – A diferencia de mi, mi ex novio no me dio ilusiones y fue sincero conmigo, me señaló que había alguien más, jamás me engaño, me dejó antes de conocer a su pareja actual.
– Lo siento, es solo que me pone muy triste todo esto, no quería decir nada sobre ti.
–Si te pones triste al recordar momentos felices, es porque en este preciso momento tu vida es un desastre; o representa la ausencia de una persona que se marchó, ya sea porque murió o simplemente no podía estar en tu vida. Porque cuando realmente eres feliz, recuerdas los momentos, pero no deseas volver porque sabes que lo que tienes es aún mejor y das gracias a Dios y a la vida, por estar allí donde te encuentras y por los buenos momentos que tuviste. —Lee se levanto firme y dejó los papeles en el escritorio. -El querer volver a momentos donde fuiste feliz, solo representa la simple realidad de que no eres feliz.
–¿Qué es esto?
–Mi carta de renuncia, elegí mi felicidad.
–¿Qué? Pero Lee, eres mi amiga, no puedes hacerme esto, ¿porque ahora?
–Yo no quiero ser parte de un engaño. – suspiro dándose la vuelta. –Ya no te tengo miedo, no te tengo miedo de que me quites a mi hijo, de que me mandes a la calle, ya no tengo nada que ver contigo. – sus ojos se cerraron. –Si una mujer te dice las cosas, es porque quiere estar bien contigo, mujer callada es mujer cansada. Y cuando se cansa, está lista para irse.
Entonces cuando la puerta se cerró, Soo sintiendo sus cadenas liberadas, una sonrisa se dibujo en su rostro, y con pasos lentos salió del lugar, de su prisión, y no callara, estaba dispuesta a hablar.
– Hola, ¿Kim Taehyung? mi nombre es Lee Soon, me gustaría verte lo antes posible.