ㅤfloresㅤ★ㅤshuichi saihara !

⚘ O5 ⚘

    En la clase estabas más despistada que nunca, y tu mejor amigo lo notó.

    —Hoy has estado más distraída de lo normal. ¿Qué pasa? —te preguntó el castaño.

    —¿E-Eh?

    —¿No me escuchaste?

    —No... Perdón, he estado muy distraída —te disculpaste, rascándote la mejilla.

    —Lo sé, lo noté. ¿Por qué estas así?

    Suspiraste tal cual enamorada.

    —Por Saihara-kun... —sonreíste al pensar en él.

    —Ya entendí, no empieces con tus cursilerías, por favor —bromeó el castaño.

    Hiciste un pequeño puchero.

    —Yo no te digo nada cuando hablas de Nanami-san —dijiste, haciendo que Hajime se sonrojara. Sonreíste al ver que cumpliste tu cometido.

    —¡Y-Yo nunca hablo de Nanami!

    —Sí, ¿te creo?

    El ojiverde solo rodó los ojos con una sonrisa.

    —Cambiando de tema, además de hoy dejarle una flor a Saihara, ¡también te traje una flor a ti! —dijiste, dándole a Hinata un Lirio de agua, tu abuela tiene alguna de ellas en su jardín que cuida con todo su ser y te permitió llevarte una. La verdad, tu abuela es un amor—. Este es un Lirio de Agua, ¡y te lo doy, porque significa pureza de corazón! Y yo te veo como una persona pura de corazón.

    El castaño tomó la flor sonriendo, conmovido por tus palabras.

    —Vaya... G-Gracias (T/A)-san, no pensé que me verías de esa forma... Pero, yo no soy puro de corazón —admitió, apenado.

    —No importa, para mí siempre serás puro de corazón —finalizaste con una sonrisa.

    En ese momento Hajime se preguntó el qué hizo para tener una amiga tan buena como tú.

    —Gracias. Por cierto, ¿qué flor le dejaste a Saihara hoy? —preguntó, dejando cuidadosamente el Lirio en la mesa de su asiento.

    —Un Lirio Amarillo.

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“El Lirio Amarillo significa "amarte me hace feliz"

¡Te doy esta flor, porque amarte me hace feliz, Saihara-kun!

¡Y además, te quiero mucho! ¿Ya te lo había dicho, no?

Att: una chica que le gustan mucho las flores y que también le gustas tú”

    —Saihara-kun, me preguntaba, ¿qué haces con las flores que te ha dejado la chica? —le preguntó la pianista.

    —Las he plantado en la casa en la que vivo con mi tío. A mi tío le gustó mucho las flores, y me permitió plantarlas en el jardín. Las he cuidado mucho y también les hecho agua cuando se debe —explicó con una pequeña sonrisa—. ¿Por qué?

    La rubia sonrió ante esas palabras.

    —Por nada.