Sinopsis:
18 de septiembre de 2018
No esperaba esto. Y cuando digo que no esperaba esto, lo digo de verdad. ¿Me debería sentir culpable por que ahora mismo en la boda de mi hermano su novia tiene el pelo color verde flúor, su pomposo vestido esta a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
22 de enero de 2016
Narra matias:
Me despierto por una intensa luz, trato de acostumbrarme a toda esa intensidad entrando por mi ventana, las persianas están arriba, dejando que la luz del sol invada mi habitación, esto es raro ya que yo siempre dejo las persianas bajas durante la noche, se ve que alguien las abrió en mi ausencia y se olvidaron de cerrarlas, obviamente no me voy a enojar por eso, pero es un poco molesto esto ya que estoy cansado.
Agarro mi celular y lo desbloqueo, veo que tengo mensajes de Nick, le aviso que estoy despierto y si en vez de almorzar desayunamos juntos, no tarda en responderme con una afirmación, así que con eso en mente me dispongo a ir al baño, tomo una ducha y cumplo con mis necesidades fisiológicas, cuando salgo me visto con algo ligero ya que hace calor y bajo hacia la cocina.
Cuando llego ahí están mis padres, no notaron mi presencia, están como si estuvieran en una burbuja donde solo existen ellos dos, sus caras están muy cerca y se miran con tanto amor que por un momento quedo gratamente sorprendido, mi padre acaricia las manos de mi madre y ella está encantada con toda esa atención, por un momento sentí un poco de envidia, por un momento desee poder tener un amor como el de ellos, donde nada ni nadie me impidiera amar, ¿Y si nunca lo encontraba?, ¿Y si ya lo había encontrado y había estropeado todo?
Metido tanto en mis pensamientos no me había dado cuenta de que en efecto mis padres ya se habían percatado de mi presencia y me miraban con atención, en ese momento me sentí sumamente incomodo, había interrumpido un momento algo privado, me aclaré la garganta y los saludé.
- Solo venía a decirles que voy a desayunar con Nick y posiblemente pase el día con él, para que no se preocupen y perdón por arruinar el momento. – dije esto último con una vergüenza evidente.
- Tranquilo cariño, nosotros igual ya nos teníamos que separar, ¿Cómo estás? ¿Andas muy cansado? – preguntó mi madre.
- Estoy bien, dormí excelente.
- Me alegro, ¿Vas a aprovechar tu día libre? Recorda que mañana a la mañana ya volvemos a trabajar. – ese fue mi padre diciéndome en otras palabras "ni se te ocurra llegar tarde"
- Si papá lo sé, voy a regresar temprano tranquilo. – diciendo esto me acerqué para saludarlos, agarré una barra de cereal y salí, todo indicaba que iba a ser un día de lo más precioso, un cielo azul y despejado, un sol radiante.
Me dirigí al auto y emprendí camino hasta una cafetería cerca de la playa donde dijimos que nos íbamos a encontrar, disfrute del viaje, fueron a lo máximo 15 minutos, pero los disfruté como nunca, amo los días de calor, a muchas personas no les gusta, pero yo siento que son los días más preciosos, hay miles de planes que podés hacer.
Cuando llegué le envié un mensaje a Nick preguntando si ya estaba por estos lados, en cuanto llegó su respuesta de que efectivamente había llegado y ya estaba adentro sentado en una de las mesas, bajé del auto y entre, mire hacia donde estaban varias personas sentadas y allí lo encontré, parecía un poco preocupado, miraba por la ventana, tenía la vista perdida en el paisaje frente a sus ojos, me acerque lentamente, cuando estuve lo suficientemente cerca notó mi presencia, enseguida desplegó una sonrisa de felicidad genuina, lo abracé porque debo admitir extrañé a mi amigo.
