Conviviendo en un caos junto a una fraternidad.

✮Capítulo noventa y cuatro.

Oh my God, I feel it in the air
Telephone wires above
Are sizzlin' like a snare
Honey I'm on fire, I feel it everywhere

Lana Del Rey.

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Más tarde, Jughead estaba vistiéndose en la habitación.

—Papi—dijo Addison entrando por la puerta con Steve.

Jughead la miró con una ceja alzada mientras se calzaba su zapato, sentado en la cama—¿Qué haces sola en el segundo piso?—La niña hizo una cara de confusión mientras se paraba frente a él.—¿Qué pasa?.

—¿Vas fuera?—preguntó haciendo una mueca. Tocó la cama y se apoyó mientras veía a su padre, sin embargo estaba confundida. Jugaba con sus pies y Jughead sonrió al verla tan tierna.

—Si. Me iré un rato con tus tíos.—aseguró mirando a su hija.

—¿yo?—preguntó poniendo a Steve bajo sus brazos.

—tú te quedarás con mamá.

—¿Y tú?

—Me iré un rato.—repitió.

—¿Por qué?.

Jughead terminó de ponerse los zapatos e hizo una mueca—No lo sé. ¿Debería preguntármelo?.—la niña asintió, sin saber a lo que su padre se refería.—¿Te portarás bien con mamá?—Addison asintió haciendo una mueca—¿Te dormirás temprano?

—¿Y tú?

—Yo volveré cuando tú ya estés durmiendo.—Addison negó—¿No?

—No vayas.

Jughead rió—Pero iré solo un rato. Para cuando despiertes, estaré aquí.

—No quiero—negó la niña.

El chico hizo un silencio y tomó a su hija para sentarla en su muslo—¿Qué te parece si cenamos y te cuento un cuento para que te duermas?.—Addison asintió con una sonrisa.—Bien.—este se levantó con su hija en brazos—Bajaremos a comer.

Jughead bajó y se sentó a cenar con todos, o bueno, varios.—¿Nos vamos?—preguntó Archie aplaudiendo luego de la cena.

—Esperen—dijo Jughead—¿Podemos irnos en unos quince minutos?

Todos se miraron confundidos—¿Qué tienes que hacer?—preguntó Sweet pea.

Jughead tomó a su hija—Acostaré a dormir a Addison y a leeré un cuento—este miró a la niña y esta le sonrió—Se lo prometí.

Betty sonrió mientras levantaba algunas cosas de la mesa.

—Baboso—soltó Tyler.

Jughead subió con su hija, le puso el pijama para acostarla y arroparla en el medio de la cama. Este la cubrió con las sábanas y se acostó a su lado. La pequeña abrazó a Steve y se aferró a un dedo de su padre. Él sonrió mientras comenzaba a narrar una historia.

La niña no demoró en dormirse y este miró a Betty acercarse para ponerse a su lado—Se durmió—murmuró.

Jughead miró a la rubia y asintió—Y se aferró a mi dedo—este lentamente intentó soltarse de la niña y cuando lo logró, se levantó para quedar frente a Betty.—¿No necesitas nada?.—ella negó.