They Dont Know About Us

Capitulo 36 "Mala noche".

Narra Nicole: 
Desempaqué mis cosas y me tiré en la cama a descansar. El viaje había sido cansado y a partir de mañana comenzarían los eventos, lo que sería aún más cansado.
Suspiré.
Odiaba estos congresos. Solo juntas, espectáculos y promociones que no me interesan, y aquí estoy por el simple hecho de que soy la única hija de mi padre.
Lo único divertido cada año es Harry, todos los demás son unos raros que solo piensan en dinero y en salir llenos de contratos aquí.
Y es que en todos los años que vengo, no logro conocer a una persona con la que pueda entablar una conversación que no incluya negocios, a excepción de Styles.
Llamaron a la puerta. A duras penas me levanté de la cama y fui a abrir la puerta.
Mi padre.
- Hija, ¿por qué no vas un rato a la playa? Estás en Miami y hoy es el único día libre que tendrás hasta que volvamos a casa. Podrías conseguir otros amigos... Los demás jóvenes están en la fiesta de bienvenida, en la playa -sugirió.
- ¿Y qué hay de ti?
- Iré a cenar con unos colegas, ya sabes cómo es esto.
A mi padre tampoco le agradaban mucho los congresos. El con o sin promoción siempre tenía trabajo, solo iba por compromiso.
- De acuerdo, te veo después -cedí.
Narra Harry:
Me encontraba caminando en el pasillo del hotel, rumbo a la fiesta de bienvenida cuando a lo lejos divisé a una rubia caminando hacia a mí. 
Llevaba un blusón rojo con las mangas largas y el escote del busto demasiado pronunciado, traía puesto unos mayones negros y unos tacones negros. El cabello lacio le caía en los hombros y me miraba con expresión de superioridad.
- Necesitamos hablar -murmuró cuando estuvo lo suficiente mente cerca.
- No tengo nada que hablar contigo -dije y negué con la cabeza.
- Harry, esto es en serio...
- Quiero que te alejes de mi, Kimberly -reproché-. Tú y yo no tenemos nada.
Kimberly tensó la mandíbula. Me tomó de la mano y me tiró de ella, haciendo que entre a una tipo bodega de intendencia.
Posó una mano en mi pecho y lo acarició por encima de la ropa.
- Esto te importa -susurró en mi oído, para después lamer el lóbulo de mi oreja-, tiene que ver con _____(Tn).
Mis hombros se tensaron y negué con la cabeza.
- Si lo que quieres es amenazar no te servirá de nada, ya no nos puedes hacer daño.
- Te equivocas, querido Edward -besó la comisura de mis labios.
- Kim, ya no quiero problemas -me separé de ella y estaba a punto de salir de la bodega, cuando me estampó en la pared y me acorraló.
- Si no haces lo que te digo puedo hacer que expulsen a tu amorcito de la universidad -amenazó.
Negué con la cabeza y reí a carcajadas.
- Quiero ver que lo intentes -reté.
- ¡Ay cállate! -rodó los ojos-, sabes que mi padre es íntimo amigo del 
director.
Y era cierto... Kim ni siquiera había pasado su examen de admisión a la universidad y aún así estaba ahí gracias a que su padre y el director eran excelentes amigos.
- ¿Qué quieres? -pregunté.
- No es lo que quiero, es lo que harás -ordenó-. Cuando lleguemos de Miami le dirás a ____(Tn) que ya no estás enamorado de ella y que retomarás los planes de boda conmigo.
Fruncí el ceño.
Wow, Kim de verdad estaba loca.
- Debes ser muy ingenua si crees que de verdad haré eso -contesté.
Su cara se tornó seria y amenazante.
- Pues entonces dile a ____(Tn) que se valla despidiendo de la universidad.
- No serías capaz de...
- ¡Ay! Claro que soy capaz. ¿Sabes quién fue el culpable del accidente de Nicole? -tomó de mi barbilla y clavó sus uñas-. Tom es un experto para escabullirse.
- Eres una...
- Pero no me puedes acusar, no tienes pruebas -sonrió cínica.
- Kimberly, no puedes...
- Así que le dirás a ____(Tn) que a quien amas es a mí, nos casaremos, me darás parte de tu maldita fortuna y luego podrás hacer lo que quieras, o sino que ____(Tn) se olvide de su carrera porque me encargaré que no la acepten en ninguna universidad de América sin contar que haré que Anne la despida.
Y entonces me di cuenta que jamás había odiado tanto a una persona. Aún no entendía como alguna vez fui algo suyo, ¿tan idiota era? Me sentía humillado, torpe e impotente. ¿Cómo es que alguien podía tenerme así de amenazado? Me había dado en mis puntos débiles y yo no podía defenderme, ni a mí ni a ____(Tn).
¿Cuál se supone que era la decisión correcta?
- ¿Aceptas? -arqueó una ceja.
Suspiré.
Narra Nicole:
Me mordí el labio inferior.
Maldije para mis adentros y suspiré.
Hace más de media hora que me encontraba aquí y no había entablado conversación con alguien, todos eran unos superficiales huecos. Típicos hijos de papi.
Mierda.
- ¿Quieres algo de tomar? -ofreció el barman.
Negué con la cabeza y el chico se alejó.
- Hola, Nicole -escuché una voz familiar a mis espaldas. Ronca y lenta.
Sabía quién era, al que tenía que vigilar. Styles.
Me di la media vuelta y lo encaré.
- Hola, Harry.
Llevaba el cabello alborotado, los ojos rojos y apestaba a alcohol
Estaba completamente ebrio.
- ¿Por qué estás ebrio? 
- Porque tomé alcohol -respondió y yo rodé los ojos por la obvia respuesta.
- ¿Y por qué lo hiciste?
- ¿Cómo estás? -ignoró mi pregunta y se acercó aún más-, extraño a ____(Tn)...
- Yo igual extraño a Louis, pero estás exagerando -repliqué.
- Nicole, eres lo único que tengo ahora -murmuró y apoyó su cabeza en mi hombro.
¿Qué rayos le pasa a este chico?
- Styles, creo que es mejor que vuelvas al hotel, ¿cuál es tu cuarto?
- El 365 -susurró y besó mi hombro.
- Vamos, tienes que descansar -dije y lo tomé de la mano.
Caminamos por la terraza e ingresamos al hotel, subimos hasta su piso, el de vez en cuando se tropezaba pero yo solo quería encerrarlo en su habitación para irme yo a la mía y dormir, estaba harta de tanta porquería y a penas era la primera noche aquí.
Nos encontrábamos en el último pasillo cuando la rubia oxigenada salió de una de las habitaciones y me miró cínicamente.
Entonces, Harry me detuvo e hizo que mi cuerpo se pegara al suyo. Besó mis labios fieramente y pasó sus manos a mi espalda, presionándome contra sí.
Apoyé mis manos en su pecho intentando separarme, pero él era demasiado fuerte.
¿Qué mierda pasaba aquí?
De pronto, el beso comenzó a ser suave, cálido. Mis ojos comenzaron a cerrarse y poco a poco fui cediendo.
Colgué mis brazos en su nuca y pasó sus manos a mi cintura, acariciándola.
Bajó sus dulces besos a mi mentón y reprimí un gemido.
No podía creer lo que estaba sucediendo, ¿cómo Styles y yo pudimos quedar en esta situación?
Yo que temía que Harry terminara lastimando a ____(Tn) y es lo que estoy haciendo justo ahora, la estoy traicionando.
Y aún peor, con Kimberly presente para burlarse. 
Empujé a Harry y él me miró atónito pero aún seguía desorientado de tan ebrio que estaba.
Miré a los lados esperando encontrarme con una Kimberly con expresión burlona y de superioridad, sabiendo que con esto ya nos tenía acorralados.
Pero no, la rubia ya no estaba ahí, se había ido en quien sabe qué momento.
- ¡¿Estás loco?! -le grité a Harry-, ¿QUÉ MIERDA TE SUCEDE, STYLES?
El miró al suelo y se tambaleó hacia un lado. Maldito ebrio sin vergüenza.
Tenía dos opciones: dejarlo ahí solo o llevarlo a su habitación. Después de lo que había pasado no quería estar en la misma habitación que Harry, el estaba ebrio y yo cansada.
Pero a fin de cuentas es mi amigo.
Suspiré.
Tomé de su mano y seguimos caminando por el pasillo hasta llegar a su habitación.
- ¿Tu llave? -pedí.
- No lo sé...-murmuró con voz arrastrada.
- ¿Dónde dejaste tu maldita llave? 
Comenzó a revisar en sus bolsillos hasta que la encontró. Se la arrebaté y la introduje en la cerradura y así entramos a su habitación.
Harry a paso tambaleante se sentó en la cama y se quitó los zapatos. Me miró, sus ojos comunicaban profunda tristeza, estaba llorando.
Nunca había visto a Harry así.
- ¿Discutiste con ____(Tn)? -me atreví a preguntar.
Negó con la cabeza y suspiró.
Me senté junto a él y apoyé mi cabeza en su hombro.
Así nos quedamos varios minutos, en completo silencio. No era para nada un silencio incómodo, al contrario, era demasiado acogedor.
Me preguntó que habría puesto a Harry tan mal, tanto para tomar el impulso de besarme y tomar alcohol de más. Styles no es así, y sospecho en que la perra oxigenada tuvo algo que ver.
Pero ese no era mi miedo principal, sino que Kimberly le diga a ____(Tn) que vio a Harry besándose conmigo. No podría mentirle cuando me preguntara, y a pesar de que Harry y yo solo somos amigos, la situación nos hace ver como algo más, queramos o no.
Y si Louis se entera... Es increíble en cómo se pueden echar a perder las cosas en tan solo un segundo.
- Es mejor que me valla -susurré-, mañana hablaremos, cuando estés en tus cinco sentidos.
El asintió con la cabeza y se secó las lágrimas.
- Buenas noches -murmuró.
[...]
Eran las nueve de la mañana.
En toda la noche no pude dormir ni un poco así que estaba como todo un zombi. Me di una ducha rápida antes de quedar dormida en la regadera.
Me vestí con unos jeans, una blusa estampada y unos zapatos bajos. Me encontraba rumbo hacia la habitación de mi padre cuando mi celular comenzó a sonar.
"Llamada de ____(Tn)".
Mierda.
Me mordí los labios de puro nerviosismo y contesté.
- ¿Hola? -pregunté insegura, ¿Harry le habrá dicho?
- Nicole, ¿ya viste a Harry? Le he estado llamando desde ayer pero no contesta mis llamadas -dijo y suspiré pesadamente.
Algo pasaba aquí. Si Harry no tenía problemas con ____(Tn)...¿por qué no le contestaba las llamadas?
¿Qué se supone que deba responder?
- Este... No, no lo he visto -mentí.
- ¿Seguro?
- Sí. ¿Sabes qué? Me tengo que ir, hay desayuno con los productores, te llamo luego -dije.
- Si ves a Harry dile que me llame, por favor.
Cerré los ojos con fuerza y no pude evitar sentirme culpable.
- Yo le digo, hasta luego -trunqué la llamada.
Fui hacia la habitación de mi padre y toqué la puerta. Después de unos segundos, la abrió.
- ¿Cómo te fue anoche? -preguntó.
- Ya sabes, aburrido -mentí de nuevo, ya se me estaba haciendo costumbre mentir-. ¿Y a ti?
El sonrió.
- Ya tengo un contrato -se encogió de hombros.
[...]
Me encontraba en el restaurante del hotel, junto a los demás hijos aburridos de los otros productores. Los jóvenes íbamos en una mesa y los productores en otra.
Yo trataba de buscar a Harry con la mirada, si los empresarios también tenían desayuno entonces debería estar también aquí, pero no lo encontraba en ninguna parte.
-... ¿y qué hay de tu padre, Coleman? -preguntó uno de los chicos de mi mesa. Era bastante guapo, pero como dije antes estaba hueco.
- ¿Mi padre qué? -pregunté sin interés y seguí buscando a Styles con la mirada.
- ¿De qué se trata el corte que hizo para promocionarse? -continuó.
- ¿Qué ustedes solo piensan en negocios? -repliqué aún sin interés.
- Pues estamos en un congreso -habló otra chica de la mesa-, ¿a qué más venimos si no a hacer negocios?
Rodé los ojos.
- Estamos en Miami, por Dios, hay mejores cosas que hacer que firmar contratos -reproché.
Y entonces vi a Harry en una de las mesas del fondo, pero se encontraba completamente solo. Como estaba hasta el fondo se encontraba en el área de fumar, y eso estaba haciendo el estúpido.
- No venimos a vacacionar -me contestó el chico y antes de que pudiese continuar, me puse de pié y fui hacia la mesa de Harry. A penas llegué le quité el cigarro de los labios, lo tiré al suelo y lo pisé.
- ¿Te olvidas de que padeces asma? -repliqué.
Me fulminó con la mirada. Tomé asiento en su mesa y lo miré desafiante.
- ¿Qué mierda te pasa? -pregunté firme-, anoche me besaste, luego pediste perdón, me dijiste que no tenías problemas con ____(Tn) y hoy me entero de que no le contestas sus llamadas.
Suspiró pesadamente.
- Eso es algo que no te incumbe, Nicole -murmuró.
- Tal vez no...Pero aún así quiero saber.
- Pero yo no quiero decirte -dijo bajito.
Deslicé mi mano por la mesa y tomé de la suya. Me miró con los ojos cristalizados y supe que Harry no era tan idiota, estaba pasando por un mal momento y tenía que ayudarlo. Pero primero necesitaba saber que le sucedía.