Uniformes escolares. Ceriosamente, son lo peor.
Puede cumplir con el deber y ser víctima del programa de reciclaje de servidumbre por
contrato de la escuela.
NO LO SIENTO:
Llevar un diario y hacer listas. Aprendí desde el principio que escribir tus objetivos es el
primer paso para alcanzarlos.
Tetas de trabajo. Agradezco a mi Coogan por este escote.
Conociéndome lo suficientemente bien como para saber que no necesitaba
antidepresivos.
Aprender a amar mi cuerpo y cuidarlo, incluso si no creo que sea perfecto.
Encontrar formas de moverse puede ser un deber (¡gracias, papá!).