S E I S

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Ambos se despertaron y al verse se sonrojaron, ella se levantó y se fue a su cuarto a vestirse, no sin antes desearle buenos días a su amigo, el se dio un baño pensando en la noche anterior.

Cuando bajo las escalera de aquella casa, pudo escuchar a un bebe llorar a todo pulmon y a la pobre venezolana diciendole a el bebe que parara de llorar. Cuando entro en la cocina, casi todo estaba regado por todas partes, la haina, estaba regada por la mesa, algo se quemaba y el cafe se botaba. Por lo que el decidio intervenir en el momento de crisis de la tricolor.

- Ya deja de llorar Maracaibo, la abuela tiene que preparar las arepasy el café... - El bebe dejo de llorar po un segundo, miro a Venezuela con sus grandes y brillantes ojos negros, para luego segir con su llanto.

- ¿Puedo intentar algo? - Pregunto el ruso, viendo la bandera de la pequeña ciudad, esta le recordaba un poco a su hijo mayor, Rusia. Ya la pequeña ciudad, era de color, blanco, rojo y azul, con un escudo, pero para su edad, tenia grietas tambien.

- Si, tú lo cuidas, cuidaito se te cae...- Dijo la venezolana entregandole la ciudad y acomodando todo en la cocina, limpiando por aquí y por allá. Mientras tanto, el bebe magicamente dejo de llorar y URSS comenzo a jugar con el. Y fue como tener a Rusia de pequeño otra vez, o a Bielorusia otra vez de bebe, o a cualquiera de todos sus hijos. Aquellos que ahora son unos adultos y lo dejaron, solo.

- URSS, ¿Quie... - El embase con queso callo al suelo y ella salto sobre el ruso quitandole el pequeño de las manos. Y de repente el regreso al mundo real, para encontrarse con Venezuela sosteniendo al bebe en sus manos y apuntandole con un cuchillo - ¿Qué mierda te pasa? - Dijo la tricolor con rabia y decepcion en su voz. Lo que lo hiso saber que, metio la pata.

- ¡Ven que hace el hermano de la gorda aquí! - Un grito masculino se escucho por la casa, la venezolana no predio de vista al mayor.

- ¡Yo lo llame Moscú! - respondió la venezolana, el estado ruso entro en la cocina y la esena lo dejo paralizado y junto a el estaba Canada quien miraba todo en shock.

- ¿Pero qué? - Fue lo unico que salio de la boca de el ruso. Venezuela dejo de amenazarle y abrazo a la pequeña ciudad quien lloraba en sus brazos - ¿Qué hisite abuelo?

URSS no respondio, ya que ni el sabe lo que izo, pero teme que la venezolana le odie ahora, el podia soportar lo que sea, pero no el odio de Venezuela.

- Vamos Canada... - Y sin más, ella le entrego el bebe a su padre, para luego irse con el canadiense quien andaba con un mapache.

- Ya pequeño, ya paso... - Le susurraba el estado a su pequeño, quien rapidamente se quedo dormido - ¿Qué paso abuelo? - Pregunto el menor de manera fria, el mayor, miro a su nieto.

- Primero que nada... ¿Estas casado con la hija de Venezuela?

-Si, te invite a la boda, pero nunca apareciste... Es más, todos estamos casados, mis hermanos y mis primos, pero jamás apareciste en ellas... Siempre estuviste, desconectado del mundo... - Respondió Moscú encoguiendose de hombros, ya acostumbrado, despues de todo, hasi era el.

- ¿Me invitaron? - La pregunta salió como un susurro de los labios del mayor.

- En ese momento vivías en las montañas como todo un paranoico... - Dijo Moscú mientras prendía el televisor y veía las noticias en CNN.

* * *

El canadiense y la venezolana hiban caminando por un pequeño bosque de pinos.

- Deja ver si te entiendo... - Dijo el bicolor un poco confundido por las palabras de Venezuela - ¿Quieres terminar con mi hermano? - Ella solo hacintio como respuesta - ¿Si sabes cómo es el?¿Verdad?

- Claro que se como es el, por eso hablaré con el seriamente - Decía ella con la mirada sería.

- Bien... Yo te voy a ayudar en lo que pueda si el se vuelve loco... Pero ahora tenemos que irnos o llegaremos tarde a la reunión.

Y dándole fin a esa conversación los dos siguieron con su caminata.

* * *

Cuando terminó la reunión de la ONU que se llevaba acabo en Ecuador, Venezuela, la ONU y Rusia, hablaban sobré unos negocios nuevos para intentar aumentar de alguna manera la producción de gasolina en el pequeño país.

- Creo que si, de alguna manera quitarán los barcos de USA yo podría mandar nueva maquinaria... - Dijo el ruso explicando de manera simple.

- Su gobierno no quiere quitar los barcos y no hacen nada ilegal, están en zona de nadie, por lo que... - Mientras la mujer de piel azul explicaba, alguien más tenía otros planes y no eran nada pasificos.

Los tres entraron a un pequeño cafetín para seguir con su discusión.

Y cuando dejaron de charlar, Venezuela se fue para hablar con el americano y Rusia se fue a casa, dejando a la Unión sola... Grave error...

- Te dije que estoy bien... - Dijo ella por teléfono - No, ellos se fueron a sus territorios...

Y alguien salto sobre ella, su teléfono callo lejos.

💠♾️|PARA AQUELLOS QUE SON SENSIBLES LES RECOMIENDO SALTARSE ESTA PARTE|♾️💠

La chica intentaba levantarse, pero el hombre que se encontraba sobre su espalda, la inmovilizó con una de sus manos y con la otra.

Corto sus hermosas alas de color lila.

La paloma de la paz perdió sus alas...

Ella grito de una manera desgarradora, que pertubaría a cualquier persona, pero para el, era como música para sus oídos... Y rápidamente su risa resonó por toda la calle.

Mientras el cuerpo de la chica de piel azul comenzaba a llenarse de sangre, de sus labios salían pequeños sollozos y sus ojos se encontraban inundados de lágrimas.

- ¿Qué ocurre pequeña paloma? - Preguntó con diversión y con ágil movimiento le dio vuelta a la Organización.

Y ella lo miro asustada, sin creer que el estuviera frente a él.

- ¿Qué quieres? ¡Déjame tranquila! - Le grito en un intento desesperado porque ese country la soltara.

- No querida, no puedo darme ese lujo... Además si te suelto mi plan se iría a la mierda... - Dijo sonriente,pero mientras el hablaba ella con sus pocas fuerzas, se libro de su agarre, para comenzar a alejarse a paso torpe.

Pero, con un disparo que le atino a su pierna derecha, la hizo regresar al suelo.

- ¿Donde está tu paz en estos momentos? Sabes después de acabar contigo, asesinar a los demás inútiles será muy fácil... - Dijo, tomo el mismo cuchillo que uso para cortar sus alas, levantó su cabeza y viendo sus ojos turquesa con una sonrisa cínica - Ahora de dormir, - Puso el cuchillo en su cuello - Taube - Y con un rápido movimiento hizo un profundo corte en el centro de su garganta, llenándose el también de sangre.

Y así...Muere la paz entre los países del mundo...

- Nazi... ¿Me copias? - Preguntaron desde un pequeño comunicador.

- Fuerte y claro, Cuba

Una amiga para URSSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora