Empezar de cero

★Capítulo 7★

Pov. Sting

—Stiing... Stiiing... STIIIIIING!!!— oigo a Lucy llamarme. Levanto la cabeza bruscamente y chocamos frentes . Hostia...

—Auuch. Que daño. ¿Pasa algo? — digo un poco confundido mientras maldigo  internamente al dolor.

—¡Ya hemos llegado! Hay que ir al hotel y pedir la habitación. Pero primero vamos a por el equipaje — dice ilusionada Lucy.

Llegamos a un hotel lujoso. Demasiado barato para lo que es, pienso.  Cuando llegamos a recepción una chica con cabello cortos y verde nos atiende.

—Su habitación es la 143. Está en la segunda planta.

Nos despedimos con un gracias y subimos.

Los pasillos son lujosos, con paredes de un rosa agradable y con decoraciones que combinan perfectamente con el ambiente.

— Ya hemos llegado —entramos— Wooooow!!—gritamos al unísono.

La habitación es gigante. Las paredes son de un color cálido y tiene un armario inmenso. Pero algo falla. Las camas. O debería decir... la cama.

—¿¡Queee!? Solo hay una camaa. ¿No dijiste que eran dos?

Bajamos a recepción.

—Lo sentimos. Pero solo queda esa habitación. Todas estan ocupadas, al parecer estos últimos meses la gente viene sin parar. Pero, ¿no sois pareja? Eso no debería importaros.

—N-no somos pareja jeje — digo sonrojado.

—Uy lo siento. Pero si quieren alojarse tendrán que dormir en esa habitación — admito que la idea de dormir con ella no me desagrada. Pero no sé lo que ella piensa.

—D-a igual dormiremos ahí —dice Lucy como un tomate.

Subimos con un silencio incomodo que invade el ascensor. Llegamos a la habitación.

—Y-y-yo en el lado derecho!—su cara está como un tomate. Parece que le va a dar un patatús.

—9-ok. Bueno, solo es una noche no?

«Queridos clientes alojados en el hotel Princess,  les informamos que los próximos  3 días los trenes que se dirigen a los lugares siguientes: norte, lago Furt y la frontera; serán detenidos debido a las fuertes tormentas. Gracias por su atención.»

Vale, ya no es una noche; sino que seran unas 4!

—Madre mía... si han parado los trenes supongo que los demás transportes también... no nos queda otra: Tendremos que quedarnos unos días más aquí —dice Lucy— Menos mal que cogí la oferta del hotel con el viaje, nos costarán mas baratas las noches. 

—SOY UN CAFRE! —grito. Se me caen hasta unas lagrimillas. Pero Lucy me anima con un abrazo.

Cuando preparamos todo el equipaje en el armario, Lucy se da un baño. La espero sentado en la cama para después entrar yo.

Cuando nos ponemos mas comodos hablamos un poco de lo que haremos cuando lleguemos a la frontera y nos quedamos dormidos uno frente el otro.

............

Unos rayos de luz atraviesan mis párpados. Intenta levantarme pero algo me detiene. Cuando bajo la vista, veo  Lucy dormida y abrazada a mí. No puedo evitar el sonrojo en mis mejillas, estoy ardiendo. No quiero despertar a Lucy así que opto por quedarme un ratito más en la cama. No puedo dejar de observar a la rubia, su pelo, sus ojos, su nariz... todo. No sé como puede gustarme tanto. Nunca había experimentado el amor. ¿Podría yo gustarle? Sting no digas tonterías.

Veo que Lucy se retuerce y se despierta. Pega un salto y cae de la cama.

-L-lo siento yo... estaba durmiendo y...

-No pasa nada- digo sonrojado-me acabo de despertar así que no te preocupes.

-Uuff, menos mal. No quería que te sintieses incómodo- con un pequeño sonrojo.

Nos asomamos a la ventana y el cielo está nublado. Llueve a cántaros y decidimos no salir del hotel hasta que la tormenta pare un poco. Bajamos a desayunar. Como es bufete libre cogemos toda la comida posible , ya que no hemos comido nada desde que llegamos. Lucy coge leche con ColaCao y unas tostadas con mantequilla y mermelada.  Yo tambien cojo ColaCao, pero decido cambiar las tostadas por 2 croasanes de chocolate. Pedimos papel de aluminio para guardar comida.

Charlamos un poco hasta las 11 de la mañana. Como la lluvia paró un poco Lucy dijo de salir a pasear por el pueblo. Pero de repente vuelve a caer a chorros, como si supiera que no quiero que este momento acabe nunca. Había gente que intentaba refugiarse de las pequeñas pero abundantes gotas que caían del cielo. Fijé mi vista en Lucy.  Ella tiene una mirada entristecida y deprimida. Quiero preguntarle pero no me atrevo.

Mientras, en Magnolia:

Pov. Lissana

Hace unos días en Fairy Tail...
«Natsu está demasiado deprimido... al final tendré que decirles la verdad.»
—C-chicos... tengo que deciros algo importante...—Todos los del gremio me  miraron curiosos —sobre lo de Lucy, era mentira.
Todos se quedaron pasmados.
—HIJA DE- —gritó Erza, pero me fui antes de que me hiciera algo.

Pov. Natsu

—¡¡¡¡¿Que?!!!!—gritó enfurecida Erza— ¡¡¡Será  Mentirosa!!!

—¡ERZA!— gritó Gray— la solución no es atacar.

—P-pero... ¡ella hizo que Lucy se fuera y nos dejara! ¿No lo entiendes?!

—¡Claro que lo entiendo! ¡He perdido a mi mejor amiga y el tío al que más odio ya no quiere pelea conmigo!

En la esquina más apartada del gremio, yo  escuchaba los gritos de mis amigos. «Lucy... te encontraré»

★★★★★★★