Relatos para antes de Dormir.

Fetish.

   Susan es una joven estudiante de medicina. Como la mayoría de las muchachas jóvenes, Susan va en busca del amor, entonces conoce a David, un chico tranquilo y de buena familia. Su enamoramiento fue casi fugaz, ella jamás había conocido a alguien como David.

   Susan se siente locamente enamorada de David, se la pasa hablando de él con sus amigas, por el contrario, ellas dicen que David es un poco extraño, no suele hablar mucho y tiene una mirada un tanto perturbadora. Susan ignora todo aquello que dicen de su amado, para ella David es el hombre perfecto. Susan podría enumerar cientos de cosas que le gustan de él: es gentil, amable, cariñoso, protector, la trata tan bien, es muy dulce con ella, además hace algo que le encanta a mucho a Susan, la abraza y acaricia su suave cabello de una forma que a su parecer, es muy tierna. «¡Qué más podría pedir!» piensa ella.

   Un día Susan decide presentarles a sus padres, su amado novio. Ella preparó todo para la especial ocasión. Cenan tranquilamente todos juntos, los padres de Susan quedan encantados con el muchacho, en un momento, la madre de Susan se le acerca para susurrarle:

   —Es encantador, aunque un tanto raro. Ve con cuidado cariño, hace un tiempo lo estas conociendo —Susan asiente sin darle mucha importancia.

   Al terminar la velada, David se despide cordialmente de los padres de Susan. Parados en la entrada, david le dice a Susan que también desea presentarle a sus padres, ella queda maravillada. Se despiden y Susan espera con ansias ese día. 

   Al transcurrir los siguientes días, por fin llega el día acordado en el que Susan visitará a su novio. Se arregla y se pone su mejor vestido. Toca la puerta y le abre David, se abrazan y la hace pasar. El padre de David la saluda amablemente y la invita a tomar asiento para la cena. La cena transcurre sin ningún contra tiempo.

   —Me hubiera encantado que conocieras a mi madre esta noche —dice David en un tono nostálgico. Susan sabe que la madre de su novio tiene cáncer terminal y está la clínica donde la cuidan en su poco tiempo de vida.

   —Lamento todos los difíciles momentos que han estado viviendo —dice Susan, tratando de consolar a la familia, David y su padre se lo agradecen. Al cabo de un momento, David decide cambiar de tema.

   —Susan, hay algo que he querido decirte... —anuncia. Susan le pregunta qué es lo que le tiene que decir— tengo un secreto, más bien un fetiche...

   Susan se ríe sin entender muy bien de lo que David habla.

   —Cariño, todos tienen algún tipo de fetiche, por ejemplo yo colecciono reliquias antiguas.

   —Y yo soy muy meticuloso con la limpieza, hasta tengo mis productos preferidos de limpieza —agrega el padre.

   —Si, pero yo no tengo ese tipo de fetiche... —dice David. Susan lo mira con una ceja alzada, llena de intriga-—tengo este...

   Saca un pañuelo del bolsillo de su chaqueta y se abalanza sobre Susan. Ella cae en sus brazos inconsciente.

   Susan despierta en una especie de sótano, amarrada en una camilla reclinable. Se siente algo mareada y no ve con mucha claridad, aun así puede notar que a su alrededor hay mesas metálicas con unos utensilios que ella reconoce fácilmente porque los utilizan los médicos. Gira su cabeza a un costado y logra ver que en una mesa hay cuatro cabezas de maniquíes con pelucas sobre ellas, sin embargo distingue que tienen manchas de sangre. Se asusta e intenta librarse de las amarras.

   —Mi madre perdió todo su hermoso cabello con las quimioterapias. El cancer la dañó demasiado pero lo que realmente la destrozó, fueron esos malditos tratamientos en que los médicos la sometieron, haciendo que ella ya no fuera la misma, y aun así no lograron sanarla. Así que me dedico a buscar la cabellera perfecta para ella cuando muera, y la tuya querida Susan, promete ser la indicada...

   —¡Estas completamente loco! —le grita Susan entre lágrimas.

   —Puede ser... pero eso tú ya lo sabías y te negabas a creer.

   Susan sintió un profundo arrepentimiento. Todo este tiempo pudo haberse librado de él. Uno nunca termina de conocer a las personas...

   —Mi padre me ayuda en esto, como ya sabes, él adora la limpieza y se encarga de limpiar mi desastre —dice con una sonrisa macabra y una mirada de absoluta perversión. —Fue un verdadero placer haber sido tu novio Susan, pero verás que necesito tu hermoso cabello. —dice tomando un bisturí.

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Holaaaa, qué tal genteee, por fin un nuevo capi, espero les haya gustado. Desde ahora subiré capis los viernes en la noche para que esten atentos a las actualizaciones. Que tengan lindo fin de semana, buenas noches👻