Coincidencias.

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   Me encontraba sentada en un circulo con varias personas, un grupo de apoyo. Pensé que sería buena idea hablar de mi experiencia con gente que haya pasado por algo similar. Era el día tres y aun no me atrevía a hablar de mi horrible tragedia, no es para nada fácil decir que mi hermana y mi novio habían sido asesinados por un lunático aunque haya pasado medio año.

   Rick, el psicólogo que dirige el grupo de apoyo, le pregunta a un tipo llamado Todd, si puede hablar él de su experiencia con la muerte de un ser querido. Todd se mira las manos con nerviosismo.

   —Todd, si sientes que no puedes hablar aun, puedo pedirle a alguien más que lo haga —dice Rick, notando su incapacidad de articular una palabra.

   —¡No! —Dice Todd de repente—es decir, me es difícil hablarlo pero quiero hacerlo —dice decidido.

   Todd comienza a hablarnos sobre la pérdida de su madre, sobre lo trágico que fue luchar contra su enfermedad y lo terrible que había sido el tener que acostumbrarse a una casa solitaria y a una vida vacía. De alguna manera me identifiqué con sus palabras. Cuando era pequeña, mis padres fallecieron, aunque no los recuerdo muchos igualmente los extraño, ahora he perdido a mi hermana y a mi novio, todo ha sido tan difícil.

   Por un momento me llama bastante la atención algo que dice Todd.

   Todd habla que después de un tiempo de haber muerto su madre, comenzó a tener sueños extraños, donde el mataba a diferentes personas e incluso familias, las masacraba. Me recorrió un escalofrío por el cuerpo. Todd comentaba que a veces le daba terror volver a dormir. Varios de los presentes los apoyaron y dijeron que a lo mejor era parte de su proceso de duelo. Rick se veía pálido.

   —Sé que es imposible que sea un asesino, después de todo, la noticia que vi en la mañana pudo haber sido solo una coincidencia.

   —¡Bueno, silencio en la sala por favor! —Dice Rick—Gracias Todd por compartir tu experiencia.

   —Gracias Todd —dijeron todos al unísono.

   —¿Alguien más quiere compartir su experiencia con la pérdida de un ser querido? ¿Claire, quieres seguir tú? —Pregunta Rick. Trato de negarme pero algo dentro de mi me pide que lo suelte y diga todo.

   —De acuerdo.

   Comencé a narrar toda mi vivencia y lo horrible que había sido encontrarme con los cuerpos de mi hermana y mi novio, y la lucha que había tenido con el enfermo de Sebastian, que al final terminé apuñalando en defensa propia con un cuchillo que alcancé a tomar de la cocina.

   Al finalizar la sesión de hoy, me sentí un poco más ligera, hablar las cosas si ayuda a que duela un poco menos. Al salir de la sala, vi a Todd caminando solo, y se me vino a la mente lo que habló sobre su sueño, tuvo la valentía de decirlo y yo no pude contar sobre el mío. Entonces me acerqué a hablarle.

   —Hola Todd —lo saludé.

   —Hola... ¿Claire, cierto?

   —¡Si! Seguramente te preguntas porque te hablo, la verdad es extraño, siento que si te cuento lo que me sucedió, tú si podrás entenderme. —comencé a decir, Todd escuchaba atento—Pues verás, antes de que muriera mi hermana y mi novio, soñé que iba a suceder.

   Todd me invitó un café para seguir explicándole lo que me sucedió y a su vez, él me explicaba lo que ocurría en sus sueños, la diferencia era que mi sueño fue como premonitorio y los de Todd son como si él los hubiera vivido y al día siguiente salían en las noticias los homicidios.

   —¿Claire, crees que yo fui quién cometió todos esos homicidios? —Todd se ve preocupado.

   —No lo creo, no tienes ojos de ser una mala persona.

   Llevé a Todd a su casa en mi auto. Me pareció tan especialmente raro este día, pero no me puse a pensar demasiado y me fui a dormir.

   Me hallaba caminando por un pasillo oscuro, me detuve frente a una puerta y la abrí, un hombre estaba acostado sobre una cama, ensangrentado, mientras que otro estaba de pie con un cuchillo goteando en su mano. Voltea y me mira, entonces me doy cuenta.

   —¡Todd! —Grité al despertar, sudando. Sabía lo que sucedería, Todd no es un asesino. Me apresuré en ir y esta vez no dejaría que alguien más muriera por no poder evitarlo. Tomé un arma antes de salir y llamé a la policía mientras iba en el auto.

   Llegué a la casa de Todd, la puerta estaba abierta, entré sigilosamente. Al entrar a la habitación de mi sueño, lo vi ahí de pie, listo para matar a Todd.

   Le disparé en la pierna y cayó al piso. Todd pudo reaccionar y se levantó de golpe a quitarle el cuchillo al asesino.

   —¿Cómo supiste que me iba a matar? —Pregunta Todd.

   —Lo soñé, además mi intuición me ayudó un poco, lo vi en su cara al darme cuenta en el grupo de apoyo, lo noté muy extraño. ¿No es así, Rick? —Dije. Levantó su mirada en una sonrisa irónica mientras se quejaba del dolor.

   —No pensé que alguien más lo sabría vine aquí para deshacerme de la única quién podría descubrirme —dice Rick.

   —Haz estado asesinando con el único propósito de tener más integrantes en el grupo de apoyo, porque eres un enfermo que no puede vivir sin escuchar la agonía y el sufrimiento de los demás.

   —Muy bien Claire, me has impresionado bastante, no dudo de que eres lo suficientemente fuerte para superar tú pérdida —dice sonriente.

   —¡Infeliz! —Lo apunté con el arma-la policía ya viene, no tienes cómo escapar.

   —¡Claire, detente! No vale la pena que te manches las manos por este demente —me pide Todd, bajo un poco el arma y a los segundos llega la policía y se lo llevan.

   —Creo que por fin llegué a tiempo —dije en voz baja y con lagrimas recorriendo mis mejillas. Estábamos sentados en su porche.

   —Muchas gracias Claire, me salvaste la vida. Si hay alguna manera de agradecerte, solo dímelo, ¿de acuerdo?

   —Con un café quizás —dije y nos reímos. 

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Holaaa, nuevamente vengo a traerles otro relato, comenten qué les pareció y piquenle a la ★ si les gustó. Me despido, que tengan un lindo fin de semana, buenas noches👻🖤

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