Un conejito en casa - SeHo | HunHo (En edición)

Capítulo 9

- Verás yo... yo... ¡Amo esta serie! Es tan gracioso Gumball y las caras que ponen- Con una nerviosa sonrisa miró hacia el gran televisor que tenía delante y se metió lo que quedaba de pastel en la boca.

"Idiota, idiota, idiota"

Se repetía mentalmente mientras bebía un poco de leche caliente para pasar lo que acababa de comer.

- ¡Que bien! Ahora tenemos más cosas en común, hyung. - Sonrió ampliamente haciendo que sus ojos despareciesen.

- Si, bien... - Murmuró cuando vio que Junmyeon subía el volumen del televisor. - Voy a hacer una llamada, ahora vengo, pequeño.

Corrió hacia su habitación y cerró con seguro, luego fue hasta el lavabo de esta e hizo lo mismo con la puerta.

Buscó en sus contactos al último que había agregado hace unos días y llamó al momento.

- Vamos, vamos... - Por los nervios, empezó a morderse las uñas y a mover su pierna una y otra vez.

- ¿Que horas son estas de llamar, Sehun? - Se escuchaba de fondo unas voces y unas risas, pero como el mencionado sabía, a Heechul no le gustaban mucho las visitas así que seguir estaba viendo el televisor.

- Quería decirle a Junmyeon sobre lo del beso y que.. que me gustó. Pero al final no he sido valiente y he empezado a hablar de unos dibujos que estaba viendo.

Una risa femenina se escuchó de fondo y Heechul susurraba que bajase la voz, que estaba hablando por teléfono.

- ¿Interrumpo algo, sunbaenim? - Preguntó con un tono burlón.

- Cállate, Momo y yo estábamos viendo un programa de esos de variedades. Entonces... querías confesarte al conejito y vas y le hablas de otra cosa. Genial Sehun, eres idiota. - Suspiró y escuchó cómo bebía de algo, pero tampoco le tomó mucha importancia. - Mira, mañana hay que trabajar, son como las once la noche así que te voy a dar un último consejo por hoy. Apunta, Sehun.

El pelirrojo puso el manos libres y abrió la aplicación "notas" esperando para poder apuntar lo que decía su mayor.

- Listo, dicta sunbaenim.

- Imbecil. Bien, no, ahora apunta bien, si te gusta te tienes que confesar. Si no lo haces, Junmyeon se irá a vivir con otra persona, y no lo volverás a ver nunca más. Yo cuando vi a Momo por primera vez, empecé a acercarme más a ella y bueno, ella se confesó y juntos venimos a Corea.

- ¿No te confesaste tú?

- Yo nunca me he confesado y nunca ninguna chica ha roto conmigo, bueno, cosas de la vida. Es que tengo un rostro tan hermoso-- ¡Ah! Momo me ha pegado...

- En fin, a ver si puedo hacerlo...

- Fighting.

Y colgó.

Se miró en el espejo mientras se repetía que podía, que si Junmyeon reaccionaba mal sabría dónde encontrarlo, tampoco tenía más amigos además de Baekhyun y Chanyeol o Jongdae y Minseok.

Salió del lavabo después de mojarse un poco la cara para pensar con claridad y abrió la puerta de su habitación, escuchando de fondo la risa del menor.

Se sentó a su lado en silencio, memorizando un diálogo que sabría que luego no usaría.

- Junmyeon, tenemos que hablar. - Tomó el control del televisor y empezó a bajar el volumen, necesitaba tener la atención del menor encima suyo aunque eso le pusiera nervioso.

- Dime hyung, soy todo oídos. - El híbrido acarició sus dos orejas blancas y luego apoyó las manos en el sofá, esperando las palabras del mayor.

- Recuerdas el primer día de mi trabajo donde... ¿te quedaste dormido en el autobús? Justo cuando volvíamos a casa...

- Sip.

Respiró nervioso, ni siquiera sabía porqué estaba reaccionando así.

- Te quedaste dormido así que yo te tomé entre mis brazos, entramos a mi habitación y cuando te dejé en la cama, tu... me besaste.

Hubo un pequeño silencio, vio como Junmyeon se quedaba serio.

- Lo siento, lo siento, lo siento. Por favor, Sehun, no me eches de tu casa. - El pequeño híbrido se lanzó al suelo para ponerse de rodillas, tenia sus ojos llenos de lágrimas.

- ¿Qué? ¿Por qué dices eso, pequeño? - Sehun tomó sus suaves manos y lo ayudó a levantarse, haciéndolo que se siente a su lado.

- ¿No estás enfadado? - Vio al mayor negar con el ceño fruncido y limpió sus ojos antes de que sus lágrimas caigan. - E-es que mi antiguo dueño se enfadó porque lo besé y me devolvió...

- Que idiota fue, a mi me gustó tu beso. - Confesó apartando un mechón que caía travieso por la frente del menor.

Junmyeon se sonrojó tanto que ocultó su rostro entre sus manos. - Hyung, no digas eso...

Con una sonrisa traviesa y poca vergüenza, Sehun se acercó un poco más a él y acarició sus manos.

- ¿Por qué no? Es la verdad Myeon, incluso me atrevería a decir que quiero otro... Ahora.

El menor movió un poco sus orejas blancas y empezó a acariciarlas con mucha vergüenza.

- Está bien, tranqui--

Un pequeño beso que no duró más de un segundo, y el menor salió corriendo entre risas pequeñas.

- ¡Ven aquí, pequeño!

Sehun se relamió sus labios, tenía un leve cosquilleo en estos y parecía que los labios del híbrido eran muy dulces. Pero rápidamente sonrió y corrió a perseguirlo.

Junmyeon mentiría si dijera que no le gustó el beso, es más, sentía que algo se removía dentro de él. Su corazón no dejaba de latir y sentía mariposas en su estómago.

Definitivamente amaba estar con Sehun.

Perdón por no haber actualizado antes, estoy algo ocupada con las clases, este curso es muy importante para mi para poder y a la selectividad y luego a la universidad 😭😭💓

Vi que mucha gente me pedía que siguiera además de que les encantaba, gracias por sus comentarios❤️❤️