𝐂 || 💸🗽✨ ⇢ ˗ˏˋ 𝒄𝒖𝒍𝒑𝒂𝒃𝒍𝒆𝒔. ࿐ྂ
Magnolia Baker, una de las adolescentes más ricas de todo el mundo.
Madison Lewis, hija de uno de los mafiosos más poderosos de Estados Unidos.
Avani y Charli Gregg, sucesoras de la empresa más importante de...
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002 ║ gringottsfairy. 𝙲𝚄𝙻𝙿𝙰𝙱𝙻𝙴𝚂! • 💸🛁🎞 "funeral".
❆═magnolia's point of view.
Hoy era el funeral de Nessa, aquella chica que murió en la fiesta de Josh.
Tampoco me importaba, pero si quería que todo siguiera como lo planeamos, debía asistir, y hacer mi papel en esta seria y enrevesada trama.
Ahí estaba, en mi baño de aquella casa en Nueva York. Colocando mi collar de perlas en mi cuello, y aquel precioso anillo con una llamativa piedra en él.
Me puse un abrigo negro de bisón, y una pamela del mismo color.
No penséis que era bisutería, no era nada menos que un anillo de Cartier, al igual que mis perlas de Swaroski.
— Señorita Magnolia, ya tiene el desayuno listo. — una de las sirvientas, Sarah, me alertaba de ello. — Enseguida voy, gracias Sarah.
La chica rubia abandona la habitación, dejándome de nuevo en aquel debate mental sobre bolsos, collares y pendientes.
Un sencillo y corto vestido Saint Laurent cubría mi piel. Un pequeño bolso Christian Louboutin colgaba sobre mi brazo.
Durante estas semanas, todos los que estuvimos presentes el día del accidente estamos siendo perseguidos por la prensa rosa, y por la prensa de última hora. Nos televisaban a diario por todo el mundo. Existían rumores de que éramos culpables de la muerte de Janessa Barrett, por lo tanto sería un homicidio.
No decían nada incierto, pero no era de la forma en la que lo contaban. Nessa no era la niña buena, rica, dulce y caprichosa que todos veían, ella era el mismísimo diablo reencarnado.
Nosotros siete, dijimos la misma versión, aunque la policía no terminara de encajar algunas piezas, que estaban vacías.
El examen de toxicología determinaba la presencia de un relajante muscular ingerido recientemente. No teníamos ni idea, tomó lo mismo que nosotros.
La autopsia determinaba una puñalada en el abdomen. Nosotros dijimos que no habíamos visto a nadie, hasta que nos dimos cuenta de que el agua se tornaba de color rojo.
Las cosas no eran así, pero nuestra imagen y la de nuestras familias no se podría mantener limpia de otra manera que mintiendo.
Nuestros padres no sabían la realidad de lo que pasó, y seguiría siendo así.
Somos culpables, pero no es algo público.
En lo que me fijé, es que estos seis adolescentes tenían mucha menos astucia e inteligencia que yo. No parecían estar acostumbrados a crear coartadas, a mentir o a encubrir. Por supuesto, yo me encargaré con el tiempo de que eso cambie.
