Final

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Chicas, realmente ya me harté de que me tomen por estúpida, sé cuando usan otra cuenta para obtener los dos finales, y siendo honesta, en este punto ya me pregunto si quiero seguir así. Muchos se molestan por no obtener los dos finales, y ya estoy harta de que me intenten hacer pasar por estúpida porque NO LO SOY. Esto me ha orillado a tomar la decisión de publicar ambos finales, como todas querían, pero sepan que esto solamente ha sido debido a presión popular y hartazgo hasta morir, yo quería continuar con la manera original, pero ya no tengo la energía que tenia para lidiar con todo eso. Realmente estoy cansada y no tengo el tiempo ni la energía para lidiar con gente poco honesta. He escrito ambos finales, y me tome la molestia de enviárselos a mas de cien personas individualmente, dejando mensajes y de vez en cuando armando una pequeña conversación, y ya no quiero seguir así. ¿Para que molestarme si mis esfuerzos no servirán para nada al final? 

El mensaje que intentaba dar simplemente se desvaneció en el aire, ya nadie quiere entender que la vida no tiene segundas opciones, y tampoco quieren entender razones personales para eso. No quieren entender ni abrir los ojos. No quieren dejar de vivir en aquella fantasía, por esa razón, decidí terminar finalmente con todo esto y publicarlos. Ya no importa si leen los dos, o solo uno como deberían. 

Hagan lo que quieran.

Aceptar la Oferta de Hikari.

"Ella no se ve preocupada, se ve segura de cada palabra que sale de su boca. Se ve... Confiable" Pensabas mientras analizabas cada uno de los sutiles movimientos de aquella chica frente a ti. Comenzaste a jugar ligeramente con uno de los mechones de tu cabello azabache mientras seguías pensando y pensando. No mentirías, claro que estabas aterrada de ella, y no, no era por la posibilidad que te metiese a la cárcel, ni él gran nivel de poder que tenía sobre los policías. Ni siquiera te importaba que antes haya sido aquella personaje principal de historias las cuales les contaban a los niños antes de dormir. Antes de que ella se haya mostrado ante ti, tú sabias que existía. Estabas segura que un ser tan poderoso como ella existía. ¿Cómo? Simple, él All for One también era una leyenda, y en más de una ocasión pudiste verlo con tus propios ojos.

Tu pulso comenzó a acelerarse, mientras sentías como el sudor comenzaba a recorrer por tus delicadas manos, las cuales alguna vez estuvieron tan manchadas de sangre como las de ella. No sabias si debías de creerle, ya que esa no era la opción más sensata en estos momentos. De manera clara, no podrías confiar en una desconocida que llega a tu vida de la nada y que te ofrece algo que NI SIQUIERA ELLA había podido obtener. Esa situación era tan sospechosa como una persona ofreciéndole dulces a los niños. Intentaste con todas tus fuerzas sonreír de manera amable, rogando con la mirada un poco más de información, pero, considerando que la mirada de la contraria estaba en su teléfono mientras que una sonrisa boba adornaba su cara, decidiste preguntar directamente.

—Si te digo que sí, de manera hipotética, ¿qué ganarías con eso? ¿Para qué me ofreces esto?— Preguntaste llena de confusión. La contraria de cabellos azabaches solamente exclamó un pequeño "¿Uh?" mientras despegaba finalmente la vista de su celular. Ahora una nueva duda te invadía. —¿Cómo estás enviando mensajes si detuviste el tiempo?— Preguntaste casi de manera instintiva, a lo que la contraria solamente sonrió un momento de manera apenada. Alzaste una ceja esperando una respuesta para cualquiera de las preguntas que acabas de realizar, pero la chica solamente apago la pantalla de su teléfono y lo guardó en su bolsillo.

—No detuve el tiempo, solo hice que las personas cercanas que pudieran ver este trato por debajo de la mesa perdieran el movimiento y la conciencia de manera momentánea, salvo por eso, todo en él mundo esta moviéndose— Dijo ella mientras rascaba su nuca levemente. Aquella chica, que anteriormente te había dado tanto temor y estrés, ahora se veía como lo que era: Una joven estudiante la cual, aparentemente, tiene demasiado tiempo libre. De cualquier manera, la respuesta que te había dado, incluso cuando era demasiado completa, no era la respuesta que estabas esperando en esos momentos. Era evidente el hecho de que no podrías confiar en una completa desconocida la cual aseguraba que podía hacer todas las cosas que ella prometía hacer. Nadie podría hacer que un villano deje de ser un villano. Era simplemente ridículo, pero, por alguna extraña razón, dentro de tu pecho se sentía como si él aceptar su propuesta fuese lo que te daría alivio. Fue como aquella vez que le hablaste a Dabi desde la isla I, tus sentidos de razón te decían que él no respondería y reaccionaria de una mala manera, pero dentro de tu pecho sentías todo lo contrario, y cuando finalmente pudieron hablar pudiste encontrar ese alivio y felicidad que buscabas. Tomaste una gran bocanada de aire para proceder a recargar tu cara en tus manos mientras bajabas la mirada. Estabas teniendo tantos pensamientos y analizando tantas cosas que simplemente no podias entenderte tu misma por el momento. Querías más de media hora para pensar al respecto, y debías de preguntarle a Dabi al respecto, ya que él también estaba involucrado en este trato. Debías de hacer tantas cosas que simplemente no podías entender como la chica se encontraba tan tranquila y pacífica frente a ti.

¿Qué? -- Dabi × tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora