Mentas Y Chocolates | Emiliaco

🍂 Chapter Thirty Six🍂

Joaco: 6 meses

Joaquín

— Hola, princesa... — sentí una patadita y acaricie mi vientre ya muy abultado — No falta mucho para que estés con nosotros... Te estamos esperando con muchas ansias y ganas de conocerte, ya queremos ver tu carita-

— Saber que te gusta — pateó más fuerte al reconocer la voz de Emilio, que entraba al cuarto vestido de traje — Jugar contigo... Hacer todo, todo, todo contigo

Sonreí

Emilio se acercó, dejó un beso en mi vientre y lo acarició

— Nos veremos pronto, mi niña...

Le sonreí

— Hola, amor — Jale su brazo y se rio — A la bebe ya le diste su beso, yo quiero el mio — Se rio mas fuerte

Me beso corto — Hola, precioso

— Como te fue?

— Al fin encontré un reemplazo para Leticia

— Ay que bueno, amor... — Me levante de la cama

— ¡Cuidado, Joaquín!

— Emilio, estoy embarazado, no inválido

— Pero tienes que andar con cuidado, mi amor...

Rodé los ojos — mejor ven, hoy no nos haz dado mimitos — estire mis brazos en su dirección con un puchero fingido

— Awww, cosita — se acercó y empezó a repartir besos por toda mi cara haciendome reír — Me cambio y te doy todos los mimitos que quieras

Me senté en la cama, que era un poco alta, balanceando mis pies y acariciando mi vientre, sintiendo las pataditas de mi niña y sus movimientos.

Cuando Emilio se cambió a una ropa más cómoda, se acercó a mi pancita. Dejó muchos besitos y me recostó en la cama, se recostó a mi lado, besando mi mejilla y mi cabeza.

Mi sonrisa era inmensa

Al fin alguien me amaba, alguien me amaba de verdad.

— Claro que te amo, precioso — Reí, olvidé que también logra leer mis pensamientos — Es el amor más profundo y real que hay — bajo su cabeza a mi cuello y beso mi marca — Mi precioso omega

Me acosté de lado, el me abrazo por detrás aún besando mi marca

— También te amo, alfa — Voltee a verlo y me dio un corto beso

Hundió su cara en mi cuello, aspirando mi aroma. Poco a poco nos quedamos dormidos

Netz dei xdxd

— Vamos? — asentí

— Al fin voy a salir de aquí! — el sonrió

— Solo para que cambies de aires eh, no es que me guste mucho sacarte a pasear en ese estado — gruñi y se rio — A ver, te ayudo — Me tomó de la mano y me ayudo a levantarme de la cama, ya me costaba un poco — Mi gordito hermoso — beso mi mejilla y reí

— No estoy gordo, solo hinchado — ahora el se rio

— A ver... — se acercó al closet y sacó una camisa suya — Pontela

— ¡Amor! ¿Como crees que me voy a poner esta para ir a tu oficina?

— ¿Te queda el traje? — Sonrió malicioso y rodé los ojos

— Damela — se rio

Empecé a vestirme, con un pantalón de maternidad, en este caso, paternidad que Emilio consiguió cuando noto que mis pantalones ya no me cerraban por mi pancita