🍂Chapter Thirty Three🍂

1.8K 186 33
                                    

WEEEEYYYY AMEEEE LA FOTOOOO

LXS DEJO ROBARMELAAAAA

ES QUE NO MAMEEEES

••••

Emilio

Globos... Listo

Mesa... Lista

Regalos... Listos

— Ya wey! Ya limpie casi todo el depa y la cama ya esta en una de las habitaciones vacías — dijo Renata

— Gracias pulgosa, te acercaste al nido?

— Ni madres, io respeto

— No, pus, gracias...

— Tu ya terminaste? — Moví mi manos de lado a lado en seña de Mas o Menos — Ora, porque? Que paso?

— Siento que no esta perfecto

— No mames, cabron. Ni Diego me ha hecho algo así... Sabes como me pidió ser su novia? Asi, casual, "Seamos novios" y ya!

Me reí — Pero poco a poco le fue pegando el amor, ahora hasta a mi me trata mejor

Se rio un mensaje sonó en su teléfono y lo sacó.

— Ahm... Wey, ya estas listo?

— Solo falta que se me quiten los nervios... Por?

— Vienen en cinco.

— ¡Puta madre yo!

— Tu?

— ¡Emiliano!

Se empezó a reír — No mames — suspiro — Buena suerte, yo voy con Diego.

Tomo las llaves y se fue, tenía cinco minutos para ponerme a echar las malas vibras

Joaquín

— Gracias por traerme Jos... — le sonreí

— No es nada, de ahora en adelante cada que salgamos, no vas a regresar solo eh, te voy a traer. No estoy preguntando, escuchaste? — me reí

Se mantuvo asi toda la tarde desde que le conté que Emilio y yo tendríamos un cachorrito, no me dejaba sentarme solo, e incluso el helado y el pastel que compramos me lo daba en la boca .

— Si escuché, y gracias por cuidarme...

— Oye... Eres como mi hermanito, se meten contigo, se meten conmigo. E incluso si Emilio te hace algo, no me daría miedo meterle unos putazos.

— Y eso que eres mas chaparrita que yo, para ser alfa y ser mayor que yo, estas mal mija... — me reí

— Oye, a mi me respetas eh — me reí más fuerte y ella me secundó — Bueno, bye — me dio un beso en la mejilla — Nos hablamos, saludos a Ren y a mi cuñado.

— Aún no es tu cuñado — La vi medio serio

— Acabas de decirlo "aún" asi que si — rodé los ojos — Ya, entrale! Voy a esperar a que lo hagas.

— Ya mamá! — se rio

Entre al edificio, hogar de mi alfa, que se convirtió también en mi hogar. Subí los 10 pisos, llegando al último que es donde vivo ahora.

Llevaba un poco de emoción, hace mucho que uso camisas holgadas y no me había dado cuenta que mi vientre ya se ve un poco abultado y quería decirle a mi alfa.

Al entrar al departamento, todas las luces estaban apagadas.

— ¿Amor? ¿Emi...? — Encendí las luces — Emilio... Donde estás? — No obtuve respuesta

Mentas Y Chocolates | EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora