Capítulo 6

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Diana y Amanda después de una charla un poco incómoda para la ya mencionada Cavendish, luego de un largo viaje por fin llegaron a su destino. La mansión Cavendish, Ahora solo necesitaban saber con exactitud donde se encontraba la cueva de los murciélagos platinados.

-Pensé que sabías donde se encontraban esas ratas con alas.

-Son murciélagos Amanda, y no, no sé con exactitud donde se encuentran. La única que sabe su paradero es mi tía Daryl. Tendremos que preguntarle.

-¿Tú tía? ¿Crees que ella sepa algo?

-Pues sí. -Afirmaba la rubia mientras se acercaba a la puerta de su mansión. -Solo tendremos que preguntarle y todo esto acabará. Recuerda que tenemos que llegar antes de las 8 a Luna Nova o sino Akko puede descubrirnos.

Luego de esa plática, la rubia procedió a tocar la puerta y en ese instante la sirvienta de la mansión Cavendish o más conocida por Diana como Anna. Les abría la puerta, y su semblante pasó a uno de sorpresa por la tan inesperada llegada de la joven heredera.

-Señorita Diana, buenas tardes, que sorpresa verla por aquí. Me alegro mucho de poder verla.

-Buenas tardes Anna. -Decía la rubia haciendo una reverencia por educación. -También me alegra mucho poder verte. Quería preguntarte si mi tía Daryl se encuentra, necesito saber algo importante.

-Claro que sí señorita Diana, ella se encuentra en su oficina puede subir tranquilamente. Por favor adelante, esta es su casa.

-Gracias Anna, Amanda, vamos.

-Sí,sí, lo que digas.

-Pensé que vendría con la señorita Kagari, señorita Diana.

En ese momento la rubia sintió como sus mejillas se ponían nuevamente rojas y pude ver como Amanda hacía una pequeña sonrisa de burla.

-La señorita Kagari se encuentra indispuesta en estos momentos. -Decía una Diana recomponiendo su postura. -Una amiga vino en su lugar. Te presento Anna, ella es Amanda O'Neill.

-Un gusto señorita O'Neill.

-Hola.

En ese momento Anna se disgusto por los modales de la pelinaranja pero no le tomó importancia. Solo seguiría con su cometido y ese es ayudar en lo que pueda a la heredera de los Cavendish.

-Bueno, Anna. Si me permites iré a ver a mi tía a su oficina. Por favor, te pido que te encargues de mi invitada hasta que vuelva.

 -Yo me haré cargo señorita Diana.

-Y tú Amanda, solo te pido que esperes. No hagas nada más, ¿Entendido?

-Sí bueno, solo apresúrate que ya quiero volver.

En ese momento la rubia se dirigía al despacho de su tía mientras que Anna y Amanda se quedaron en la sala de invitados.

-¿Gusta tomar algo? Señorita O'Neill.

-La verdad tengo mucha hambre. ¿Tienen comida?

-Aquí contamos con todo señorita O'Neill.

-Umm...

-¿Gusta que le traiga algo para que pueda degustar?

-Bueno, ya que insistes....

La rubia se encontraba fuera de la oficina de su tía, simplemente tuvo que dar unos 2 toques a la puerta para que su tía le de el pase de que puede ingresar. Luego de escuchar la afirmación la rubia procedió a entrar a la oficina de su dichosa tía.

Una Nueva EsperanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora