ETERNA SEDUCCIÓN [TERMINADA]

♡CAPITULO 14♡

- Lo hice porque Michael me lo pidió- contestó él.

Candelaria se tensó visiblemente, ella era muy importante en la vida de Ruggero, lo sabía pero nadie podría superar la amistad de Michael y Ruggero, esa amistad estaría por siempre encima de algo o alguien.

- Me pregunto que diría Mike si supiera que está pasando entre la modelo y tú-  dijo Candelaria intentando preocupar a Ruggero.

- Ruggero tardó un momento en contestar pero al al final dijo tranquilamente- El ya lo sabe.

-Pensé que odiaba ese tipo de relaciones en el trabajo- dijo Sorprendida.

-Y así es pero él me entiende, es mi amigo y sabe que es lo mejor para mí- recalcó esto último.

-¿Eso quiere decir que yo no se que es lo mejor para ti?- preguntó ella.

-Tu vas en contra de mis decisiones y eso no es bueno para mí- dijo él.

-Sólo me preocupo por ti- dijo con desdén- pero si tu quieres estar con esa mujer, yo no voy a impedírtelo, es tu decisión, aunque me parece muy estúpida si me lo preguntas.

- Ruggero sonrió ante la comprensividad de su amiga- Que bueno que no te lo pregunté.

La conversación siguió normal. Cuando Candelaria finalmente se despidió y se fue, Ruggero se dio cuenta que hacia más de una hora y media karol se había subido a su cuarto.

A pesar de saber que estaba dormida, decidió ir a su habitación. La encontró tendida en la cama, evidentemente estaba desnuda boca abajo, la curva de su espalda se dibujaba finamente y su cabello estaba regado por la almohada.

La fina tela de la sabana le cubría de la cadera para abajo y sus brazos estaban cruzados debajo de su cabeza.

Está dormida pensó Ruggero, y parece un ángel.

- Porque te gusta verme-Dijo Karol al tiempo que abría los ojos.

-Perdón, no quise despertarte.

- No lo hiciste, no estaba dormida, no podía dormir- dijo ella.

-¿Ocurre algo?- preguntó él.

Alguna vez alguien me dijo que el cuerpo humano se acostumbraba a las cosas  muy rápido- dijo pensativa.

-¿Quieres algo?¿Necesitas alguna cosa?- dijo él.

- Te estaba esperando a ti, me acostumbré a ti-

- Te acostumbraste a mí- dijo Ruggero incrédulo aunque no evitó que su voz sonara feliz.

-Supongo que me acostumbré a compartir la cama contigo, a tus brazos.

-Pero no estás en mi cuarto.

-No, no quería estar ahí si tenias la intención de llevar a Candelaria contigo.

La distancia que estaba entre ellos desapareció en un segundo. Ruggero la miro fijamente a los ojos y atrapó sus labios en un fervoroso beso. La aprisionó contra él sintiendo cada centímetro del delicado cuerpo femenino cómo el deseo crecía en su interior.

Karol no supo cómo había terminado debajo de Ruggero besándose apasionadamente que el pensamiento se le nublaba. Un gemido se escapó de su boca al sentir que los labios de Ruggero atraparon uno de sus pezones y con la mano acariciaban el otro.

¿En que momento había terminado desnuda con Ruggero encima de ella? Bueno en realidad no le importaba, sólo sabia que le encantaba estar así, cada caricia de Ruggero la hacia arder por dentro.

La lengua de Ruggero hacia maravillas en sus pechos, se arqueaba contra el para que pudiera disfrutar mejor de ellos, sin desatender a alguno de los dos, los besos derrochaban pasión.