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nueve;

—Baile de invierno, Gotham Academy le invita a ser parte de una noche de ensueño—Lee el volante.

El regreso a clases para Wynona resultaba algo casi imposible por el momento, con sus dedos facturados no podía ir a la escuela, y ellos comprendieron eso. La castaña había empezado a amar sus yesos, de hecho, ya le había puesto nombre a cada uno.

Aunque le molestaba no poder ir a la torre porque según Dick y Kory, ella debía estar recuperada al 100% . Pero eso no evitaba que su relación con los chicos se viese afectada, de hecho, hablaba con Raven y Gar todos los días. Ambos adolescentes le contaban todo, en especial Gar; quien le confesó que tenía un crush en Terra.

—Es patético—Murmura el pelinegro con los brazos cruzados.

Para la sorpresa de muchos -en especial de Dick- Damian visitaba a la castaña casi todos los días, la ayudaba a estudiar, le traía apuntes de las clases, ya que ambos estaban en el mismo grado y salón.

La relación entre ambos había mejorado, y por eso, Jason Todd le restregaba en la cara cada vez que podía a Dick, que él en un solo día había hecho lo que su hermano no había logrado. Cambiar al demonio.

—¿Damian Wayne no quiere vivir su noche de ensueño?—Pregunta la castaña con burla.

El pelinegro rueda sus ojos—¿Una noche llena de niñas caprichosas y niños estúpidos? Si, mi sueño hecho realidad—Responde con sarcasmo.

Wynona ríe y niega, había sido algo incómodo al principio para ambos. Habían pasado de 'enemigos' a amigos, y pensar que solo debió romperse cuatro dedos para que su relación cambiara.

—¿Tú irías?—Pregunta con falso desinterés. Wynona se encoge de hombros

—No lo sé. Dudo que alguien me invite— Afirma para si misma—Aunque no tengo problemas con ir sola, ¿Sabes cual es la probabilidad que la persona que me invite sea el amor de mi vida? Nula. Es un hecho factible, Damy.

El mencionada mira a otro lado para evitar sonreír, hace una semana la castaña había empezado a llamarlo de esa forma, le gustaba como sonaba cuando ella lo decía, pero no cuando sus hermanos lo hacían, lamentablemente Dick lo escuchó cuando hablaba con la castaña por videollamada, y desde entonces, cuando Dick y Jason lo decían para molestar, él solo quería asesinarlos.

—O tal vez tú y yo podamos ir juntos—propone Wynona, interrumpiendo a Damian, quien estaba por hablar—Ya sabes, ahora que somos amigos y todo eso, no sería nada incómodo—Wynona mira a su nuevo amigo y abre su boca—Espera...¿Alguien más te invitó?

—Lisa Collin—Responde en un encogimiento de hombros

—Oh...—Wynona trata de aplaudir y sonreír—¡Eso es genial! Quién diría que Damian Wayne tuviese pretendientes.

—Te sorprendería en realidad...le dije que lo pensaría—La adolescente asiente —¿Qué hay del castaño?—pregunta con interés —¿Albert?

—¿Albus? Bueno, creo que fue demasiado Wynona para él—Señala su cuerpo con gracia.

—¿De que hablas?

—La última vez que salí con él intentó besarme—informa sin importancia, a diferencia de Damian, quién pareció más interesado de lo normal—Pero lo golpeé, ¿Quién intenta besar a alguien cuando están en la mejor parte de la película? ¡Enserio! Casi me la pierdo.

Damian ríe por lo bajo—Al menos ya se que no tengo hacer—murmura

—¿Cómo?—Pregunta Wynona confundida, no había escuchado lo que su amigo había dicho.

—Entonces ¿pizza o sushi?—pregunta Damian cambiando el tema.

Si Wynona estaba confundida por no escuchar, él estaba aún más confundida por las palabras que habían salido de su boca.

•••

—¡Wynona!—Saluda la mujer con una sonrisa. La castaña se acerca a la mujer para abrazarla, en la mesa. Jason y Damian se observan.

El mayor traga saliva cuando la mujer les sonríe para tomar su orden, había tratado que esa pelirroja notara su existencia desde hace dos meses y la pequeña novia de su hermano la conocía.

—¿Quiénes son tus amigos?—Pregunta animadamente.

—Ja..Jason Peter Todd—Balbuce sin pensar, Damian suelta una carcajada.

—Disculpalo, a veces no conecta muy su cerebro—Se burla el menor—Soy Damian Wayne.

—Un gusto Damian y Ja..Jason—Suelta con gracia mientras enciende la tableta en su mano—¿Ya saben lo que quieren?

—Tú número—Dice Jason con una sonrisa—El número cinco—corrige

Wynona mira a Damian y este solo se encoge de brazos, sabía lo idiotizado que estaba su hermano por esa mesera.

—Creo que aún no nos decidimos—Ayuda Wynona con una sonrisa.

—Bien. Cuando estén listos, llámenme—Informa y mira al mayor—Y Jason, da una buena propina y negociaremos el número cinco—coquetea antes de irse para atender otra mesa.

La castaña hace una mueca de desagrado.

—Soy el rey—Se banaglorea

—Si. El rey de los idiotas—Suelta Wynona con asco, no se imaginaba a su prima y al vigilante juntos.