Una verdad Oculta

capitulo XLII

Estaban en la estación para abordar el tren que los llevaría a su misión de relax, era un simple, en un pueblo que tenía el toque pintoresco para una grabación de canciones y una que otra escena de película, su misión, proteger que todo salga bien de ciertas horas nada más.

- bien - hablo Sarada mirando a todos, a Menma fue fácil de decirle de la misión cuando envío un mensaje al comunicador último que la había dado - ya todos se conocen - todos asintieron - perfecto nos sentaremos donde gustemos para disfrutar todo, conste que todo esto lo hacemos para relajarnos nada más así que vamos - se metió al tren seguido de todos.

- Inojin - miro a su hermano que jugaba con un pequeño juguete que compro en el camino - dame eso - le estiró la mano.

- ni hablar ya mucho tengo en ir a otra misión y más con esos - entrecero los ojos para irse a sentar al lado de Mitsuki, apoyarse en su hombro, subiendo las piernas en el asiento - trajiste mis galletas - miro al peliceleste que asintió, Shinki se sentó frente a Inojin y Menma a la ventana para que ninguna mosca muerta se le pegará.

- Shinki - se acercó Sarada con una sonrisa, las chicas más los otros que estaban sentados en otros asientos miraban con atención el escenario que se formaría - me das tu asiento es que me gusta viajar más en esos.

- Shinki no se puede mover de ahí - se metió Inojin - está cansado por qué alguien no le dejo dormir - todos miraron a Mitsuki.

- por qué me miran a mí si yo no duermo con él - todos miraron a Inojin.

- fue accidental la patada que le di de dormidos - se encogió de hombros.

- por eso te tocaste la cadera - hablo Menma, Inojin río un poco y Shinki asintió.

- ¡Pero yo quiero sentarme ahí! - señaló.

- bien - se paró Menma para cargar a Shinki a todos se le callo la quijada - Inojin, Mitsuki - los llamados asintieron y se fueron a otro sitio dejando a la azabache sola.

- p-pero - mirando como los otros se acomodaron y el tren empezó a arrancar, no tuvo más que otra que sentarse sola - maldita sea - susurro.

Con los otros que se alejaron.

- gracias Kami-sama - dijeron todos menos el menor para dar un suspiro.

- me das mis galletas - le estiró la mano.

- que tan lejos está ese pueblo - hablo Shinki robando una galleta de su hermano.

- llegaremos a las 10 o 11 - dijo Menma mirando por la ventana.

- cinco a seis horas - suspiro cansado.

- quieres Menma - le alcanzó una galleta.

- gracias - recibió la galleta para comerla - "casera" - pensó.

- Shinki, juguemos algo.

- no tenías tu jueguito.

- lo guardo para después, haber juguemos a - pensando y sonrió en forma maquiavélica.

- ¡Menma noquealo! - dijeron los otros dos pero el rubio levanto el puño sonriendo.

- vamos a jugar verdad o reto - sonrió comiendo una galleta - y quién no quiera seguirá el viaje en la maletera - dijo serio y todos asintieron incluyendo a los que no estaban cerca pero los oían de distancia - por eso los quiero - sonrió para estar en su posición - bien en que empezamos - miro a todos - Menma verdad o reto.

- reto.

- besa tu mano.

- muerete.

- de ahí me retas eso.