Una verdad Oculta

Capitulo III

- ¡¡Ya no peleen!! - dijo en voz fuerte el pelinegro que miraba a las chicas pelearse.

- es su culpa Shikadai, casi me matan en la misión.

- no es verdad, solo te iban a dañar nada más y no iba ha hacer algo grave, además te metiste en su posición.

- pero de que hablas, ella no estaba haciendo nada yo te ayude deberías apoyarme.

- entiendo que era de Cho Cho.

- nada de eso, si va hacer así las cosas vamos a tener que hablar seriamente - una discusión se hizo mientras la maestra no sabía que hacer y un pelirubio solo veía como su amor platónico peleaba con la chica de la arena, ya estaban llegando a la aldea y eso era lo bueno.

- Inojin - llamo su compañera.

- ¿Que pasa?.

- a qué yo tengo la razón verdad, ella solo se metió en lo que hacia me vas a apoyar verdad.

- no lo haré - eso dejo a su compañera con el ceño fruncido - te demoraste en la misión y sin contar que no hiciste bien tu trabajo - eso dejo a todos sorprendidos y que lo voltearon a ver sorprendidos, sabían que el ojiazul era directo pero no tanto así, de echo no había dicho nada con su tono sarcástico ni nada.

- pero ¿A ti que te pasa? - dijo molesta.

- viste deberías apoyarme como lo hace tu amigo - susurro a su novio con una sonrisa arrogante.

- digo la verdad aunque tú no tienes toda la culpa, también está ella que se metió, si quería reforzar siquiera debió cordinar contigo en vez de arruinar casi todo - la maestra no sabía que hacer una tensión se estaba haciendo entre todos ellos y eso no era nada bueno.

- Inojin - susurro muy bajo el pelinegro mirando al rubio que solo caminaba como siempre.

- ya ya chicos, esas cosas a veces pasan así que no se preocupen tanto - con una sonrisa la mayor hablaba - además miren la aldea ya estamos llegando - señaló la puerta de la aldea estando feliz al saber que todo se calmaría al llegar y estar adentro de la aldea - Que les parece si vamos a comer ¿Que me dicen?.

- que no valla Inojin seguro que seguirá criticando - la más gorda del equipo dijo molesta ante su compañero por lo de antes.

- la apoyo, solo nos bajara el autoestima - hablo Yodo con una sonrisa cómplice de la otra que volvían a entenderse.

- Oi - el pelinegro no estaba de acuerdo con eso.

- verdad, nosotras hacemos todo lo que podemos más que él - la de test oscura decía orgullosa.

- si si, de echo yo creo que merecemos una disculpa - la de la arena apoyaba a su compañera.

- chicas no creo que sea necesario - dijo la maestra nerviosa.

- así es, estoy contigo Yodo - entrando ya a la hoja - Inojin discúlpate con nosotras.

- no quiero - hablo simple.

- hazlo, somos unas señoritas y necesitamos respeto, ni te creas un buen ninja.

- no lo hago pero no me discúlpare - parando de caminar igual que los otros - y no quiero ir con ustedes a comer, de echo prefiero estar en mi casa tranquilo a qué con ustedes una glotona sin fondo y una teñida sin gracia, disfruten la comida que vallan a comer - dicho esto se fue de ahí saltando entre los techos sin que nadie pudiera reaccionar para detenerlo.

En otra parte de la aldea, un peliceleste caminaba algo desanimado hacia dónde se habían citado con su compañero, en todo el tiempo que no se habían visto estaba un tanto confundo y adolorido, pues no paso cosas bonitas en todo ese tiempo, llegó donde habían acordado y miro el cielo, el sol se estaba ocultando dejando ver el atardecer y las estrellas que ya se podían ver, estaba triste en cierta forma.