Tristeza

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Se quedó toda la parte final del día en su cuarto, recordaba todo lo que pasaba con su padre y se preguntaba el cómo se encontraría su madre ahora.

Daba vueltas en la cama, miraba el espejo y observaba con detenimiento cada moretón y herida en su rostro. Eso lo hacía sentirse más triste.

Se deshizo de su camisa, comenzó a tener calor. Caminó un poco por la habitación hasta que vio que su vista se volvía borrosa y su mente daba vueltas.

Armin : Mikasa....   Trató de llamarla pero cayó al suelo, inconsciente

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En la planta baja, ambos amigos hablaban con seriedad y preocupación.

Mikasa : Esto que pasó hoy no debió de ser así, ambos terminaron mal y tú...dijiste que ya no te pelearías  dijo y suspiró preocupada

Eren : ¡¡¿Y qué querías que hiciera?!! ¡Es mi amigo, Mikasa!  Levantó la voz

Mikasa : ¡Ya lo sé! ¡También es mi amigo y me preocupa, está solo, se siente solo y nosotros no ayudamos en nada!  Respondió de la misma manera

Eren : Como sea, ¡No iba a dejar que lo mataran a golpes!  Se levantó pero su mal estado lo hizo marearse.

La azabache lo volvió a sentar y entristeció su ceño. Acarició su rostro llamando su atención y pequeñas lágrimas se formaron en sus ojos.

Mikasa : Lo sé, pero...se supone que nos cambiamos aquí para tener esa tranquilidad y que dejaras las peleas....  se detuvo, mirando hacia abajo

Eren : Anda, dilo completo y como es, peleas callejeras y clandestinas  dijo de alguna forma molesta

De parte de la chica, solo recibió un abrazo y el silencio reinó por un breve momento.

Mikasa : Sólo quiero que vivamos en paz  mencionó

Un golpe se escuchó desde arriba, llamando su atención.

Mikasa se levantó y de inmediato fue a ver, encontrando al rubio en el piso e inconsciente.

Mikasa : ¡Armin!   Lo levantó un poco y lo colocó sobre su cama otra vez, su cuerpo estaba caliente y su frente estaba sumida en fiebre.

Bajó por una bolsa de hielo y volvió a subir, comenzando a cuidarlo de nueva cuenta. Lo que le ocurría era nuevo.

' --- : Te atraen con su canto '  Comenzó a recordar

' ---- : Te ahogan para luego devorarte '

' ---- : Engañan a los hombres con su increíble belleza '  imaginaba cada palabra que escuchaba.

' ---- : ...mitad humana, mitad pez '  escucho por última vez para después despertar de poco a poco, encontrándose en su cama.

Levantó un poco su cuerpo y una toalla mojada y fría cayó desde su cabeza. La tomó y recordó lo que le pasó. Cerró sus ojos y volvió a recostarse. Ya era otro día.

Se sentía cansado,  ya no tenía tanto calor ni frío, solo se sentía débil.

Mikasa : Hola, espero que tengas hambre   dijo entrando a la habitación con una pequeña mesa que contenía el desayuno

Armin sonrió y simplemente lo aceptó sin decir nada, comenzando a comer en silencio. Miraba repentinamente a la azabache, notando una mirada triste en sus ojos.

Armin : Eren y tú...¿Volvieron a discutir de lo mismo?  Preguntó al terminar de beber agua

Mikasa : Sí, ¿Crees que me preocupo demasiado?  Dijo triste

Armin : No lo creo, supongo que recordaste...ese día?

No había necesidad de preguntarlo, era así, completamente, sus ojos comenzaron a llorar con discreción.

Mikasa : No sabes...sentía que me moría con él y ayer...verlo así, sentí tan mal herido casi por todos lados  tomó las manos de su amigo y las presionó con un poco de fuerza.

Mikasa : Se me rompió el corazón al verlos llegar así, y luego te encontré tirado en el suelo  suspiró con pesar y limpió algunas lágrimas   - Quiero una vida tranquila, solo eso, alejarnos...los tres, del pasado y mantener siempre una sonrisa, es mi deseo desde que llegamos   volvió a mirar a su amigo

Armin : Lo entiendo, fue...mi culpa, debí haberme ido cuando Eren me lo dijo

Mikasa : Pero...si no hubiera sido por eso, no los hubieran arrestado  dijo

El chico la miró con sorpresa, recibiendo después una sonrisa sincera y rota y una caricia en la mejilla.

Mikasa : Mi hermano se encargará de ellos, no te preocupes  le sonrió

Ambos sonrieron y se abrazaron, realmente era un día pesado. 

Después de escuchar casi toda la conversación decidió que era mejor irse a su habitación que entrar. Se disculparía personalmente a su manera.

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