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Pasaron dos días más, ambos ya no estaban tan mal y el despertar fue tranquilo. Como todos los días, bajaban temprano aún en pijama y desayunaban entre los tres, como una familia sólo de hermanos.

Las heridas ya no eran tan notables, tal y como lo había dicho en 3 ó 4 días ya estaban bien. Comenzaron a sacar un tema equis de conversación mientras comían y reían. Como de costumbre.

Luego todos pusieron en orden el comedor, lo limpiaron, lavaron los trastes sucios y comieron uno que otro dulce.

El castaño prendió el televisor y automáticamente se escuchó la noticia de que habían arrestado a empresarios e ingenieros encargados de contaminar el agua salada.

Fue un alivio para los tres. Y más para ArminNo quiso seguir escuchando así que subió a su habitación y cambió su ropa. Iba a salir a caminar.

Armin : Ahora vengo  dijo bajando las escaleras

Mikasa : Con cuidado  dijo sin voltear

Salió, Eren se levantó del sofá y se recargó en la barra, mirando a Mikasa que se encontraba de espaldas.

Eren : Quiero hablar contigo   dijo llamando la atención de la chica que accedió. Supuso de qué se trataba.

* * * * * * * * *

Armin caminaba tranquilo por la orilla del mar, sintiendo y viendo las olas marinas cubriendo sus pies.

Veía el horizonte y recordaba el momento de hace cuatro días. Se entristecía y a la vez se alegraba. Gracias a eso el mar se salvó aunque sea una vez y los tipos fueron arrestados.

Caminó 2 kilómetros de la misma manera hasta que su celular sonó en su bolso. Se detuvo, soltó sus zapatos y sacó el objeto de su pantalón.

Se extrañó bastante al ver el nombre en la pantalla, el mejor amigo de su padre y por su puesto el suyo. Máx.

Dudó en contestar, pero al final decidió hacerlo.

Armin : Sí?

Máx : Hola Armin...eh...necesito que vengas para acá, rápido, es importante   dijo algo alterado

Armin : ¿De qué se trata?   Preguntó

Máx : Es...referente a tu padre, supongo que puedes venir   dijo antes de colgar

Armin : *suspiro*  De acuerdo, voy para allá   respondió y colgó

Sacudió y secó sus pies para después colocarse los zapatos e ir hacia el faro. Tardaría un poco pero debía ir. Él jamás lo haría ir hasta allá en vano y menos a referencia de su padre.

Llegó 10 minutos después y lo encontró al principio del camino hacia el faro y su casa.

Armin : ¿Qué?

Máx : Ven, y guarda silencio...no quiero que tal vez se...despierte   dijo confundiendo más al rubio

Armin : Ahhh, de acuerdo  encogió los hombros

El pelinegro lo abrazó por los hombros y lo llevó lentamente hasta donde se veía el muelle y el mar chocando contra las rocas.

Máx : Supongo que esto...comprueba la certeza de las historias de tu padre  dijo y señaló uno de los lados del puerto.

Buscó y encontró algo que impresionó su rostro.

Armin : Eso...eso es?   Preguntó sin dar crédito y sintiendo nostalgia por aquellas redacciones de historias fantásticas.

eso es?   Preguntó sin dar crédito y sintiendo nostalgia por aquellas redacciones de historias fantásticas

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Máx : Así es amigo mío, eso...es una...

Armin : Sirena?   Preguntó de nuevo sin seguir creyéndolo   - ¿Será un disfraz?  Volvió a preguntar

Máx : No lo creo, mira hasta donde tiene escamas y...mira entre sus dedos, son como membranas pequeñas  señaló

mira entre sus dedos, son como membranas pequeñas  señaló

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Armin : Parece como si tuviera...algo verde o...negro  se fijó

Recordó lo que pasó hace cuatro días, parecía el mismo líquido. Sin pensarlo más se acercó con prisa.

Máx : Armin...espera!   Dijo pero no logró detenerlo

Se acercó del todo y tocó aquella aleta tan grande, escamosa, confirmando que el liquido era exactamente el mismo y que la criatura era real. Vio su rostro, era muy hermosa pero...bajo sus ojos parecían haber largas lágrimas cristalizadas.

Eso no importó mucho, la cargó y la llevó junto a su amigo, estaba aún inconsciente.

Máx : ¡¿Qué haces?!  Preguntó exaltado

Armin : Nos vemos luego  dijo y se fue, dejando a su amigo completamente confundido

Tardó 20 minutos en llegar, abrió la puerta y se dirigió directamente a su habitación. Sus amigos o no estaban o estaban en sus habitaciones.

Entró a su baño y comenzó a llenar la tina de agua, colocando el cuerpo de la sirena dentro mientras sea lo que sea que tenía sobre ella, se le quitara.

Se sentía extraño, la criatura de la cual su padre le hablaba tanto...era real.

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