Naruto-one shots. (PEDIDOS ABIERTOS !!)

Deidara Kamiruzu

Título: No fue opcional

Especificaciones: Qué pasaría si Deidara dejara Akatsuki

-Oe, despierta, ¡Deidara!

Ashuri agitaba el cuerpo del rubio cuando este empezó a quejarse, desde que ambos dejaron Akatsuki, el chico tenía pesadillas constantes y aunque ella estaba muy nerviosa ante la idea de que sus antiguos compañeros los encontraran, tenía un poco más de paz que la de él.

-¡Deidara!- repitió al ver que el muchacho empezaba a murmurar su nombre con mucho temor.- ¡Despierta llorón!

El rubio se levantó de golpe chocando con la cabeza de la castaña.

-¡Maldición!- exclamaron ambos masajeando su frente.

-¿Estás bien?- preguntó él cuando el dolor se pasó.

-Sólo tengo un bulto en la cabeza, yo no gritaba entre sueños como desquiciada- soltó algo molesta.

-Lo lamento - murmuró bajando la mirada.- Por ambas cosas.

La castaña soltó un suspiro y se acercó un poco más a él.

-¿Qué fue está vez?- preguntó mirándolo preocupada.

-No tiene importancia.

-Llevas casi un mes con esos sueños, no puedes decirme que no es nada.

Deidara la miró un minuto, esbozó una sonrisa y se recostó en la cama de nuevo dándole la espalda.

-Hay que dormir otro poco, mañana tenemos mucho por delante.

De mala gana la chica se acomodó en el lado contrario sin mirar al rubio.

-No vuelvas a gritar o juro que te patearé- soltó escuchando la risita del otro desde el lado opuesto de la cama.

Tal vez ambos eran de mal carácter y algo agresivos, pero Ashuri no podía negar que estaba enamorada de aquel chico y le preocupaba lo que estaba ocurriendole.

Esa noche se le hizo imposible no soñar con el pasado.

Flashback:

-¡Ya llegamos!

La chica castaña entró a la guarida de los Akatsuki con Tobi aferrado a su brazo. Ambos saltaban divertidos , jugando, la misión había salido muy bien.

-Pueden no hacer tanto ruido- pidió un azabache al fondo del lugar con un libro en la mano.

-Agh que aburrido Itachi, igual que siempre- se quejó la muchacha adentrándose al lugar.

-Leer es otra manera de mantener tu mente concentrada y en paz, pero contigo a un lado es casi imposible- se quejó el Uchiha.

-¿Han visto a Deidara?- preguntó ignorando el último comentario.

-¿En serio no escuchó nada o se hizo la tonta?- comentó Hidan que estaba sentado al lado de Itachi.

-Sí eso te va a alejar de aquí- murmuró el chico.- Está en su habitación.

-¡Gracias!- corrió por el pasillo.- ¡Por cierto, el amigo del protagonista es el traidor al final!