-¡Quiero unas papitas!
-¡No es sano!- estamos en el área de comida peleando por una bolsa de papitas que quiero comprar, pero Damien me sigue insistiendo que eso no es sano.
-¡Pero es papa! ¡Es sano!- sigo jalando la bolsa de papitas y el por el otro lado, parecemos unos niños pequeños.
-¡No es sano! ¡Tiene mucha grasa!- al final me rindo soltando la bolsa de papitas y bajando la cabeza, triste.
-Esto de hacer dieta es un asco- me cruzo de brazos, Damien por mientras está colocando la bolsa en su sitio.
-Lo hago por tu bien.
Giro los ojos poniéndolos en blanco y empujo el carrito, Damien ha evitado comprar muchas cosas ricas, como en vez de helado, muchas frutas o quería comprar una caja de bombones y dijo mejor que compremos verduras para preparar una buena ensalada.
Estamos yendo a la zona de los congelados para comprar carne, Damien quiere que almorcemos algo muy sano, esto es una tortura.
Llegamos al área de congelados y estoy buscando la carne más barata, no soy mucho de comprar carnes ya que cuestan más de mi promedio.
-¿Qué buscas?- cuestiona a mi lado con una sonrisa al darse cuenta que me he quedado mirando las carnes.
-Estoy buscando la carne más barata, aquí la mayoría son muy caras- me incorporo para verlo y cruzarme de brazos- Pero el señor Damien quiere comer carne hoy día.
Eleva las manos en forma de derrota- Tu quieres empezar tu vida fitness, no es mi culpa, pero si quieres podemos comprar pollo.
Lo fulmino con la mirada y cambio de dirección- Bien, será pollo.
Llegamos donde están los pollos ya descuartizados y empacados para que no llore por pena, detrás hay una chica que parece tener unos años más que yo.
-Hola- le sonríe a Damien, sus ojos se iluminan y Damien le devuelve la sonrisa- ¿Qué es lo que buscan?
Damien me mira esperando a que hable- Queremos dos pechugas y dos piernas por favor- la chica asiente pero sus ojos no se despegan de Damien, aunque él solo me está mirando.
-Debes estar acostumbrado a esto- digo a lo bajo.
-¿De qué hablas?- se cruza de brazos con esa hermosa sonrisa que tiene.
-A que toda la atención esté puesta en ti, ya vamos casi unas...- cuento en mi mente- Diez chicas por lo menos que se acercan a preguntarnos algo, o no mentira, solo para hablarte- la chica llega con nuestro pollo ya listo y se lo entrega a Damien cuando yo inclusive estoy esperando con las manos extendidas.
-Muchas gracias- dice Damien con una sonrisa y lo coloca en el carrito.
-¿Ves a lo que te digo? Seguro te sientes bien a que todas las miradas estén en ti.
-¿Estas celosa Vera?- cuestiona y aparto la mirada viendo el camino, siento mis mejillas calentarse lentamente.
-¿Yo? ¿Celosa? ¿Por qué?- me rio nerviosa.
-Sí, no tendrías porqué tomarle importancia- me mira y siento que me voy a desmayar, pero no, debo ser firme, tengo novio y no puedo sentir celos por otro hombre.
-Estás loco, no te sientas tan especial- giramos hacia un pasillo donde hay comida de mascotas, agarro una lata de atún para Chucho- Solo es curiosidad saber cómo te sientes cuando tienes tantas chicas babeando por ti.
-En realidad no me importa, no las conozco, a mi me importaría más como me miran las personas que conozco, porque así sabré si su mirada muestra que les caigo bien o no, y tú...- lo miro- Se nota que te caigo bien.
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Expulsado del Cielo - TERMINADA
Novela JuvenilNo se acepta copia. Damien un ángel muy atractivo es expulsado del cielo por romper algunas leyes y no hacer bien el trabajo, pero tiene la oportunidad de volver si logra ayudar a una persona que necesite un milagro, ahí se encuentra con Vera, una...