Comencé a abrir mis ojos, pero instintivamente comencé a toser, me senté y me di cuenta de que estaba en una cama, no sabía donde, no entendía el porqué, luego todo llegó a mi mente, Davina, Damon, Elena... Mi corazón se estrujó. Miré la habitación mejor, era la de Marcel, miré a mi lado y en un sofá estaba Stefan, dormido, sonreí. Poco a poco el empezó a abrir sus ojos, al verme de inmediato se sentó a mi lado, me miró a los ojos y me abrazo.
- Tu eras, sierto? -Dije.
- De que?
- Tu me salvaste. -Sonreí y el asintió.
- En el momento en el que Katherine me pidió nayuda para sacarte de ahí no dude ni un momento. -Acarició mi mejilla.
- Gracias, tu eres único. -Le sonreí.- Pero necesito estar sola, quiero pensar.
- No te preocupes, cualquier cosa, estaré a fuera. -Me guiño un ojo y se fue.
Mire a la ventana, Stefan ya no estaba, un nudo se formó en mi garganta, ahoge un sollozo, tape mi boca. Esa imagen, recuerdo venía a mi mente, a el con ella en sus brazos, salvándola, y dejándome ahí, sola, sin siquiera prestar atención a mis gritos, nada. Mis lágrimas salieron igual, caí rendida al piso, llorando, lo necesitaba, me sentía tan mal, tan destrozada, patética, inutil, tonta. Me paré y me tiré a la cama, me tapé completamente llorando aún, sin dejar de recordar
*Recuerdo*
Desperté y vi a un par de ojos azules mirándome.
- Se que soy sexy, pero si sigues mirándome así te golpearé. -Dije girandome, dándole la espalda.
- Que romántica.
Comenzó a hacerme cosquillas por lo que yo reía.
- No!! Damon para!! -Grité riendo.
A velocidad vampírica me senté en su torso desnudo y reí, me acerque a sus labios y los bese dulcemente, luego me acosté a su lado y me acomode a el, el paso su brazo por mi cuerpo abrazandome.
- Extrañaba estar así contigo, te extrañaba.
*Fin del recuerdo*
Di un gran sollozo, que se escuchó como un grito, y así fue, mi mente me bombardeo con imágenes. Me tapé completamente, hasta la cabeza llorando, siento una mano que comienza a sacar la tapa de encima de mi, hasta dejar ver su cara. Stefan me miraba con tristeza, yo seguía llorando igual, mientras que ahora el acariciaba mi mejilla limpiando mis lágrimas.
- ¿Por qué lo hizo? -Dije llorando, entonces me lancé a sus brazos, llorando aún más.
- El está confundido.
- Me dejó... Muriendo. -Dije.- Ni siquiera se inmuto, me dejó en medio del fuego, yo grité y no una vez. -Dije, en un sollozo que fue fuerte, casi tanto como un grito.
El lo único que hizo fue abrazarme aún más fuerte en modo de consuelo, pero por más que el se esforzara aun así me sentía vacía, me sentía vacía al punto en el que ya nada me interesaba, pero Stefan era distinto, el era lo único que me ataba a no apagar mi humanidad, el era lo único vivo que estaba a mi lado, el era el único que sabía que no se iría, pero eso no quita el echo de lo vacía que me sentía. Aunque si, Stefan me da vida.
(...)
Desperté, a mi lado estaba Stefan, yo abrazado a su abdomen, me paré rápido, fui al espejo que ahí estaba, mis ojos estaban rojos, tenía ojeras, mi cabello despeinado, pero aun así no me importó. No me acuerdo como fue que me dormí. Comencé a caminar a la salida, cuando siento a una mano jalar de mi.
- Haber señorita, tu no vas a ningún lado sin mi. -Sonrió.
- ¿Tienes miedo a que haga algo malo? -Dije y por primera vez sonreí de verdad.
- Conociéndote, eres muy vengativa. -Dijo.
- Por favor, si yo soy un amor, no puedo ni matar a una mosca. -Hablé con voz inocente.
Salimos de ahí, fuimos a un parque, caminando, cuando siento su mano entrelazar con la mía, lo que me hizo sentir extrtaño, me hacía recordar a Damon, por lo que solté su mano.
- ¿Que pasa? -Me dijo.
- Mira, todo esto, estos paseos, se que lo haces solo porque no quieres que haga algo malo, o para que no apague mi humanidad, no finjas que te importo. -Me alejé de el, pero el tomo mi rostro entre sus manos.
- Tu me importas más que nada en el mundo y claro que no quiero que apagues tu humanidad, quiero que estés bien, quiero que salgas a delante, no quiero que sufras más por mi hermano. -Me miraba directo a mis ojos, me abrazó.
Volvíamos a casa de Marcel, al entrar se escucharon ruidos desde arriba, con Stefan subimos a velocidad vampírica, al llegar no nos encontramos con una agradable sorpresa, o tal vez si. Damon colgado, con una cadena en cada mano, medio inconsciente, pero aun así pudo verme. Su torso desnudo, aunque completamente ensangrentado, su rostro igual, mi padre estaba ahí, con sus manos lo bastante ensangrentadas.
- ¿¡Que mierda pasa acá!? -Dije firme.
Mi padre al verme se alarmó.
- Hija... -Lo interrumpi.
- No. Miralo. -Con magia levante la cara de Damon.- ¿Crees que el lo vale? ¿Verdaderamente piensas que vale tus energías? Si, es sierto, me dejó morir en ese incendio, pero ya fue, estoy viva, y eso es gracias a Stefan, agradescanle a el, no gastes tus energías en un idiota. Aunque esto. -Tomé una estaca.- Si se lo merece.
La enterré justo rozando su corazón, incluso, lo alcancé a rozar.- Ahora si muere no me interesa, pero saquenlo de acá, o Stefan llevatelo, no quiero asquerosidades en este piso. -Dije con desagrado, mi padre me miró perplejo.- Necesito estar sola, saldré y por favor no mandes a nadie a seguirme papa, sólo caminaré.
Narrador externo.
Hope salió de ahí, se adentró en el bosque, caminó y caminó, no sabia donde iba, solo caminaba. Algo le pasaba, algo había cambiado en ella, era como si ya no sintiera, pero sabía que tenía humanidad, lo sabía, pero algo dentro de ella no la dejaba sentir, algo dentro de ella la ahogaba, algo estaba eliminando mi humanidad. Calló al piso, cerró sus ojos, se ahogaba con sentimientos, no sabia que le pasaba, su humanidad, se iba extinguiendo involuntariamente, no quería, pero esto era peor, no solo su humanidad se iba, sino que todo lo bueno de ella salió de su cuerpo, dejando lugar a lo malo, abrió los ojos y todo lo que había ahí ya no era luz, no era ella misma, todo lo que había dentro de ella era oscuridad, tanta oscuridad era la que había, que hasta en sus ojos se veía reflejado lo oscuro.
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Wildest Dreams (Hope Miakelson ||) ~EDITANDO~
FanfictionNuevos amores aparecerán, viejos amores regresaran, la muerte la perseguirá, la vida la atrapara.