Cuarentena - Ben Hardy

Epilogo

            Último día de cuarentena

— ¡Ya casi seremos libres! — Ben gritaba por toda la casa feliz

Cuando despertó esta mañana y se dio cuenta que hoy es el último día de encierro no pudo estar más feliz, tres meses encerrados sin hacer nada cansa a todos.

— Ya sé que es el último día, amor pero ya cállate, molestarás a los vecinos — hablé

— Si no se molestan con tu gritos todas las noches, no se molestarán con esto — me abrazo por detrás y le pegue levemente en la mano mientras reía

— ¡Ben! — reí

— ¿quieres ver una película? Último maratón de películas cómicas

— Está bien — acepte y nos acurrucamos mejor en la cama prendiendo la tv.

Pasamos todo el día viendo películas graciosas, hasta que llegó la hora de la cena.

— ¿que quieres cenar? — pregunte besando el cuello de mi novio

— A ti — jadeó tirando su cabeza hacia atrás dejando más espacio para que mis besos ataquen su piel.

— Más tarde podrás comerme pero ahora tengo hambre de comida — me separé con una sonrisa traviesa

— Eres una maldita — bromeo mirando su bulto elevado en su ropa interior, ambos estamos en ropa interior.

— ¿Quieres pizza? — pase las puntas de mis dedos por su pierna subiendo lentamente.

— Ajá — asintió mirándome excitado

— Okey — me separé de golpe, camine hasta la cocina escuchando a Ben maldecir.

Comencé a cocinar todo colocando un poco de música. A los minutos Ben se unió y comenzamos a bailar por toda la cocina. Si alguien nos ve por la ventana, lo cual espero que no, nos vería a ambos bailar raro con solamente ropa interior.

Termine de hacer las pizzas y comimos entre charlas y recuerdos de nuestra infancia.

— Estuvo riquísimo — Ben acaricio su estómago.

— Gracias — sonreí y deje todo lo que usamos en el lavaplatos.

Camine hasta detrás de él y pase mis manos por sus hombros, baje mi cabeza hasta su cuello regando besos por toda su piel.
Baje mis manos por su pecho rozando mis uñas. Subí mis labios hasta su oído donde mordí levemente su lóbulo.

— Mmm amor — gimió

Camine hasta quedar a su lado, pase una pierna encima de él quedando sentada en sus piernas. Él pasó sus manos por mi cuerpo llegando a mi trasero.

— Mmm — murmuré al sentir sus manos apretar mis nalgas.

Seguí repartiendo besos por su cuello.

— Vamos a la habitación — me levanto en sus brazos y fuimos a la habitación.

Día siguiente; Primer día luego de cuarentena

— Hoy iremos al parque, al cine y luego a comer algún restaurante y y — Ben hablaba emocionado

— Amor, aunque ya podemos salir aún así hay que tener precauciones y no estar rodeados de muchas personas, ademas no creo que los cines hayan abierto — deje delante de él un plato con panqueques y miel.

— Entonces podríamos ir a caminar por el parque y luego comer algo en algún local que esté con pocas personas — hizo un puchero

— Está bien — asentí con una sonrisa

Hoy es el primer día que podremos salir luego de estar meses encerrados. Ben quiere visitar todo pero no se puede.

Una hora después nos duchamos y salimos a caminar por el parque, ambos llevábamos nuestras mascarillas en las manos. Aunque ya no es tan necesaria llevarlas siempre hay que tenerlas cerca por si acaso.

— ¿cuando crees que dejen viajar para Europa? — me preguntó balanceando nuestras entrelazadas manos.

— No lo sé, creo que ya está permitido pero no a todos los países solo a algunos — contesté mirando a lo lejos un grupo de niñas señalarnos y sacarnos fotos con sus teléfonos

— Podríamos ir a Inglaterra, mamá me dijo que ellos ya están libre del virus y ahí podrías grabar tus canciones para el álbum — me abrazo

— Si, puede ser, tendré que hablar con John, ¿tú cuando comienzas a grabar?

— Creo que en un par de meses cuando se tranquilice un poco más, ya sabes que la película que tenemos que grabar es en varios países del mundo — rozo su nariz en mi mejilla

Estuvimos sentados en el pasto una hora y media. Se nos acercaron un par de fans, nos sacamos fotos manteniendo la distancia de salud.

Luego fuimos a comer a un mini buffet familiar que no estaba tan lleno, charlamos entre risas un poco más y luego nos fuimos a casa.

Ahora estoy en la cocina preparando un poco de té para ambos mientras Ben está en la como con la computadora.

Camine hasta la habitación con las dos tazas en mis manos.

— Amor, buenas noticias ¡NOS VAMOS A LONDRES! — gritó emocionado

       Fin.