Vacaciones; Wosanicru

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Valentín.

Realmente no quería que se vaya, estaba disfrutando mucho de hablar con él y conocerlo como quería hace bastante tiempo.

- ¿Tenes sueño?- Pregunté.

- ¿Vos?- Consulto sin responder.

- No, por algo te estoy preguntando, si querés seguimos charlando-. Respondí de manera obvia.

- Entonces me quedo en rato más- Sonrió y volvió a acostarse a mí lado.

- No me acuerdo en que quedamos- Admití.

- Yo tampoco así que hablemos de otra cosa-. Propuso y asentí. - ¿Tenés novia o novio?-.

- ¿A qué se debe esa pregunta?-. Pregunté mirándolo.

- Que se yo, estaba tratando de sacar un tema- Contesto molesto.

- No te enojes tarado-

- No me enoje, papá, solo me caes mal-.

- Si, si, lo que digas y no estoy con nadie-. Respondí la pregunta inicial. -¿Vos?-

- Tampoco, re solo igual no tengo ganas de estar con nadie- Aclaro.

- Tengo hambre- Dije después de unos minutos de silencio. Nos quedamos un rato callados disfrutando la compañía del otro.

- Comiste hace un rato, Valentín- Recordó riéndose.

- No me vas a decir que no te clavarias un chambuche de milanesa-. Me senté en la cama y lo mire expectante.

- ¿Vamos?- Pregunto emocionado.

- No se pregunta eso-

Agarré su mano ayudándolo a bajarse de la cama y corrimos  hasta llegae a la cocina. Cuando llegamos lo solté para que agarré al pan del mueble mientras yo sacaba las milanesas de la heladera.

- Hay tomate y lechuga, ¿Querés?- Dije con el tupper y la mayonesa en la mano.

- Si, mándale- Respondió mirándome.

- Dale Agustín, métete al mueble y saca el pan- Lo apure mientras iba a sacar el resto de cosas que necesitábamos. - Estoy seguro que en unos meses vas a estar viviendo acá así que saca las cosas con confianza-.

- ¿No te molestaría que yo viva acá?- Pregunto dubitativo.

- Ni ahí, estaría piola ¿O no?- La idea que Agustín y Flor vivan con nosotros me parece genial. A ella la quiero mucho y con Agustín nos llevamos re bien hasta ahora.

- No sé qué tan bueno sería, quiero decir, voy a tener que aguantarte las 24 horas del día- Dijo dejando el pan sobre la mesada.

- Yo soy re copado Agus, solo tenés que conocerme-.

- Mejor cállate y mostrarme como preparas ese sanguche, mira que viví en Tucumán y allá se hacen los mejores- Me desafío. - De esto depende el futuro de nuestra relación-.

- No se vale, son terribles los sanguches de allá- Dije con un pucherito.

- Yo te enseño- Hablo mientras yo me ponía mayonesa al pan. - Para un poco, tanta mayonesa le ibas a poner, hijo de puta-.

- Prepararlo vos- Dije entregándole las cosas con un pucherito en mis labios.

- Sos re tierno, Valen- Se acercó y dejó en beso en mí mejilla antes de preparar dos chambuchitos.

- Muchas gracias, enano- Sonreí y tome el que me estaba estirando.

- ¿Querés gaseosa o jugó?- Consulte mientras me bajaba de la mesada.