¡Bienvenido/as al BNHAtober del 2020!
1 libro, 31 capítulos y 31 temas distintos.
Un OS diferente cada día ¿Puede haber algo mejor? No lo creo.
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Izuku no sabía quién era la persona que le dejaba una flor distinta frente a la puerta de su dormitorio cada día, para él era un gesto bastante bonito que le sacaba una sonrisa sin importar qué tan malo haya sido el día anterior. Aquel gesto se fue repitiendo desde hacía un mes y medio y por más que trató de averiguar quién era la persona, ninguno parecía ser; inclusive hubo días en los que se propuso averiguar quién era la persona pero nunca pudo saber ya que en las mañanas le tocaba los entrenamientos con All Might y no le gustaba faltar a ninguno de los entrenamientos, así que cuando regresaba a su habitación, la flor de ese día descansaba frente a su puerta envuelta en un bonito papel adhesivo verde, tal como su cabello y una pequeña nota que no le resolvía las dudas, si no que le creaba muchas más.
Ese mismo día en la mañana regresaba de haber ido a visitar a su madre, a la cual le había contado sobre los detalles con las flores y todas las pequeñas notas, las cuales por vergüenza, no le mostró a la mujer; Inko estaba feliz de ver a su hijo concentrado en averiguar quién era la persona detrás de esas notas, y aunque ella ya lo sabía, se hacía la desentendida con su hijo. Le gustaba que todavía hubieran pequeños detalles que enamoraran a su hijo, e Izuku realmente creía que lo que sentía no era amor, al menos no estaba seguro de sentir justamente eso.
Realmente esperaba encontrar tres flores ya que así sabría más o menos quién era la persona que le enviaba las flores, para su sorpresa, solo había una pero esta vez no llevaba solo la nota si no que llevaba un pequeño dulce que parecía fresco, le causaba intriga ya que los únicos en el edificio eran Kacchan, Kirishima, Todoroki, Momo y Uraraka; por descarte y porque en las notas adhesivas se refería como "él", las últimas dos no eran sospechosas, así que le quedaban tres personas, dos si sacaba al cenizo, no creía que su amigo de la infancia tuviera detalles tan bonitos con él luego de como lo trataba, aunque últimamente solo lo ignoraba y no le gritaba cuando veía lo torpe que podía ser. Decidió quedarse con las dos opciones que le quedaban, Kirishima y Todoroki, pero a estos les había preguntado una vez y se lo negaron, además de que no vio nada extraño en sus comportamientos cuando le respondieron. Izuku soltó un suspiro y entró a su habitación con la flor y demás en las manos, sin saber que alguien observaba casi cerca suyo.
Una vez dentro de la habitación, dejó su mochila sobre la cama y se acomodó frente a su escritorio para tomar con cuidado el papel adhesivo, esperando el típico poema que veía siempre con la flor, lo que leyó fue por demás sorprendente ya que aquella persona por fin daría a conocer su cara, la nota decía:
"Sé que has estado tratando de averiguar quien soy y no has dado con la respuesta, estoy dispuesto a dar la cara para que dejes de buscar, aunque temo por como puedas reaccionar una vez que me veas. Te he demostrado este último mes lo que significas para mi y en pocas palabras lo que siento por ti, pero ¿tú sientes lo mismo que yo?. Me preocupa no ser correspondido pero quien no arriesga, no gana y yo estoy dispuesto a arriesgarme para tener una respuesta a mis sentimientos. Tendrás el lugar y la hora en la siguiente nota."
