Extra 2

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Capítulo dedicado a: javi814 😉

Cap (2/3)

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Poco más de un año después....

Rodó sobre su estómago y hundió el rostro en la almohada gruñendo cuando la luz del sol golpeó sus ojos. Ugh, amaba a Stephan, pero no compartía su mania de dejar las cortinas descorridas los fines de semana. Y no era agradable que la luz matutina golpeara sus ojos sin piedad después de que se había dormido hasta tarde disfrutando por adelantado de su regalo de cumpleaños .

Sonrio de solo recordar lo bien que la paso con su novio la noche anterior. El dolorcito en sus caderas y la manera en que todos sus músculos protestaban con cada movimiento era un claro ejemplo de ello.

Había dos tipos de dolor que Raúl Danields disfrutaba y a los cuales les daba la bienvenida: el primero era el que le quedaba luego de una práctica realmente extenuante con el equipo. Le encantaba la manera en que sus músculos se tensaban con cada movimiento, eso le hacía saber que lo había dado todo en el campo. Y luego estaba ese otro tipo de dolor delicioso, ese que lo hacía cojear levemente después de una buena follada por parte de Stephan. Y la noche anterior había tenido mucho de eso.

De solo recordarlo un cosquilleo bajaba por su espalda y corría al resto de su cuerpo. De no se porque aun estaba exhausto, probablemente estaría duro para ese momento. Especialmente cuando recordaba la parte en donde se sentó a horcadas sobre el abogado y lo montó como si su vida dependiera de ello...sip, demasiado exhausto.

Escuchó el sonido de la puerta y pequeños pasos acercándose a su cama. Ni siquiera se movió, tranquilo al saber que su decisión de ducharse en la madrugada después de haber tenido todo ese montón de diversión, así como cambiar las sábanas antes de que tanto el como Stephan cayeran rendidos, fue lo mejor que pudieron haber echo teniendo en cuenta que había una niña en la casa; una a la que le gustaba colarse en la habitación de vez en cuando.

La cama se movió levemente cuando la niña gateó hasta acostarse a su lado.

—¿Aun estás durmiendo? — susurró.

—Más o menos— ella se rio y se tendió cual larga era sobre la espalda de Raúl — Feliz cumpleaños, Deni Du.

—Gracias enana— se removió para poder rodar y quedar sobre su espalda. Ella se levantó solo lo suficiente para dejarlo moverse antes de caer de nuevo sobre él. Su cabello estaba un poco alborotado y sus ojos aun lucían soñolientos— ¿Qué hora es?

—Las ocho — respondió ella. 

—¿Tu padre se fue a trabajar?

—Noup, está bajo— se Sé encogió de hombros. —Y también creo que se tomara el día libre para poder pasarlo contigo.

—Y contigo — le recordó darle un toquecito en la nariz.

—Pero es tu cumpleaños— susurró ella y Raúl arrugó un poco la frente. Lo que menos quería era hacer pensar a la niña que su presencia significaba que Stephan la dejaría de lado. Ella probablemente lo supiera, era muy racional. Pero seguía siendo una niña después de todo.

—Ya, pero no sería divertido si no estás con nosotros— no se le daba demasiado bien eso de ser cariñoso con los niños, pero Vanessa tampoco es que fuera exageradamente generosa con sus muestras de cariño. Así que ella lo perdonaría si era un poco torpe en eso. —Además si tu padre tendrá el día libre, debemos buscar algo divertido para hacer ¿no crees?

Una Lección De Amor (Suerte #7.7)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora