Dedicado a:
@TessNicemess
@08Milady02
La edificación se imponía majestuosa ante ellas. Era una elegante y moderna construcción de tres plantas. Gracias a que en gran parte de la fachada principal el material más utilizado era el vidrio, ya sea en los enormes ventanales laterales o la misma puerta de entrada; ambas podían apreciar el interior sin muchos problemas. El estilo del diseño interior era algo vintage, lo cual a Adora le agradó. El encofrado de madera y la simplicidad que este le brindaba a esa galería eran simplemente hermosos. Anteriormente la rubia no se había permitido observar con detenimiento aquel pequeño edificio, pero ahora que lo veía le parecía bastante atractivo.
Catra le dedicó un movimiento de cabeza, indicándole que era hora de colarse en el lugar y comenzar con el trabajo. A la rubia le pareció más segura la idea de entrar por el lateral; por una de las ventanas que daban a un poco alumbrado callejón a la izquierda. Subieron las escaleras de emergencia y llegaron hasta el segundo piso donde una de las ventanas, para suerte de ambas, estaba mal cerrada. La primera en poner un pie dentro fue Adora, quien se apresuró en recorrer el lugar con la mirada; buscando alguna señal de peligro. Catra se posicionó a su lado y con el medidor de ondas electromagnéticas, esta vez en sus manos, caminó en busca de algún indicio de algo sobrenatural. Cuando su mirada se elevó soltó un bufido molesto.
- ¿Por qué mierda todo el lugar está vacío? – Fueron las palabras de la rubia exactamente las mismas que pasaban por la mente de la morena.
- Hoy era la última noche de exposición, creo que por eso ya limpiaron todo el lugar – Se adentró un poco más. Ambas bajaron con sigilo hasta la primera planta, encontrando lo mismo que en la segunda: nada.
- ¿Y ahora qué haremos? – Las palabras de la de ojos cielo se vieron interrumpidas por el sonido de una puerta abriéndose. Catra se alarmó y jaló a la rubia hasta una de las esquinas, donde ambas se ocultaron detrás de una columna. El aroma que percibió su hábil nariz la hizo sonreír y con una seña a su compañera para que hiciera silencio, salió de su escondite sin hacer mucho ruido.
Adora elevó una ceja con duda mientras veía a la morena colocarse con sigilo cerca de la entrada y simular que acababa de llegar.
- ¿Qué rayos pretende? – Susurró para ella misma y sus dudas se aclararon cuando tuvo a aquella chica de la noche anterior en su campo de visión – Mierda –
- Hey Hayley – La sangre de Adora comenzó a hervir de rabia.
La mencionada levantó la mirada de los documentos en sus manos y luego de pestañear varias veces, solo sonrió y se acercó a la morena – Catra, no esperaba verte nuevamente, al menos no desde que hoy no asististe a la exposición.
- Sí, pensé que sería mejor venir cuando estuvieras menos ocupada – Se excusó y llevó una mano a su nuca mientras desviaba un poco la mirada - ¿Hice mal?
“¿Catra está nerviosa?”
- No, por supuesto que no – Adora odiaba admitirlo pero esa chica era demasiado hermosa – No planeaba hacer nada luego de que vender todas las obras, así que estoy libre toda la noche.
- Espera, ¿vendieron todo? – Catra preguntó por ella y por la rubia, la cual estaba igual de intrigada al oír aquella información.
- Sí, pensé que lo sabías. En la última noche se suele vender todo, al menos mi padre siempre lo hace. Suele tener clientes frecuentes que pagan exageradas cantidades de dinero por cuadros poco agraciados – Rodó los ojos con una media sonrisa haciendo a la morena reír por lo bajo.
- Bien, entonces ¿podemos irnos? – Extendió su mano y la más alta la tomó entrelazando sus dedos con los de la morena.
Adora contó hasta diez para evitar salir y armar una escena, debía concentrarse en el trabajo. Catra solo estaba distrayendo a la chica para que ella pudiera investigar sin obstáculos de por medio, era solo eso o eso esperaba. Se recriminó mentalmente por ser tan infantil en momentos como esos.