Capitulo 39 (alternativo 🔞)

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- Hola esposa - saludo en broma - como está la señora de Calle

- Bien, ahora tengo un apellido que vale un par de millones ¿Que más podría pedir?-

- No lo sé ¿Tal vez un par de besos míos? - pregunto

- Esos no necesito pedirlos - dijo para luego unir sus labios - Te amo

- Yo te amo más Poché, al fin puedo decir que eres mía -

- Siempre lo fui Calle, desde el momento que te conocí fui tuya -

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El vuelo a Maldivas había despegado, durmieron todo el camino y ahora se encontraban camino al hotel, la noche era presente en aquel paradisíaco lugar. Un yate las esperaba para llevarlas a su suite, Daniela hablaba con el capitán mientras Poché iba de su brazo cuál pareja enamorada, una vez arriba del yate permanecieron abrazadas todo el camino, la brisa fresca pegando en sus cuerpos, porque apresar de ser de noche la calidez del lugar seguia siendo abrazadora.

Poché quedó asombrada ante el lujo y grandeza del lugar, las aguas cristalinas rodeando las y un yate más pequeño de transporte estaba anclado al muelle. Amabas recorrieron el lugar con la mirada y quedaron fascinas, tomaron sus maletas y entraron encontrándose con una cama matrimonial con sabanas blancas adornada con pétalos de rosa y una botella de champagne y dos copas las esperaba lista para ser servidas.

- Esto es maravilloso - pronunció Poché

- Te mereces esto y más - contesto Daniela mientras le extendía una copa a su ahora esposa,

La peli azul la tomo y ambas brindaron por su matrimonio, una vez ya no había nada en ellas Daniela se acercó cautelosamente a Poché y la tomo delicadamente del rostro, la respiración de ambas se aceleraba y con un roce delicado entre sus labios la peli azul no dudo en unirlos completamente, aquel beso tranquilo y dulce tomo un rumbo pasional, la lujuria comenzó a hacerse notar y la temperatura de sus cuerpos subía, Calle bajo sus manos a la cintura de la peli azul y está las colocó en el cuello de su amada enredando sus dedos en su pelo castaño, las traviesas manos de Calle apretaron el trasero de Poché haciendo que está soltará un gemido casi inaudible, Calle bajo la cremallera del vestido de Poché el cual calló quedando en sus pies, Daniela admiro el esbelto cuerpo de su esposa que tenía un sensual conjunto de lencería blanca, Poché hizo lo mismo, despojo de aquel vestido a Daniela quedando igual con un conjunto de lencería beige, Poché enredo sus piernas alrededor de la cintura de Calle y está comenzó a caminar a la gran cama que las esperaba.

Recostó con suma delicadeza a la peli azul, cuidándola como si fuera de porcelana. Prontamente la castaña atacó el cuello de Poché quien descaradamente acariciaba el cuerpo de Daniela, hábilmente Poché se deshizo del sostén de Calle y está no se quedó atrás. Calle succionó una parte del cuello de su esposa y empezó a bajar hasta sus senos, tomo uno con la mano derecha y lo estimulaba mientras que con su boca atendía al otro, la peli azul no hacía más que retorcerse de placer bajo la castaña. Una vez termino con sus senos fue bajando mientras besaba el plano abdomen de su mujer, bajando turtuosamente las bragas de Poché, cuando llegó al Monte de Venus de Poché está arqueo levemente la espalda, la castaña se tomó su tiempo para hacer sufrir a Poché, quien solo soltaba inenténdibles monosílabos.

Calle bajo hasta su centro y beso dulcemente la feminidad de Poché, comenzó a lamer ferozmente toda la extención de esta y atrapó su clítoris, los gemidos de Poché se escuchaban por toda la habitación y no tenía intenciones de reprimirlos, Calle comenzó con lentas penetraciones con su lengua hasta que paro y volvió a los labios de la peli azul, con sus dedos seguía estimulando su centro y comenzaba a abrir lentamente sus húmedos pliegues.

La llegada de AntoniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora