Buenos días.
Se nota que te has divertido mucho en la fiesta. ¿No es así?
Estaba allí. Viéndote desde un rincón como todo un raro espeluznante, lo sé. Pero en mi defensa, bailas demasiado feo cómo para que yo me atreva a opacarte acercándome a acompañarte.
Eres el centro de la fiesta cuando te emborrachas, pero también eres un llorón cuando la eufórica del alcohol ya comienza a desvanecerse.
Normalmente, yo estaría bien con que buscaras el consuelo de alguno de tus amigos, son parte de tu vida, los acepto.
Pero no me gusta para nada la idea de que te vayas con el primer gilipollas de turno que se te cruce, solo por que "Se nota que tiene un buen armamento entre las piernas y tú puedas darlo vuelta como una medía". No me gusta.
Me repugna la idea de que seguramente hayas pasado la mayor parte de la noche del sabado y el domingo entero, follando con un desgraciado mal nacido sin nombre. O que esos cardenales que rodean tus muñecas y tu cuello, sean producto de ello.
No. Lo. Vuelvas. A. Hacer.
¿Te ha quedado claro?
Berlín.
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Querida Alma Gemela [Berlín x Palermo]
RomanceMartín comienza a recibir misteriosas cartas con aroma a colonia cara. Firmadas por un misterioso tipo denominado "Berlín". Teen! Berlermo.