Capítulo 16: La misión.

73 6 4
                                    

Mírame,

¿Cuál es la situación?

Más allá de tu mirada nerviosa,

Veo las paredes derrumbándose,

Y continuamente, el amanecer está llegando.

The Eve – EXO


—Quiero que hagas un ataque a la base de Exo y busques la manera en alejar las piedras malditas del Árbol de la vida.

Baëk seguía sin poder creer lo que había oído, él no podía hacer lo que SooMan le pedía porque eso significaría acabar con la vida en todo el planeta. Sin embargo, fingiendo que no sabía nada al respecto, asintió.

—Entendido, pero, ¿cómo lo haremos señor?

SooMan le observó y con una mirada suspicaz acompañada de una sonrisa llena de suficiencia le contestó.

—Utilizaremos a ChanYeol de Exo para entrar.

BaëkHyun no pudo odiar más al hombre porque no era posible y con todo el esfuerzo del mundo se contuvo de fruncir el ceño. Él no quería hacerlo.

—Comprendo.

—Quiero que organices a todos, atacaremos en dos semanas.

Baëk volvió a asentir en contra de sus deseos, él no quería organizar la destrucción de un planeta entero, más en lugar de demostrarlo, se inclinó poniendo su mano en su pecho como siempre lo hacía y salió de la oficina.

Afuera se encontraba Täo, lo observaba fijamente y él bufó.

—¿Qué?

Täo no dijo nada sólo siguió observándolo fijamente y Baëk decidió que ya había tenido demasiado por un día por lo que se encaminó en dirección a su habitación, ahí tenía un asunto por atender con ChanYeol.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Se encontraba recostado en la cama, al fin la razón había vuelto a él y ahora se encontraba pensando acerca de lo que había pasado unos minutos antes, se sentía avergonzado. Sus ojos estaban enrojecidos por las lágrimas y se odiaba por haber accedido a ir con Chën.

Chan jamás hubiera querido que BaëkHyun lo viera así, él se sentía tan culpable y molesto consigo mismo porque probablemente ahora el peliblanco se sentía asqueado de él y no lo culparía.

Se quedó ahí recostado hasta que un pensamiento cruzó su mente: ¿y si Baëk volvía pronto y le recalcaba lo asqueroso que era?

El pánico recorrió su ser y aún débil de piernas, el pelirosa se puso de nuevo el traje blanco que había tenido puesto antes, sacó las sábanas de la cama de Baëk, puso otras nuevas y limpias y se fue a su habitación a paso lento, pasando al lado de LüHan que había estado por tocar la puerta de la habitación del peliblanco. Ignoró su ligera mirada de sorpresa y al llegar a su propia habitación volvió a derrumbarse.

Ya no podría ver a Baëk a los ojos.

Ese día ya no salió en absoluto de su habitación ni abrió la puerta cuando Baëk fue a verlo, al día siguiente, apenas y se movió de su cama, salió de ella porque tenía que hacerlo para su entrenamiento, eso no impidió que tuviera miedo al ver a las señoritas de blanco acercarse con la sustancia azul para el momento en que tendría que pelear sin poderes.

No pudo evitar que le pusieran la sustancia y cuando se la pusieron él se quedó congelado en su lugar, temblando levemente y con los ojos cerrados fuertemente. LüHan tuvo que ir por él y él no le permitió que lo tocase.

Proyecto: EXORDIANSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora