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La mujer salía quedandose en silencio ante los dos muchachos pero con más atención al que tenía un asemejo a su lindo hijito que le arrebataron de sus manos

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La mujer salía quedandose en silencio ante los dos muchachos pero con más atención al que tenía un asemejo a su lindo hijito que le arrebataron de sus manos.

-¿Les puedo ayudar en algo?-pregunta la castaña secando sus delgadas manos en la tela que tenía en ellas

-¿Usted es la señora Pimentel?-cuestiona el delgado joven detectando los diminutos ademanes que realizaba su mejor amigo

-Claro, ¿pasó algo con mi esposo o encontraron a...?-se detiene en un momento sonriendo de nuevo-perdón, ¿pasó algo con mi esposo?

El mancebo de altura encumbrada se mantiene en silencio sin soltar una sola palabra.

-Joven Erick, esto es ridículo, vamonos-el nombrado abre la boca asombrado por las palabras dichas para después ser arrastrado lejos

-¡No!-habla la mujer bajita acercandose a los chicos-no entiendo lo ridículo, ¿acaso es una broma?, es de muy mal gusto esto, voy a llamar al policía de la calle

-Señor Kertly-responde murmurando recordando el nombre del policía-tranquila queríamos preguntar sobre el señor Pimentel, pero ya podemos saber que está en la misma casa

-Joel-dice el heredero pero es negado-por favor, siempre hablas de ellos, quiero conocerlos también-suplica el ojiverde bajito para que no escuche la señora que permanecía con preocupación

-Es difícil...pensé que sería facil verla a la cara pero no puedo, perdón, joven Erick-los delgados dedos del menor acarician la mejilla del temeroso sirviente tranquilizandolo

-Tú pudes, Joey, se que es difícil todo esto, pero solo quiero decirte algo y es que siempre te voy apoyar, aunque estemos en lo peor de nuestros momentos o tal vez los mejores-sonríe despacio volteando a encarar a la mujer-disculpe, solo queriamos averiguar la vivienda del señor Pimentel, pero está todo solucionado

El de pelo ondulado se mantenía frustrado apretando sus ojos al escuchar los pasos de su amo alejarse, tomando un largo bocado de aire.

-Mamá-su voz temblorosa se hace presente tragando en seco mientras sentía sus ojos aguarse molestando el gran nudo en su garganta creada por el emotivo momento

El delgado chico da una vuelta entre abriendo sus labios asombrado por la derrepente acción quedandose undido en su mundo sin reaccionar.

-¿Mamá?-la mujer dudosa crea una sonrisa entre sus labios borrandola en cuestión de minutos-¿Joel?...eres tú-pregunta soltando un quejido lastimero asombrada sin poder mantener su boca cerrada por la impresión

-Sí, soy Joel-habla seguro el muchacho siendo envuelto por los delgados brazos de su madre que lamentaba apenada

-Dijieron que te mataron, que ya no te encontraría...te estado buscando, Joel, esos hombres me amenazaron-tiembla por el susto acurrucandose en el pecho de su hijo queriendo que nunca lo alejen de sus brazos

El momento era de lo más conmovedores, el reencuentro de la familia Pimentel sacaba lágrimas, pero dentro del corazón del sirviente crecía un sentimiento apoderador de sus emociones.

-¿Erick, verdad?-pregunta la castaña regalando una sincera sonrisa invitandole algo de beber a la persona que agradecía con la vida-muchas gracias

El de ojos verdosos dudaba en lamentarse luego de darse cuenta que sería una lastimosa despedida con su admirable amigo pero es dejado en silencio cuando llegó la despedida.

La veloz respuesta de aquel rizado hace paralizarlo aclarando que regresaría con él a la mansión de la familia millonaria con el apellido Colón.

-No tienes que ir, te puedes quedar acá Joel-los dientes del joven Erick se undiando en sus delgados labios nervioso con su corazón partiendose por una posible despedida

Y era claro que no quería dejarlo, tan solo quería tener cerca a la persona que lo entendía mucho más que su propia familia.

-Me voy contigo, está claro que me traiste a mi familia pero esto no cambia nada, yo voy a seguir siendo el que lo sirva-la sonrisa paciente del millonario es presente negando con la cabeza

-Es una orden, Joel-el nombrado niega al igual imponiendo aquella orden-yo me voy a casar en 5 o 4 años, mi vida está tan destinada al antojo de mis padres pero yo no quiero que te pase a tí

-Lamento decirle que fuí vendido y según la reglas principales es negado su orden, esto no es una despedida, Joven Erick-los largos dedos del empleado agarran la tela de su camisa de diseño jalandolo al carro con su rostro serio-vamos a la mansión de los Colón, sus padres lo matarían si ven el comportamiento que tiene ahora

El carro lujoso avanza entre los grandes terrenos invadidos por gente adinerada llegando a las puertas principales de la familia Colón.

-¡Erick!-el grito del señor Colón es presente con notoria molestia cual estaba acompañado de su asistente-Niño, Zabdiel te espera desde horas, se me cae la cara de vergüenza con De Jesús, entra inmediatamente y ve con tu prometido

-Si padre-baja un poco la cabeza como respeto deteniendose un poco para observar a su empleado-sirviente, guarde el carro, te quiero luego en la sala luego de hacer tu deber-sus gestos piden perdón por la conducta lamentandose, apenado voltea adentrandose a los grandes portones llegando a la sala principal

El de ojos marrones se aflige estacionando el carro con cautela sintiendo su corazón palpitar con premura.

La despedida con su madre fue melancólica que hasta llegó a rogarle que no tenía que sentirse mal de su ausencia aclarando la felicidad que obtenía al estar con ese pequeño ojiverde que en cualquier momento estaría casado.

Pero antes de retirarse dió un largo sorbo de su bebida preguntando a su delicada madre con sus nervios aflote sobre el dichoso amor.

Ese sentimiento desconocido que seguía en duda si alguna vez lo presenció o cual era el significado.

¿Que pasaría si llegaría en algún momento?¿Correría lejos para no sentirlo? Pero entre las palabras de su progenitora lo puso a reflexionar dudando en variedad de cosas.

-Nunca vas a dejar a esa persona cuando amas en verdad, sabrás que es el indicado cuando tengas tus ojitos brillando y anhelaras su regreso-aclara recordando aquellos momentos de su romance

Aunque ansía que llegue...como un simple sirviente como él descubriría el amor, sabiendo la realidad de su entorno negando rotundamente aquel suceso.

como un simple sirviente como él descubriría el amor, sabiendo la realidad de su entorno negando rotundamente aquel suceso

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𝑪𝒖𝒆𝒏𝒕𝒐 ¦¦ ᴊᴏᴇʀɪᴄᴋ ¦¦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora