-14- (E)

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" Los que decían que el diablo no podía ser mujer, jamás la conocieron a ella y su talento para hacer pecar."

Me despierto escuchando unos gritos de mujer, ya sabía de quien era el grito  así que simplemente me levanto de la cama para ir al baño.

En cuanto me veo al espejo no puedo evitar llorar, detengo mi respiración intentando calmarme. Vuelvo a respirar sintiéndome mejor, me quitó la ropa para entrar a la ducha.

Limpio cada parte de mi cuerpo con tanta fuerza que se queda marcado, termino de ducharme para colocarme una ropa interior y luego el único vestido negro que hay en el armario, su falda es suelta mientras que en el pecho es apretado. Me colocó unos tacones que suenan mientras camino hasta el comedor.

— ¿Vas a un funeral,niña?— la chica esta tan pegada a Max que simplemente tomó una uva para morder la un poco con una sonrisa.

— Como sigas de perra con él, No me quedará de otra que ir a tu funeral. — termino de introducir la fruta a mi boca mientras ella se levanta de la falda de Max y camina hasta donde mi. Mientras lo hace yo uso el cuchillo esparciendo la jalea por el pan que tome.

— ¿Me estás amenazando?— pregunta cerca de mi rostro, Max se levanta para intentar separarnos. Yo le doy una mordida al pan con una sonrisa.

— Yo no amenazó querida, yo solo te advierto. — tomo el cuchillo con fuerza y lo espetó tan cerca de su mano que puedo ver su mano pintarse de rojo, yo sonrió.  — Toma eso como una prueba.— le guiño un ojo para tomar a Max de la corbata y subir por las escaleras jalando de su corbata.

— ¿Estás celosa?— toma asiento, muerde su labio divertido. Yo simplemente lo tomo del mentón alzandolo, pone sus manos en mi cintura. Cuando su mano baja y intenta introducirse debajo del vestido la detengo, la alejo de mi para sonreír.

— Maximiliano Moretti.— lo llamó por todo su nombre viendo sus ojos dilatarse. — Te aconsejo no tentarme ni provocarme. — me acerco a sus labios dejando un beso corto, bajo por toda su quijada hasta llegar a su oído. Muerdo su oreja para luego pasar mi lengua un poco, el jadea un poco.

— Porque el que va a perder, serás tú.— doblo su mano con fuerza, el se aleja para sostener su brazo. Yo simplemente tomó asiento en la silla para colocar mi cabello en una caleta alta, cuando estoy lista simplemente tomó mi bolso y las gafas.

— ¿Iras al aniversario de la muerte de tu padre?— le preguntaría como es que lo sabe, pero el recuerdo de él con mi información llega a mi mente.  Simplemente asiento ante su pregunta, salgo de la habitació con el detrás.

— No creo poder ir... hay varios policías buscándome y aún que no sepan quién soy, podría pasar algo. — me coloco mis gafas en cuanto bajo por completó, Lizmar se separa de la chica cual me mata con la mirada para ir a mi lado. Yo le doy una sonrisa a Max.

— Tampoco te pedí que me acompañaras. — le guiño un ojo para al fin colocarme las gafas y salir de la mansión, los guardias son amenazados por parte de Max quien amenaza de matar a cualquiera que deje me pase algo.

El me abre la puerta del auto y yo entro, me mira recostado de la puerta.

— ¿Cuanto durará esta actitud?— pregunta, analizo su postura arrogante.

El Rey De La Mafia #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora