Zee Pruk es un guapo adolescente, el cual recién llegado a la cuidad de Bangkok se enamora de su egoísta, promiscuo y temperamental vecino Sanit Suppapong de su misma edad. Este tiene un hermano llamado Saint dos años menor, quién suspirará en secre...
Ya en la noche y tras estar con su padre y ver que estaba mucho mejor, los chicos aconsejados por el personal sanitario fueron a casa a descansar y regresar en el día siguiente.
Los cuatro chicos se subieron en un taxi pues no tenían coche y regresaron a su vecindario donde tras despedirse se fueron a descansar cada uno a a su hogar.
Sammy preparó algo de cenar para su hermano y para ella y se sentaron en la mesa de la cocina, aunque ninguno de los dos comió gran cosa pues la tristeza le podía al hambre.
-Zee...
-Si, dime.
-¿Por qué no has venido en tanto tiempo?, ¿En serio no has tenido ganas de volver en todos estos años?-preguntó la chica removiendo su sopa.
El mayor suspiró nostálgico.
-Cada día pero fui incapaz de hacerlo.
La chica suspiró.
-Sé que lo que te pasó con Peter y luego con Sanit fue muy doloroso pero papá ha llorando cada noche mirando tu fotografía... Él notó mucho tu ausencia, bueno las dos lo hicimos y ...
-Se lo que me vas a preguntar Sammy y sí, si regresaré a Hong Kong.
Esta se molestó y soltó la cuchara inmediatamente.
-¡No puedes irte otra vez!, ¡lo destrozaras!, ¡él nos necesita!.
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-Tú puedes cuidar de él, pronto volverá a ser él mismo... Yo no puedo quedarme-dijo el moreno ligeramente molesto también.
-Zee, yo tengo planes con Sara y los he aplazado pero en cuanto papá pueda valerse por él mismo, me iré de casa...Regresa y termina tu carrera aquí, han pasado cuatro años, ¡deja de ser un maldito egoísta y un cobarde!, ¡enfrentalo de una maldita vez!-Sentenció la chica levantándose de la mesa y corriendo escaleras arriba.
El moreno se quedó solo en la cocina removiendo su sopa mientras daba vueltas a lo que le había dicho su hermana y también Saint, quizás tenían razón y podía terminar su carrera en Bangkok pues quizás ya no le afectaría tanto encontrarse con el pasado y tan solo era miedo irracional el que estaba sintiendo.
Además su padre estaba convaleciente y estaría largo tiempo así, no podía dejarle toda la carga a su hermana pequeña, ya era un hombre hecho y derecho.
—Sammy tiene razón, soy un cobarde y debo enfrentar esto y seguiré adelante o siempre estaré huyendo.
De repente cogió su móvil y marcó el numero de su madre.
-Mamá, ¿puedes hacerme un favor?
-Claro pero ¿Y tu padre?- escuchó al otro lado de la línea.
-Se pondrá bien....mamá, he decidido quedarme, así que estudiaré el último curso en la Universidad local, ¿Puedes arreglarlo todo ahí por favor?
-¿Estás seguro, hijo?.
-Si, lo estoy pero por favor dime que lo harás.
-Si por supuesto, mañana iré y hablaré con tu decano, no creo que haya problema si le explico la razón.
-O.k, muchas gracias mamá, adiós.
Estaba hecho, solo esperaba ser fuerte y no flaquear para salir lastimado de nuevo y poder seguir adelante con su vida.
