ＳＨＩＮＥ | Ushijima Wakatoshi

Act. 13: individual vs numbers

Narra la autora

El tercer set dio inicio con básicamente un "nada pasó", como si el segundo set no existiera y eso quedó más que claro cuando Shiratorizawa se hizo con aquel set. "La fuerza mental del número 10 regresó con sólo una advertencia del viejo y aunque no es un colocador que sobre salga... Tiene lo suyo", pensó Mizuki mientras observaba el juego con un imperturbable semblante serio; Ushijima por otro lado continúa lanzando sus cañonazos como si nada y dejando en claro por qué él es la estrella del Shiratorizawa. El cuarto set comenzó después de un breve descanso, el marcador mostraba nuevamente que ambos equipos aún se mantenían paralelos sin dejar que uno de los dos se adelantara mucho.

----- Si nos enfrentáramos a Shiratorizawa en un partido de práctica, ¿tendríamos oportunidad, senpai? ----- inquirió de repente la rubia a su mayor.

La peligris permaneció un momento en silencio y luego se giró a mirarla.

----- Existe la posibilidad, con algunos ajustes en la defensa y unos cuantos en la ofensiva ----- respondió -----. Aunque debo admitir que probablemente también tengamos algunos problemas para detener por completo a Ushijima, estaríamos casi como lo está Karasuno ahora mismo pero con algo más de ventaja.

Finalmente llegaron a al borde del set, en otras palabras deuce, mientras el balón continuaba en su monótono vaivén Mizuki notaba que ya algunos de los chicos estában rozando el límite del cansancio y lo entendía, pues la primera vez que jugó un partido de cinco sets, al cuarto ya se sentía cansada. El punto que había marcado el empate lo había hecho el peliolivo, la joven nunca se había imaginado que algún día vería a Wakatoshi haciendo una finta para conseguir un punto y ahora que lo hizo no pudo evitar sentirse emocionada. Sin embargo, gracias a los buenos reflejos y astucia del pequeño cuervo; Karasuno ahora celebraba la victoria de otro set ganado a su favor, por lo que ahora ambos equipos estaban empatados con dos sets ganados cada uno y eso significaba una única cosa: el último set iba a ser el definitivo.

----- Wooooohhhooo ----- la peligris no había podido contener su alegría por lo que ya estaba en el balcón y su voz había resonado por toda la cancha llamando la atención de ambos equipos -----. ¡Buena jugada Hinata-kun! ¡Sólo un set más! ----- gritaba Mizuki -----. Demuéstrale a todos que... Mi voluntad es absoluta y que no me equivoqué al hacerte mi discípulo.

El pequeño pelirrojo miró hacia arriba con la emoción a flor de piel.

----- ¡Eso haré, Mizuki-senpai! ----- respondió el pequeño dando saltos de emoción.

La joven le sonrió y gritó a los chicos un "ustedes pueden" que fue respondido con gritos de regreso que respondían "eso haremos".

----- Desde que la conocí en la secundaria siempre pensé que Mizuki tenía un increíble aire de realeza, como si se tratara de una reina ----- habló Eita quién veía la escena desde la banca del Shiratorizawa donde estaba reunido el equipo -----. Pero ahora que la veo así, como toda una líder sólo puedo pensar una cosa: que es como si fuera la santa capitana Juana de Arco liderando a su ejército hacia la victoria.

Flashback [Narra Eita]

La ceremonia de nuevo ingreso era para muchos una completa pesadilla, me incluyo en ese "muchos" pero lamentablemente no era algo que se pudiera evadir tan fácilmente. Los cientos de estudiantes que ese día ingresábamos a la secundaria ya estábamos presentes en el salón de actos conmemorativos, mientras el director daba su típico discurso de bienvenida ya habían algunos cuantos que deseaban irse ya de aquel lugar y sin embargo, no sería posible pues ahora quién tomaría la palabra sería la estudiante representante de nuestra generación, en otras palabras quién había tenido el puntaje más alto en el examen de ingreso.