IV.

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Fyodor había entrado al juego que el mismo denominó 'purga' debía exterminar a la agencia y a la port mafia, pero había alguien dentro de aquella organización de mafiosos, había recuperado a aquellas luz que creyó extraviada, había recuperado a su querido Chuuya.

-Fyodor-san, la agencia de detectives se encuentra cerca de su Ubicación.

-entiendo, igual ya iba a salir encargate del tigre y su amigo.

Sus planes si bien habían sido interrumpidos por los miembros de la agencia aun no había acabado todo su plan, aun debía volver a ver a Chuuya.

-¿lo encontraste ya?

-si Fyodor-san, el libro donde lo encerraron ya se encuentra conmigo, y descuide el joven que entró junto con el salió hace mucho.

-bien traelo conmigo rápido

Tal vez sus planes por conseguir un futuro sin esos seres inmundos se había arruinado ese día, pero todo había válido la pena por volver a ver a aquel amigo suyo de antaño.

-flashback-

El internado, o mejor dicho el laboratorio de ratas con poderes era donde Fyodor conoció a a Chuuya, Yokohama no era una cuidad hermosa y pacífica como todos pensaban, en realidad el Gobierno era un lugar lleno de personas inhumanas, capturaban niños huérfanos con poderes para tratarlos como experimentos y contra restar a futuras amenazas y quien sabe incluso volverlos esclavos a la fuerza.

Pero a Fyodor realmente no le importaba si lo capturaban o no, después de todo su poder había matado a miles de personas marginandolo a él como un monstruo temido incluso por los niños que se encontraban en ese campo de ratas.

Todos los días era igual, siempre lo molestaban por esa maldición que llamaban poder en la cual el mataba con solo un toque de su tacto, no podía controlarlo por ello nunca recibió una caricia o un abrazo.

El jamás pudo tener un amigo y en ese campo no era diferente, siempre se peleaba con otros niños y miraba como otros simplemente ignoraban ese echo como Chuuya. Siempre lo observo pero nunca hizo nada para defenderlo, seguramente el le temía igual ¿verdad?

Un día una organización enemiga había ingresado a ese laboratorio donde estaban y habían secuestrado a Fyodor ya que habían averiguado su poder seguro ellos pensaron que si lo controlaban su organización sería invencible.

¿Trato de usar su poder? claro que si, pero no pudo se había dado cuenta que le inyectaron un tranquilizador que lo dejó en un estado paralizado donde solo podía oír y ver que pasaba, pero ¿qué más daba? Al final, este mundo jamás fue justo con el, otros momentos de sufrimiento ya le daban igual, se había resignado a la muerte.

Pero escucho pisadas y vio como sus captores cayeron al piso siendo noqueados por una sombra, ¿quién era? ¿Por qué arriesgaba tanto por el?

Entonces lo vio, Chuuya lo había ido a salvar y sin tener miedo de que el calmante había pasado o no, cargo a Fyodor en su espalda como pudo.

-Chuuya... Pero... ¿Por qué estas aquí? Puedes morir si es que se pasa el efecto del calmante- habló con gran dificultad pero fue perfectamente entendido por Chuuya.

-porque eres mi compañero, jamás dejaría que te lleven como si fueras cualquier cosa

-pero si siempre estoy peleando con todos y tu solo observas...

-es verdad, pero es porque se que eres lo suficientemente fuerte como para defenderte, pero esta vez es diferente y para no perderte tuve que luchar.

"Tengamos un futuro juntos" [Soukoku vs Fyoya] <finalizado>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora